Ｍｅｍｏｒｉａｓ ｄｅ ｕｎ ｉｄｉｏｔａ 2 «ᴶⁱᵐˢᵘ/ʸᵒᵒⁿᵐⁱⁿ»

294

Por fin terminé de grabar, llevamos horas con esta canción, pero para mi no eran suficientes.

Lo cierto es que adoro la voz de Jimin, y ¿cómo no?, me encantaría poder cantar de esa forma.

Sí, el gran Min YoonGi cantando era algo...bastante deprimente.

Seré sincero, Diario.

No sé cantar.

O...bueno, si sé, pero no es que tenga una voz agradable para ello.

Traté de hacer alguna de las canciones, pero la idea de ser vocal se había apoderado de mí, y no me quedó otra que tratar de hacerlo con el interlude, todo por que la letra sería más corta, por lo que podría hacerlo de forma más rápida.
No sonaba del todo mal...tan solo le hacían falta unos cuantos cambios, unos pequeños arreglos y se acabó.

-YoonGi Hyung...¿Puedo pasar?

Aparté los auriculares que decoraban mi cabeza y suspiré, apartando la mirada de la pantalla por primera vez en todo lo que llevaba de tarde.

-Hyung, hemos hecho la cena...-asentí lentamente antes de soltar un corto "enseguida voy" que hizo suspirar al otro, quien guardó mi trabajo y apagó el dispositivo. - Dijiste que no te ibas a sobre-esforzar, Min.

-Yo...

-¿Has visto qué ojeras te han salido? ¿Acaso has probado algo de comida desde ayer?

Bajé la mirada hasta mis manos, las cuales empezaron a jugar entre sí, o al menos así fue hasta que la mano de Hoseok en mi hombro me hizo volver a la realidad.

-Sabes que si nos preocupamos es por ti...¿acaso quieres que te vuelvan a ingresar y que te obliguen a comer? - negué con mi cabeza, totalmente desagradado con aquella idea.

Nunca me gustaron los hospitales, y mucho menos estar así, dependiendo de los demás para sentirme bien.

-Está bien...vamos.

-Espera. - juro que iba a levantarme, lo habría hecho si ese odioso mareo no se hubiese metido en mi cabeza. - Hyung, ¿estás bien?

Pensándolo bien...no comí nada desde ayer en la mañana, y mi desayuno ayer solo había sido una taza de café, así que....

Mis ojos se cerraron por si solos por el fuerte mareo que se apoderó de mi. Exacto, ese con el que ni siquiera me pude mantener en pie por más de cinco segundos seguidos antes de volver a caer.

-YoonGi Hyung, déjame que te coja para llevarte hasta el salón, allí podrás descansar mejor, ¿de acuerdo?

Me negué, realmente lo hice, pero para cuando quise darme cuenta Jung ya estaba bajando las escaleras conmigo en sus brazos, cargado al estilo princesa.

-¿Yoonnie?

La voz de mi menor sonó demasiado alarmada. De hecho, parecía tan nervioso que incluso me acogió entre sus brazos y acarició mis mejillas con cuidado en busca de que algo estuviese mal.

-Cariño, ¿estás bien? Tienes la piel muy pálida...

-Minnie...-iba a cerrar mis ojos para poder descansar, pero antes de eso tenía que hacer otra cosa mucho más importante para mi salud.- Hambre...

Mi menor no tardó siquiera un minuto en acostarme en el sofá y traer nuestros platos de comida, aquellos que desaparecieron conforme el sueño se iba haciendo más grande en mi.

Jimin me daba de comer mientras yo luchaba contra el sueño, o al menos eso hice antes de no poder seguir con la batalla.

-Min Hyung...ven aquí. - sinceramente ahora entiendo a Park.

Cuando estoy cansado soy mucho más cariñoso y afectivo, quizás fue por eso por lo que me dejé abrazar por NamJoon hasta quedar dormido sobre su pecho, escuchando los lentos latidos de su corazón.

-Parece mentira que haya cambiado tan poco... - la voz de NamJoon se hizo presente en el lugar, rompiendo el cómodo silencio que se había formado.

-Sigue siendo como un niño pequeño, es tan adorable cuando se lo propone...- dijo ahora Hoseok, dejando suaves caricias en mi cabello, cosa que me hizo profundizar más en mis sueños. - Oye...he estado investigando y supuestamente hay adultos que se comportan como bebés para reducir el estrés o superar el trauma de una mala infancia, creo que se llamaba "little space" -dijo con un tono de duda en su voz-¿Creéis qué YoonGi Hyung...?

Jimin negó suavemente y rió por lo bajo, casi siendo una risa silenciosa.

-Lo intenté hace unos años cuando le ingresaron por el alto estrés y ansiedad, pero no le gustó la idea.

-¿Se lo tomó mal?

El aroma de mi menor se había hecho más cercano, por lo que supuse que se había acercado a mi. Y obviamente lo confirmé cuando sus pequeños y rechochos dedos acariciaron mi mejilla.

-Bastante mal, la verdad. - una corriente de aire helado chocó contra mi, obligándome a encogerme en mi sitio para tener algo más de calor, lo que me llevó a hacer un pequeño puchero entre sueños. - ¿Sabéis? Creo que hace ese tipo de cosas inconscientemente...Es su forma de ser, es como un cachorro. - sus dedos bajaron hasta mi mandíbula, momento en el que comencé a soltar una especie de ronroneos por la cálida sensación.

Little space...realmente recuerdo aquella discusión con Jimin. De hecho, recuerdo no haberle hablado por una semana y media por el hecho de tratar de ponerme ropa infantil, un chupete en la boca o esos absurdos y extraños pañales.

Ese no es mi rol, definitivamente.

Si, es cierto, mi infancia no había sido la mejor y suelo tender a tener altos niveles de ansiedad, pero eso no tenía por qué hacer que me agrade comportarme de esa forma tan vergonzosa...o al menos estando despierto.

-Ven aquí, Gatito...no puedes dormir aquí, y menos con esa ropa.

-Ajolotes...por todas partes...atacan...

Con un pequeño suspiro me di media vuelta sobre mi mismo, acomodándome para poder seguir con mi extraño sueño.

-Buenas noches, mi vida...espero que no te coma un ajolote.

Sé que lo decía en broma, pero en ese momento yo realmente lo consideré una opción razonable.

¿Qué decir...?

¡Estaba rodeado de esos bichos!

-'Capítulo 294. Juegos de edad.'