XLI

824 70 1
                                    

Pov Calle

Mario de nuevo será parte de mi vida. Pedirle a Poché que se salga de lo que le gusta solo por un miedo mío no es para nada justo. Tengo que aprender a llevar está situación y no dejar que los miedos me ganen. Obvio no confío en Mario, para nada. Pero lo bueno es que no sabe con quién se está metiendo. No tiene ni idea de que se trata de Poché, ni de mi. Algo me dijo Poché con respecto a Mario. Algo de que intentó cambiar o algo así. Lo veré cuando lo vea claro, pero de igual forma tendré mucho cuidado con el.

Tuvimos una tarde un poco agitada y después de eso nos quedamos dormidas.
Me dedique a observarla y noté que Poché comenzó a despertar, se veía tan hermosa cada vez que tocaba dormir juntas. No puedo imaginar perder de nuevo la oportunidad de pasar con ella cada momento de nuestras vidas. Estábamos cómodamente desnudas en la cama, ella con una pierna encima de la mía y recostada en mi pecho.

-Hola-me dió su sonrisa con sus ojitos casi cerrados eran como las 5 de la mañana.

-Hola amor, como dormiste?-la abracé quedando muy pegaditas y juntando nuestras frentes.

-Pues la verdad muy bien, nunca podría ser mejor después todo-me sonrió con picardía acercando su boca para encontrarse con la mía y disfrutar del sabor que tenían nuestros labios-no tengo nada que protestar-los besos seguían  de mi boca a mi mandíbula, después a mi lóbulo mordiendo suavemente. Pasó a mi cuello. Chupándolo y besándolo a su gusto.

-bueno entonces hay que hacer esto más seguido, no crees?-me puse encima de ella acorralado la con mis brazos a sus costados dando entender el dominio que quería tener y comenzamos un beso apasionado y sensual. Nuestras lenguas se toparon iniciando un baile, eso solo lo hace más exitante a la vez que cuando terminaba el beso mordía mi labio inferior, eso me encanta.

Tenía tantas ganas de repetir lo de hace rato que me perdí en la pasión que llevaba este acto y con una fuerza que no logré desafiar ni predecir. Quedé bajo su cuerpo. Era su turno de tomar el control y no me iba a oponer, no tenía la más mínima intención de parar. Ya que empezó a dar movimientos lentos sobre mi entrepierna, chocando su intimidad con mi miembro. Haciendo que este despertara y que yo dejara salir un gemido.

Solo se escuchaba el sonido de nuestras respiraciones agitadas, unos cuantos gemidos y jadeos. A punto de que comenzará meter mi ya erecto miembro a su intimidad. Sonó un golpe en la puerta. Era Vale.

-Poché! Recuerda que tenemos que ir a la escuela! Ya no quiero llegar tarde de nuevo-manteniamos nuestra posición, pero Vale tenía razón. Me resigne a la idea de tener que esperar horas para verla.

-Calle hoy llegaré un poco más tarde, saldré con un amigo-eso me lo dijo cabizbaja y de ahí fruncí mi ceño. "SALIR" QUE?!

-Salir? Con quién?!-esto se llama celos amigos, pero yo no soy así, confío en Poché para que me den celos.

-No te preocupes, solo es una salida de amigos amor-pero con quién?! Si al principio digo amigo, no hay problema en saber cómo se llama. Ya que solo me mencionó a Alejo y a Mario. Se siente raro decir que son amigos. Quien será ese "amigo"?

-Esta bien pero si pasa algo me dices, si?-se lo dije con un puchero, recibiendo besos que iniciaban un ambiente más relajado.

-Claro, te mantendré al tanto de todo si quieres. Que celosita te volviste-se separó de mí y se fue al baño para arreglar se.

-Tu me vuelves así!-le dije en voz alta para que me escuchará a lo que me correspondió con su risa.

Busque mi ropa para igual irme a casa de Pau antes de ir a ver lo de la disquera. Ya era tiempo de aparecer, si no creo que demandarían al hospital por secuestro o seguirían usando mi nombre para tener más demanda comercial.

Poché después de unos minutos salió ya bañada y con la ropa puesta. Ya solo faltaba maquillarse. Yo mientras salí a la cocina para prepararme un café. Encontrándome con Vale platicando con una chica, supongo que va en alguna de sus clases ya que estaba hablando de una presentación para hacer un concurso estudiantil. La chica es linda.

-Buenos días Vale-voltearon a verme y solo agarré una taza de la alacena para servirme café como me gusta.

-Hola Calle, mira te presento ella es Maddie, una... una amiga- esa pausa me suena muy conocida.

-Hola, mucho gusto-le di la mano y ella la aceptó un poco nerviosa, estás niñas traen algo- me llamo Daniela pero dime Calle-.

-Mucho gusto, ya tenía ganas de conocerte-.

-Vale, que hermosas amigas tienes, debería ir a tu escuela más seguido-comenzaron a reír y Maddie se sonrojo por mi cumplido.

-Mh y para qué irías más seguido a la escuela, si se puede saber?-estaba frita, me tocó el hombro un poco fuerte y comenzó a presionar.

-esta yo...a...a nada solo para...para ir a recogerlas-gobernada me dicen.


El Amor no conoce la Muerte(G!P)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora