El Libro Encantado

60. Enfado

Mike miró la raíz que sujetaba al hombre en el aire antes de que lo matase. La ira recorría su cuerpo solo con recordar el llanto de Rory, debido a la atrocidad que le había hecho ese hombre. Giró la cabeza y a pocos metros vio a Elisa de rodillas, con las manos en la cabeza, llorando. Se acercó hasta ella a paso lento. Mientras se aproximaba, abrió y cerró la mano rápidamente y la raíz y las rosas volvieron dentro de la tierra. Cuando estuvo a su lado, se agachó despacio, la miró y le arremetió una bofetada que la tiró al suelo. Elisa se quedó unos segundos tirada en el suelo mientras volvía de nuevo a la realidad.

- Reacciona subnormal - dijo Mike enfadado.

Elisa se incorporó del suelo y se llevó la mano a la zona dolorida. Miró a Mike a los ojos y dijo:

- ¿Tengo que seguir solucionando tus errores Matt?
- ¿Qué?¿Matt? - dijo Mike muy confuso. - Deja de decir chorradas y levanta.
- No fue todo mi culpa - dijo Elisa apunto de ponerse a llorar de nuevo.
- ¿Que cojones estás diciendo? - dijo Mike apretando los puños para no soltarla otro bofetón. - Rory ha estado a punto de ser violada mientras tú estabas aquí rebozándote en tu propia mierda y ahora me dices, ¿que no ha sido todo tu culpa?¿De qué narices estás hablando?

Se produjo un breve silencio.

- ¿Rory?¡Qué Rory qué!¿Mike? No entiendo nada, ¿qué está pasando? - dijo Elisa confundida.

Mike estaba enfadado y confundido al mismo tiempo. No entendía por qué Elisa se estaba comportando de esa forma, no era consciente de lo que estaba pasando a su alrededor.

- ¿En serio no eres consciente de lo que ha pasado? - preguntó Mike intentando calmarse un poco.

Elisa negó con la cabeza.

- Tiene que ser una broma - dijo Mike. - Casi violan a Rory delante de tus narices y tú mientras tanto estabas de rodillas en el suelo sin hacer nada, ¿te acuerdas ahora?

Elisa volvió a negar con la cabeza, pero esta vez se sentía avergonzada y frustrada. Realmente no sabía que había pasado, solo que había detectado a los habitantes del pueblo Krey y después de eso, solo sentía desesperación. Buscó con la mirada a su amiga y la encontró a lo lejos, tapada con una manta, acurrucada al lado de Vatar, temblando levemente. Giró la cabeza y se encontró nuevamente con la mirada de Mike, sus ojos todavía no habían vuelto a la normalidad, seguían color verde muy intenso y en ellos se podía ver que el joven no estaba de humor.

- Yo... lo siento... no me acuerdo de nada... - dijo Elisa muy arrepentida.

Se escuchó un ruido a lo lejos, provocando que Elisa y Mike desviaran la mirada hacia la zona de donde había provenido el ruido.

- No te molestes en recordar preciosa - dijo una voz.

Los dos guardianes se quedaron mirando fijamente la zona de donde había provenido la voz, que era la misma zona que la del ruido, y pudieron divisar entre la niebla una silueta con alas que se acercaba hacia ellos lentamente.

- Me conozco todos vuestros puntos débiles jovencitas - dijo la voz. - Os he estudiado a la perfección para que no tuviera que mancharme las manos, pero ese maldito Roger ha fallado en su misión.
- ¿Roger? - dijo en bajo Elisa mientras miraba a Mike.

En ese momento, Mike miró a Elisa y le hizo un gesto para que se levantara. La joven asintió, se levantó del suelo y los dos jóvenes se pusieron en guardia.

- Prepárate - dijo Mike serio.

Elisa asintió y el iris azul de sus ojos cambió de color a un rosa pálido intenso. Rápidamente se llevó las manos al pelo y se hizo una coleta con su propio pelo para estar más cómoda. Cuando la silueta se acercó lo suficiente, los guardianes pudieron observar que se trataba de un hada. El hada tenía el pelo corto negro, tenía los ojos levemente rasgados y el fino iris de sus ojos era color miel. Tenía los labios pintados de negro. Iba vestida con unos pantalones ajustados y una camiseta de seda, cuyo dobladillo lo tenía anudado a la altura de ella barriga. De su espalda le salían unas alas grandes, largas y trasparentes, parecían las alas de una libélula. El hada se paró y miró de arriba a abajo a los chicos, como si los estuviese analizando con la mirada.

- Bueno, bueno, veo que Roger no ha fallado del todo - dijo el hada. - Ha sido un golpe de suerte para ti el reaccionar a tiempo.

Hizo una breve pausa, miró a su alrededor y vio detrás de los guardianes, más alejados, a Rory y a Vatar.

- Más que reaccionar a tiempo, que te hayan salvado a tiempo - continuó hablando el hada.

Elisa miró a Mike esperando a que le explicase de que estaba hablando el hada. El joven, ignorando a Elisa y sin dejar de mirar al hada, se llevó una mano al costado. Elisa observó los movimientos de Mike y pudo ver que la zona del cuerpo que se estaba cubriendo estaba llena de sangre. La joven ahogó un grito y el hada se echó a reír.

- Aunque te hayan salvado, como no trates esa herida rápido serás mi marioneta muy pronto - dijo el hada mientras se reía.

Mike se separó la mano del costado y Elisa pudo ver claramente la profunda herida que tenía en esa zona.

- Ahora no es momento de explicaciones - dijo Mike. - No tengo idea de quién es, pero tenemos que salir de aquí cuanto antes, apenas me quedan fuerzas.

Elisa asintió y los dos guardianes se lanzaron contra el hada. El hada sonrió y miró al suelo. Segundos después, del suelo salieron varios zombies delante de ella. Elisa al reconocer a los muertos se frenó en seco. Mike miró a Elisa y gritó:

- ¡Reacciona!

Acto seguido, el joven dio un salto y comenzó a girar sobre sí mismo mientras un montón de hojas iban envolviéndolo a la vez que giraban alrededor de él. Cuando Mike estuvo completamente tapado por las hojas, se oyó un chasquido y las hojas salieron disparadas hacia el hada. Un zombie, al ver el ataque, se puso entre medias para recibirlo él en vez del hada, pero Elisa al ver las intenciones del muerto, extendió las manos y se abrió un portal delante del zombie que se tragó el ataque de Mike. Rápidamente separó un poco las manos y se abrió otro portal detrás del hada, del cual salió el ataque del joven. El hada lo recibió de lleno, soltó un grito de dolor y segundos después señaló con el dedo a Elisa. En cuanto realizó dicha acción, un zombie salió corriendo hacia Elisa. La joven retrocedió unos cuantos pasos asustada. De repente, una cabeza de dragón salió del suelo y se tragó al zombie antes de que llegara a Elisa. La guardiana, al reconocer el hechizo, miró hacia atrás y vio a Rory de pie, se notaba que se había vestido rápidamente, tenía la manta en la mano y la otra mano la tenía extendida al frente.

- Ya hablaremos después. Ahora céntrate.

Elisa asintió. El hada soltó una carcajada, puso las manos al frente con las palmas hacia arriba y del suelo comenzaron a salir zombies sin parar.

- Os voy a dejar las cosas claras. El ataque a Hudisia ya ha comenzado, mi único cometido es entreteneros aquí el máximo tiempo posible, pero viendo el estado en el que estáis no vais a poder ganarme en la vida. Y creo que voy a añadir un muerto más a mi colección - dijo el hada mientras miraba a Mike.

A todos se les heló la sangre al escuchar esas palabras, habían llegado tarde.