Me quemaba la espalda, lo hacían aún más los brazos...pero todo era con un único fin.
-Yoonnie, ¿vas bien? - asentí lentamente antes de bajar la mirada hasta mi pies.
Hoy era nuestra primera sesión con láser para borrar las marcas de nuestros cuerpos, pero al parecer duele más de lo que pensamos.
Estaba sentado en una especie de cama de masajes, pero lejos de eso habían tres personas a mi alrededor con aquellas pequeñas máquinas en sus manos.
Mi pecho descubierto se encontraba con el cuero del asiento, y esas tres personas trataban de eliminar lo máximo posible todas las cicatrices visibles en esos tres lugares.Pensé que aquella quemazón era incómoda, pero al escuchar un pequeño quejido de JiMin a mi lado no pude evitar preocuparme.
-JiMinnie...-como pude extendí mi mano, dejando un poco sorprendida a la que trataba de hacer su trabajo. Tan solo tomé la mano de mi menor y acaricié sus pequeños dedos, haciendo se relajará.-Pensaba que tenías más aguante, Park.
El rubio bufó y rodó sus ojos, como si estuviese exagerando, pero no era así. Lo supe cuando dió un fuerte apretón en mi mano.
-Oh, venga, pequeño. Pasará pronto...
Me sentí observado, pero realmente no me importaba.
-Aguanta un poco más, ¿sí? - cómo pude entrelacé nuestros dedos en el intento de darle fuerzas para seguir.
Sabía que era sensible a los golpes de calor, y eso era precisamente lo que aquellas máquinas nos daban.
-YoonGi's si. -una voz masculina llamó mi atención y la del menor, quien rápidamente volvió a quejarse- ¿No le gustaría arreglar su heterocromía?
¿Acaso iba enserio...?
-Es una anomalía muy poco común y, sinceramente, parece muy molesto que estéticamente no haya simetría de color.
Me quedé durante un tiempo pensándolo seriamente, quizás tenía razón, quizás por eso la gente me rebaja, me dice que soy diferente o...quizás por eso me tratan como a un monstruo.
Negué con mi cabeza levemente ante mi propio pensamiento.
¡Yo no soy nada de eso!
Es solo que la gente no está preparada para mí.
-Oiga...yo no...
Y me interrumpieron, lo hicieron para decir la mayor estupidez que había escuchado en mi vida...esta vez fue una mujer joven que recogía unos bloques de hielo del congelador.
-Sí, oppa. Si quiere que una chica bonita se fije en usted tiene que ser bonito también.
-Soy gay. -los sonidos de las máquinas fue lo único que se escuchó en la sala, eso y mi corazón latiendo a mil por hora- Y no necesito ser perfecto para él. - señalé a JiMin, quien me miraba con sus brillantes ojos como si acabase de hacer lo más importante del mundo- Ni para nadie...sólo para mí. - mi mano cayó junto a mi timidez.
Estaba harto de la gente as, y no estaba dispuesto a tener que seguir soportándolo.
-Sí estoy aquí es porque esto no es parte de mí...así que, si no te importa, me gustaría que siguieras con tu trabajo...
No esperaba eso...para nada lo esperaba, de hecho, ni siquiera sabía que me habían escuchado fuera de aquella sala, pero al parecer todas las personas en el piso se habían acercado hasta donde nosotros estábamos.
Primero fue una mujer mayor chocando sus manos, pero después de eso un fuerte aplauso se escuchó en el lugar.
Sonreí tímidamente y miré a mi menor, quien me sonreía incluso con los ojos mientras acariciaba la piel en el dorso de mi mano.La chica que dijo aquello tuvo que marcharse totalmente avergonzada por el comentario que había dicho, pero ya todo estaba hecho.
Tiempo después volvimos a casa, mi espalda dolía como la que más por haber empezado a borrar cinco cicatrices que estaban repartidas desde mi cuello hasta la cintura.
Estaba tirado boca abajo sobre mi cama, con dos bolsas de hielo sobre la piel y con el pelaje de mi mascota chocando contra el rostro.
JiMin estaba en una situación parecida, solo que él utilizaba las mismas bolsas que yo ya que tenía sus brazos apoyados sobre ellas.
-Fuiste valiente... - un pequeño beso calló sobre mi mejilla, esa que no estaba aplastada contra el colchón.- Estoy orgulloso de ti.
-Creo que has dicho eso mucho en muy poco tiempo... ¿Debería preocuparme? - ambos reímos por un buen rato, pero cuando el frío hizo su efecto y nos liberamos de aquellas bolsas todo se volvió más relajado.-JiMin...¿Te puedo contar una cosa sin que te enfades? - pregunté aquello entre murmuros mientras jugaba con su flequillo, el mismo que le llegaba por la punta de la nariz si lo estiraba.
-Claro, ¿cómo me iba a enfadar contigo, Gatito?
Bueno...enfadar no, pero sí decepcionar.
-Cuando fui a comprar hace un par de semanas, yo...-bajé la mirada hasta nuestras piernas, las cuales se perdían con la del otro. - Puede que viese unas lentillas y...
-Eres idiota. -dijo de pronto. Ya solo me quedó suspirar y aferrarme a su cuello en busca de una disculpa- Supongo que ni siquiera las habrás abierto, pero...¿Cómo se te ocurre?
Buena pregunta, Park. Buena pregunta...
Me quedé en silencio por un largo tiempo, pero cuando pensé en mi respuesta la solté sin más, siendo más triste y realista de lo que él quería escuchar, seguramente.
-A veces cansa no poder ser como los demás, JiMinnie. - reí amargamente y me recosté sobre su cuerpo, cerrando de paso mis ojos por el pesado cansancio que cargaban mis hombros - Soy un todo en uno...y a veces no puedo controlar el querer ser como el resto.
Un largo suspiro se escuchó salir de mis labios antes de perder la consciencia por completo, justo antes de viajar hasta el mundo de los sueños.
-Es complicado vivir como un monstruo...
-'Capítulo 248. Homosexual.'
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Memorias de un idiota 2 «ᴶⁱᵐˢᵘ/ʸᵒᵒⁿᵐⁱⁿ»
Fanfiction-JiMinnie... Espera un poco más por mi, por favor... Algunos mounstros tienen sus razones de ser, pero todos los idiotas nacen sin saberlo. Segunda parte de MEMORIAS DE UN IDIOTA «ᴶⁱᵐˢᵘ/ʸᵒᵒⁿᵐⁱⁿ» «ᴺⁱ ᶜᵒᵖⁱᵃˢ ⁿⁱ ᵃᵈᵃᵖᵗᵃᶜⁱᵒⁿᵉˢ ˢⁱⁿ ᵐⁱ ᵖᵉʳᵐⁱˢᵒ»