La oscuridad de tus brazos

Capítulo 24

Jessica Jackson.
Martes 7 de Marzo. 23.00
°
Sus dedos acarician mis labios, sonrie y suavemente se desprende de mi lado.
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-Siempre he intentado tener cabeza, controlar mis sentimos, mis actos... Pero tú, desde el primer segundo que te tuve junto a mi te convertiste en una necesidad. -explica.
-Oviedo... -murmuro.
-Llámame Jesus. -me mira.
-¿Tu nombre es Jesús? -pregunto sonriendo dulce.
-Sí ¿no te gusta? -alza una ceja.
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Agarro su americana pegándole a mi mientras rio y beso sus labios con una extrema suavidad.
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-Te pegaba Paco. -bromeo sobre sus labios
-¡Venga nena! -alza la voz riendo.
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Este hombre tiene la sonrisa más hermosa que jamás encontré, el corazón puro pero algo me dice que muy dañado.
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-Tengo miedo. -murmura.
-No tengas miedo. -susurro.
-Una vez me rompieron el corazón y ahora... Tú... No soportaría que tú también me lo hicieras. -dice dulce.
-Jamás haría daño a alguien que amo. -murmuro.
-Somos desconocidos. -asegura.
-Poco a poco. -encojo mis hombros.
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Acaricia mi mejilla, sonrie dulce y me besa.
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-¿Puedo llevarte a casa esta noche? -pregunta.
-Puedes. -sonrio.
-¿Puedo ayudarte con la mudanza? -pregunta.
-¿Quieres saber donde viviré? -bromeo.
-Puede. -muerde su labio.
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Me besa chocando con la mesa y me sube a esta riendo.
Me llaman, lo miro extrañada al mirar que es mi padre y suspiro.
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-Hija ¿por qué esas maletas? -pregunta realmente triste.
-No tendrías que haber mirado. -advierto.
-¿Te marchas? -pregunta.
-Sí. -susurro.
-¿Podemos hablar cuándo regreses? -pregunta.
-Mejor mañana. -digo impresionada por su voz.
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Cuelgo, me sorprendo y Jesus toma mi rostro besandome.
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-Mi padre... Estaba triste porque me voy, debería alegrarse. -murmuro.
-No sé que decir. -se aparta.
-Nene. -lo agarro.
-No quiero hablar de familia. -suplica.
-¿Qué pasó con la tuya? -pregunto.
-No preguntes. -suplica.