cat || markhyuck

🍉; O15.

Jeno y Chanyeol corrían lo más rápido que podían, faltándoles pocas calles para llegar al edificio. Estaban preocupados. En todo lo que llevaban corriendo no tuvieron ni rastro de Mark, lo que significaba que, o estaba cerca, o ya había llegado.

Aunque el más preocupado era Jeno, sabía que Mark iba a estar enojado. Y lo peor es que sería sólo con él, por no haberle dicho que Haechan (¿debería seguir llamándolo Haechan?) era un híbrido.

Pero ese pequeño sentimiento de que Mark podría dejar a Haechan era el que más le atemorizaba.

Él estaba dispuesto a hacer cualquier cosa por que no fuese así. Mas en ese momento solamente podía rezar.

Se detuvieron unos pasos antes de llegar a la puerta, dándose una última mirada, ambas cargadas de pura preocupación y miedo. Chanyeol asintió, su mano tomando el pomo de la puerta y girándolo lentamente.

El chillido de una voz que conocían demasiado bien los alertó, provocando que tropezaran con sus propios pies al entrar al departamento.

La escena que se mostraba ante sus ojos los desconcertó.

—¡Suéltame! — volvió a chillar Donghyuck, intentando zafarse del agarre que Baekhyun mantenía a su alrededor.

La situación era algo ridícula. Al menos así lo veía el rubio.

Baekhyun tenía apresado a Donghyuck, como ya había dicho, dedicándole una de sus miradas asesinas al canadiense, quien estaba de los más tranquilo sentado en uno de los sofás. El gatito menor luchaba para liberarse e ir con su dueño, suponían los otros dos.

—¡No!

—¡¿Pero por qué?!

—Ahora que ya puedes mostrarte frente a Mark me quieres traicionar. — puchereó el pelinegro, aflojando un poquito el agarre.

El aludido alzó una ceja, viendo al minino incrédulo. —¿Qué?

Donghyuck hizo un gesto, indicándole a su dueño que no le prestara mucha atención a lo que decía su hyung, para luego girarse hacia el otro híbrido. —No es verdad.

—¿Qué pasa aquí? — preguntó Jeno en un susurro. El canadiense, quien a pesar del ruido que hacían los dos híbridos (especialmente Baekhyun), pudo escucharlo, y volvió a verlo tal cual la niña del exorcista. Jeno tragó, mostrándole una sonrisa inocente y algo temblorosa al mayor.

"Hablaremos más tarde" gesticuló. Jeno asintió repetidas veces, preparándose psicológicamente por cualquier cosa que Mark pudiera decirle.

¿Qué le pediría esta vez?