Donghyuck era como un niño.
Mark lo supo desde el primer día. Donghyuck era inocente, energético y travieso. Como un niño.
Los primeros días no había pasado nada, pues el híbrido estaba en su escondite. Pero luego de que logró que saliera de ahí, más de una vez había encontrado un par de cosas rotas y una que otra tela rasgada (como las cortinas). Aunque después de enterarse de que Baekhyun se la pasaba por su departamento, entendió porqué tanto desastre.
Aún así, estando solo Donghyuck podía ser igual de travieso que estando acompañado. Por eso, se suspendió de la cama al escuchar lo que pareció ser un par de cosas cayéndose y un chillido animal que definitivamente no pertenecía a su gatito.
Corrió lo más rápido que pudo evitando tropezar, buscando a Donghyuck por todo el departamento. Lo encontró en la sala, en su forma humana, sosteniendo algo contra el suelo mientras su cola se movía con clara emoción.
—¿Hae? — preguntó, acercándose cuidadosamente al felino. El mismo, al escuchar su llamado, volvió a verlo sin aflojar la presión de sus manos. —¿Qué tienes ahí?
—¡Un ratón! — exclamó alegre. Mark se sobresaltó un poco al escuchar otro chillido del animal apresado. Sonaba como un roedor, pero realmente no creía que fuera un ratón. En su edificio no habían ese tipo de cosas, estaba bastante bien cuidado. —¡La encontré en la cocina! Quiso escapar, pero yo fui más rápido. — contó, sonriendo con orgullo.
—¿Ah, sí? — Haechan asintió. —Muéstrame.
El híbrido, siendo extrañamente obediente en esa ocasión, encerró entre sus manos a su presa. Mark extendió las propias, y entonces Donghyuck procedió a dejar al animalito en manos de su dueño.
—Hyuck, esto no es un ratón. — dijo, viendo al pobre temblando en sus manos, probablemente de miedo. Y cómo no, si semejante cosa le estaba pasando.
—¿No? — preguntó, ladeando la cabeza. Mark se sintió fuera de lugar por pensar más en lo lindo que se veía el moreno que en lo que estaba pasando en ese momento.
—No. Es un hámster. — aclaró, acariciando con cuidado al pequeño para intentar calmarlo. Debía de estar muy asustado. Ni siquiera intento escapar.
—¿Hámster? ¿Como Dongpyo?
—No sé quien sea, pero sí. — respondió con duda, encogiéndose de hombros. —Lo encontraste en la cocina, ¿no? Debe de haber entrado por la portilla. — miró con atención al rodeor, notando que ya está más calmado. Donghyuck sólo estaba de pie, observándolo en silencio. —¿Tendrá dueño?
En gatito se encogió de hombros. —Igual podemos buscar.
Realmente no debería importarme, pero su dueño debe de estar preocupado por él, pensó Donghyuck. Llevaba poco tiempo viviendo con Mark, pero más de una vez había sentido el olor de ese sentimiento. No le gustaba.
El canadiense asintió, de acuerdo con la idea de su mascota. —Vamos.
Procedieron a salir, quedándose en la puerta ya que realmente no sabían a dónde demonios debían ir. ¿Deberían hacer un cartel para encontrar al dueño del hámster? Parecía una buena idea.
—¡Jisung!
Al escuchar ese grito, ambos miraron al final del pasillo, notando a un chico peliazul viniendo en su dirección. Lucía agitado, y bastante preocupado.
—Disculpen, ¿no han visto un hámster? Es de este tamaño y— se detuvo, bajando sus manos al notar lo que había en las manos de Mark. —¡Jisung, amor! ¡Pensé que te había perdido para siempre!
Grande fue la sorpresa de ambos, al ver al roedor escabulléndose de las manos de Mark y su pequeño cuerpecito transformándose en uno humano. Un chico rubio y aparentemente inconsciente de su desnudez se abalanzó al peliazul, mismo que correspondió rodeándolo por la cintura en un apretado abrazo.
—¡Minhonnie! ¡Me querían comer! — lloriqueó, escondiendo su rostro en el cuello del más alto. Los tres miraron hacia la puerta del departamento abriéndose, encontrándose con Donghyuck, que venía saliendo del departamento con ropa. —¡Ay, ahí está! ¡Sálvame, Honnie! — chilló, subiéndose a la espalda del mencionado, mirando al minino con temor.
El chico —¿Minhonnie?— los miró a ambos con una ceja alzada. —¿Qué?
Mark suspiró, avergonzado. —Larga historia.
El peliazul no cambió su postura, en cambio abrazando al pequeño hámster de forma protectora. —Tengo tiempo.
Donghyuck suspiró, acercándose y evitando el impulso de rodar los ojos al ver al roedor aferrándose más al que parecía ser su dueño. —Lo siento, ¿bien? Por favor, acepta esto como disculpas. — refunfuñó, extendiéndole la ropa.
Jisung asomó su cabeza, sonrojándose al apenas notar que estaba desnudo. Tragó saliva, viendo al peliazul con duda. —¿Puedo? — preguntó con timidez.
Minho inspeccionó al otro híbrido, suspirando al ver que sus intenciones eran sinceras. —Adelante, bebé.
—No piensas cambiarte aquí, ¿o sí? — preguntó Donghyuck, entregándole primero una toalla. Jisung negó, tomándola y envolviéndose con la misma. Regresó al lado de su dueño, quien lo abrazó de la misma manera que antes. —¿Prefieren pasar? Así aclaramos todo esto.
¿Por qué hacía todo esto? Ni siquiera él mismo sabía. Lo único que sabía era que estuvo mal pensar que el roedor —Jisung— era un ratón. Y sí, tenía todas las intenciones de hacer lo que el rubio tanto temía.
Tanto que había rogado porque no le pasara otra vez... Taehyun definitivamente se reiría si le contara.
Minho dudó, mirando al que parecía ser el dueño del departamento. —¿Está bien?
Mark asintió, algo sorprendido por la actitud que su minino había tomado. ¿Desde cuando podía ser así? Y él que creía que siempre tendría el comportamiento de un niño.
Estaba tan equivocado.
Los cuatro pasaron, y los dos humanos se dedicaron a charlar, disculparse o agradecer, mientras los híbridos hacían las pases. Al parecer lo lograron, porque más temprano que tarde pudo ver a Jisung sobre la espalda de Haechan, con el minino paseándose por toda la sala.
—Por cierto, no me he presentado. — habló el peliazul, sin apartar su vista de la bonita escena que montaban ambos animales. —Soy Lee Minho. Un gusto.
Mark estrechó la mano que el contrario le extendía, sonriendo sutilmente. —Mark Lee.
Charlaron por un rato más, hasta que fue momento de que Minho se retirara. Ambos híbridos se lamentaron, quedando en el acuerdo de que Minho algún día llegaría para seguir jugando.
Donghyuck sonrió, genuinamente feliz, despidiéndose de Jisung en la puerta.
Había hecho un nuevo amigo.
•°•°•° 🐈 °•°•°•
preguntita rápida.
¿les gustaría que hubiera m-preg?

ESTÁS LEYENDO
cat || markhyuck
FanfictionMark no sabía que realmente necesitaba compañía, hasta que conoció a Donghyuck.