El Amor no conoce la Muerte(G!P)

XL

Pov Poché

-Me encontré a Mario-.

Lo dije, no quería por razones que conozco a la perfección.

Escuchar como se empezaba a preocupar, a asustar, a poner nerviosa antes de que dijera la M. Ver cómo cambiaba su semblante poco a poco mientras lo decía hasta oír ese nombre. Con todo el esfuerzo del mundo por hacer que Calle supiera el reencuentro entre Mario y yo sabiendo las consecuencias, dije esas 4 sílabas.

Calle siempre a querido evitar el tema de Mario y como no hacerlo, a nadie le gusta recordar momentos de tristeza o dolor. Las veces que se hablaba, se mencionaba o tan siquiera se referían a el sin decir su nombre. Llegaban los recuerdos y se bloqueaba. Como la vez de la pesadilla, bueno también depende de cómo se sienta. Llegaba a quedarse todo un día sin hablar. En casos extremos sin comer o moverse. Ahí ven una de las razones por la cual fue mejor alejar a Mario de mi vida, para proteger a Calle.

-Bueno, Mario, digo como así?-habló!?-solo se apareció?¿Quiero saber que hace ahí?-esta actuando de manera muy buena, con muchas preguntas pero se está abriendo a crear una conversación a pesar de lo que está escuchando.

-Bueno, trabaja en la escuela, ya estaba ahí desde hace un tiempo y pues si fue una sorpresa para mí también. Quiero pensar que ya no es el mismo, es que ya lo veo tan diferente a cómo era antes-comienzo a expresar el cambio que demuestra Mario y Calle tiene una cara de no creerlo, es decir, como de asombro. Y cuando termine me dijo lo siguiente.

-Oh, pues supongo que está bien, bueno no es que me importe pero ya no voy a dejar que afecte en mi vida. Va a ser difícil sentir que está presente de nuevo y no me interesa lo que haga, pero que tampoco se meta, solo cuéntame cómo les va...para saber de...de ti-.

Algo la hizo cambiar de reacción ante esto. Es como si de verdad le interesara aunque sea un poquito saber de la relación que tenía con el, acto que por todo lo que fuera, nunca creí que pasaría. Conozco a Calle, tiene miedo ahora mismo, pero está enfrentando una realidad, que a su tiempo lo estará logrando.

-Creí que esto te molestaría-agaché la cabeza sonriendo en mis adentros por ya no tener que pensar en un plan para que no viera a Mario en la escuela y actuará mal o se pusiera de esa forma.

-Pues no es la noticia que entusiasme a todo el mundo pero confío en ti y si tú me dices que no se meterá para lastimar, está bien. Pero tengo que ver para creer. No ahora, en algunos meses o años sabré lidiar con ese idiota.Jajaja Admito me llegó un miedo, pero es buen momento para enfrentarlo empezando por mi misma-me acerqué a darle un beso pasando mis manos en su nuca y ella recibiendo me por la cintura acercándome más a ella logrando que me sentara en su regazo. Después de un rato me separé unos centímetros de sus labios, abrí los ojos y ella aún los tenía cerrados, rozamos nuestras narices. La mire con amor y orgullosa por lo que está haciendo. Ella pegó nuestras frentes y nos quedamos así.

-Te amo-le dije.

-Yo también y mucho más-contestó sacando una sonrisa y suspirando- hay algo más que me quieras decir?-fingí que lo pensaba y después solo la volví a besar, con eso mantendría el ambiente amoroso que teníamos ahora.

-Eso es un no?-negué y nos volvimos a besar, está vez más apasionado, comenzando a pasar nuestras manos por debajo de las prendas y ella recostando me en la cama.

-Calle, házme tuya-dije desesperada.

-Pero está Vale, no podem... Ahhh!- acaricie a callesito pasando por debajo de su pantalón que creo ni se dió cuenta que desabroché-esta bien pero no hagas ruido-y así comenzó a quitarme prenda por prenda.

No quería romper este momento, estaba tan relajada ahora pero después pensé en la segunda razón por la cual estaba así de seria y tensa. Nunca debí dar el "si" como respuesta. Mis neuronas, o son tan estúpidas o fue algo que yo quería hacer. Mi corazón dice que lo haga y quisiera ponerle un pero. Aunque sea solo uno, de igual forma solo será porque ya no lo había visto hace mucho y la verdad si lo extrañaba.

Mario me invitó a salir.