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El día de ayer había sido divertido, tanto que me dejó exhausto, por ello, al llegar a casa terminamos de decorar mi habitación y nos acostamos para poder dormir de una vez.

Jimin seguía durmiendo, pero yo sólo podía pensar en una cosa que me llevaba loco.

Todos los regalos estaban envueltos y escondidos, sí, pero Jimin...el suyo quería que fuese mucho más personal, tal y como me había dicho mi hermano.

Por ello traté de sustituir a Kumamon por mi y me deslicé hasta salir de nuestra cama. Después de eso dejé un beso en su mejilla y acomodé su cabello, lo siento...no pude resistirme.

Pasaron un par de minutos hasta que por fin salí de mi trance, entonces solo me dediqué a ir al estudio que ya nunca usaba. Una vez allí traté de componer algo decente, pero de todas las melodías aleatorias, solo una me gustó lo suficiente como para ser digna. Pasé horas tratando de escribir una buena letra para la melodía, y...sinceramente, lo único a mi favor era saber a quien se la iba a dedicar.

Suspiré pesadamente al terminar los últimos retoques y se la mandé a NamJoon con un mensaje parecido a este:

"Necesito esto para Navidad. Quiero que consigas a Villain para hacerla, si lo haces prometo empezar a grabar después de año nuevo, te lo juro. "

Una vez terminado mi trabajo por hoy salí del estudio y comencé a caminar hasta mi habitación, lugar donde encontré a un muy cansado rubio durmiendo abrazado a mi peluche de Kumamon.

Sonreí suavemente y volví a sustituirme por aquel peluche, solo que esta vez al hacerlo pude notar el agarre más fuerte del menor en mi cintura.

Era como si tuviese miedo de que me alejara de él.

Pasaron un par de horas desde que me acosté con él a descansar, pero el recuerdo de la visita de hoy me hizo volver a abrir los ojos.

-Jiminnie...-me dolía...pero tenía que despertarle si quería ver a su padre llegar junto a HoSeok y Taehyung- Minnie...tienes que despertarte.

Traté de despertarle a base de caricias, incluso con suaves picotazos en sus mejillas, pero nada, no parecía querer despertar. Fue por eso que recordé las veces en las que, en vez de despertarme como ya lo había intentado, él empezaba a llenar mi rostro de besos y pequeñas mordidas.

Así que...sí, quizás funcionaría, ¿no?

Empecé con mi estrategia besando suavemente su mejilla derecha, después de eso pasé a besar su frente, nariz y las comisuras de sus labios. Aquel último roce hizo que soltara un pequeño quejido y me abrazara más fuerte, al parecer era más inteligente de lo que pensaba... ¡Lo estaba logrando!

Una vez más besé cada una de sus comisuras, tentando antes de que él despertará por completo y me acercase hasta empezar una danza pacífica con nuestros belfos.

-Buenos días...

¿Qué decir...? Su rostro de recién levantado debería ser considerado una de las siete maravillas del mundo.
Aquellos párpados inchados, los labios abultados, el pelo revuelto y los ojos medio abiertos eran de otro mundo.

-Vamos...van a llegar enseguida.

-No~ - Jimin hizo un pequeño berrinche y se removió entre las mantas. Buscando mi calor y un buen escondite, acabó bajó el jersey que desde el ayer llevaba, dando pequeños besos de gnomo con su nariz en mi pecho que me hicieron reír. - Wow...no hay ni una sola cicatriz aquí, Yoonnie.

Levanté mi ceja mientras reía y suspiré alegremente, dudando sobre preguntar por lo que acaba de decir.

¿Qué más da?

-¿Y cómo sabes que no hay si no ves nada?

Las templadas manos de mi menor se posaron sobre mí vientre, cosa que me estremeció al instante.

- Lo sé porque ahora tu barriguita está tan suave como antes...me dan ganas de comerte, Gatito

-¿Qué tú qu...¡No! ¡Espera, para! - reí a carcajadas cuando sus labios se posaron en mi estómago.

No es lo que pensáis, de hecho está muy lejos de lo que quiere que estéis pensando.

Jimin había comenzado a soplar fuertemente en mi estómago, haciendo esas conocidas pedorretas que divierten a los bebés tanto como a los adultos.

-¡Ji.Jimin!-volvi a reír fuertemente, casi perdiendo el aire en mis pulmones.-¡Ayuda!

-Shhh...-el menor al fin salió del interior de mi ropa, pero solo fue por unos segundos, los suficientes como para sonrojarme desde los dedos de los pies hasta las orejas.- No querrás que papá y nuestros amigos piensen que eres mi bebé, ¿cierto?

Su bebé...

Vaya, por alguna razón había sonado bien, estúpidamente bien.

-No soy tu bebé...-sonreí de lado e hice rodar nuestros cuerpos, dejando a Jimin debajo de mi con una pequeña sonrisa.-Tú eres el mío.

Mhe...me gustaba más serlo yo, pero en algo tendría que superarle...¿cierto? Por muy mal que me callesen los niños pequeños, con él haría una excepción.

-¿Ah, en.enserio?

Sonreí levemente y asentí, acariciando con la punta de mis dedos desde el inicio de sus pantalones hasta sus mejillas, las cuales besé antes de levantarme del lugar y abandonarle para ir al baño a asearme.

-Lo eres, y como eres tan pequeño tendré que ducharme contigo... - levanté los hombros en una fingida negación cansada - ¿Qué se le va a hacer...? Mi deber es protegerte, Minnie.

-¿Quieres protegerme o es que quieres que yo te limpie el pelo y te dé un masaje en el cuello cuando te quejes porque "me duele porque no controlas la fuerza en mi cabeza, Minnie, deberías tener más cuidado"?

¿Enserio había imitado mi voz?

Rei fuertemente e hice lo mismo que él, o al menos traté de poner una voz aguda como la suya antes de meterme en la ducha.

-"Puede que sea por las dos, Gatito. "

-Espera, ¿acaso así me escuchas tú? ¡Mi voz no es tan aguda!

-Cariño...-acaricié la mejilla de mi menor y apreté mis labios, formando una pequeña línea para evitar que la risa saliese de mi sin permiso. Traté de sonar dulce, no le quería hacer enfurecer, pero era tan divertido ver como su rostro se tornaba rojo...- Solo los perros pueden escucharte.

-Ah.ah pu.pues tú eres un...un...tú... - levanté mi ceja de nuevo y solté una pequeña risa, una que le hizo sonrojar- Eres un...¡culo pálido!

Reí fuertemente, hasta el punto de necesitar agarrar mi estómago y miré a Jimin, quien tenía todo su rostro y orejas completamente rojas.

-Dime algo que no sepa.

-Amas mi voz...

-He dicho algo que no sepa, idiota.

-'Capítulo 277. Canciones para Park.'

Memorias de un idiota 2 «ᴶⁱᵐˢᵘ/ʸᵒᵒⁿᵐⁱⁿ»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora