Cuando finalmente pudo reaccionar, fue cuando el sonido de la puerta lo sacó de sus pensamientos. Aturdido, se levantó para ir a abrir, siendo recibido por la brillante sonrisa de Felix. El australiano sacudió las manos en forma de saludo, pidiéndole entrar, a lo que él se hizo a un lado para permitírselo.
—¿Dónde está mi bebé?— preguntó una vez adentro, paseando por el lugar, su sonrisa agrandándose al encontrar a su cachorro en el sofá, sentándose al lado del mismo y dando suaves caricias en sus orejas y cabello.
Seungmin ni se inmutó. —¿Cuántas veces tengo que decirte que no soy tu jodido bebé?— se quejó, aún así sin apartar la mano del pecoso. Después de lo que su naricita había sentido, eso le estaba calmado considerablemente. Olisqueó el aire una vez más, frunciendo la nariz ligeramente al ya no sentir el olor, suspirando aliviado al percatarse de que aparentemente no había ocurrido eso (no aún), gracias a todos los cielos.
Aún así, le parecía extraño el que Donghyuck no quisiera que nadie entrara a la habitación. Si no estaba en celo, ¿por qué se encerraría? Sí lo vio algo extraño cuando volvió de tomar aire fresco, pero el olor lo sintió un momento después, así que las cosas no cuadraban.
Ya lo descubriría. Primero tenía que calmarse completamente. Él era bueno controlándose, pero el olor era demasiado fuerte y adictivo para poder soportarlo. Oh.
Ahora que lo pensaba, sí que había un olor de ese tipo. Pero ese olor no pertenecía a Donghyuck. Era fuerte y demasiado dulce, y aunque era verdad que cuando los híbridos entraban en ese estado su aroma era más perceptible, no cambiaban ni nada por el estilo. El olor de Donghyuck era más fresco, algo dulce, pero sin llegar a ser empalagoso como el que había percibido. Extraño. También pudo notar cuando sostenía su vientre bajo la sudadera, por lo que pensó que le dolía el estómago por comer tantas galletas y solamente necesitaría descansar un rato. Y, de ser necesario, hacer una de esas cosas que Felix le había enseñado para ese tipo de malestares.
¿Qué demonios estaba pasando?
Ambos humanos se miraron confundidos al ver al cachorro levantarse, caminando hacia la habitación en la que el gato se encontraba. Lo siguieron de cerca, aún más el dueño del departamento al esperar conseguir que su minino les dejara entrar a la habitación.
Si Haechan estaba en ese estado, ya sabría que hacer. Pero primero tenía que confirmarlo, y, si así era, echar aunque fuese a patadas a aquellos dos.
Seungmin olfateó una vez más el aire, cerrando los ojos con fuerza al volver a notar el olor llegando a su sensible nariz. Dando todo de sí para concentrarse, lo analizó, medio sonriendo al confirmar su teoría. El olor no pertenecía a Donghyuck. Alguien más estaba ahí.
—No es Donghyuck— habló, haciendo que Mark suspirara aliviado y Felix lo mirara confundido, sin entender nada.
—¿Entonces?
—Hay alguien más ahí adentro— respondió, apretando su nariz con dos de sus dedos para no seguir sintiendo ese olor. Antes lo había tomado desprevenido. No quería volver a sentirse así.
Mark frunció el ceño, acercándose para tocar la puerta. —Amor, abre.
—¡No!
—Donghyuck.
—No.
—Entraré por la fuerza si no abres.
—No me importa.
—No más galletas para ti.
—Puedo soportarlo.
—Ni mimos.
Silencio. Mark sonrió, sabiendo que había dado en el clavo. Escuchó un par de ruidos más, antes de que el rostro de Donghyuck se mostrara en el espacio que dejaba la puerta entreabierta, mirándolo con súplica.
—Sólo tú.
Seungmin, captando la indirecta, le dio una sonrisa al felino, quien devolvió el gesto apenado, antes de tomar la mano de su confundido (e idiota) dueño y salir del departamento. No sería quién para estar de entrometido. Por ahora podía conformarse con saber que su teoría era cierta pues, si realmente fuese Donghyuck, ni siquiera habría podido levantarse.
Una vez estuvieron fuera de su vista, Donghyuck dejó entrar a Mark, mismo que se cerró la puerta, apoyándose en esta, esperando una explicación.
Donghyuck desvió la mirada, temeroso. —Ya puedes salir.
Y Mark se esperaba muchas cosas, menos ver a una chica salir del baño de la habitación.
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cat || markhyuck
FanficMark no sabía que realmente necesitaba compañía, hasta que conoció a Donghyuck.