El Libro Encantado

95. Retirada

Scott y Zarut corrieron hasta donde estaban Jack y Leo peleando. Cuando se acercaron un poco más vieron a Luxus observando la batalla y detrás de él al Rey Demonio inmovilizado.

- Pero qué... - dijo Scott sin dejar de correr.

Zarut analizó brevemente la situación.

- Tú ve a ayudar a Leo - le ordenó. - Yo voy a apoyar a Luxus.

Scott asintió y se separaron.
Leo atacó a Jack invocando una llamarada pero el joven lo bloqueó creando un escudo de agua. Leo le miró enfadado, estaba empezando a cansarse de atacar y defenderse sin lograr golpearle. Se puso a pensar la manera de poder atacarle, Jack aprovechó el momento para crear un torrente de agua que fue directo hacia Leo. El joven, al estar sumido en sus pensamientos, no le dio tiempo a reaccionar, pero el hechizo se congeló antes de llegar a golpear a Leo.

- Supongo que era cuestión de tiempo que vinieras - dijo Leo con una sonrisa en el rostro. - Gracias.

Jack se quedó un poco confuso porque Leo no se había movido mientras hablaba, no había dejado de mirarle. Al segundo, la expresión en su rostro cambió al ver a Scott aparecer detrás del joven. Jack y Scott se quedaron mirándose a los ojos durante unos segundos. Rápidamente los dos se lanzaron al ataque a la vez, Jack invocó varios proyectiles de agua mientras se acercaba, Scott chasqueó los dedos congelando los proyectiles en un abrir y cerrar de ojos. Cuando se encontraron en el medio, chocaron sus antebrazos con fuerza mientras se miraban a los ojos. Leo vio sus miradas y se dio cuenta de que ya no eran aquellos chavales asustados y desconcertados que llegaron a la casa hace meses. Scott y Jack dieron un par de pasos hacia atrás mientras conjuraban un hechizo al mismo tiempo.

-Hechizo de hielo: pinchos de hielo. -Hechizo de agua: disparo acuático.

Ambos hechizos colisionaron generando una pequeña explosión que les obligó a retroceder unos pocos pasos más.

- No vas a atender a razones, ¿verdad? - le preguntó Scott.

Jack permaneció callado.

- Entiendo…

Dicho eso, Scott, impulsado por un hechizo de viento, se lanzó hacia Jack a una velocidad que le fue incapaz de esquivar y le asestó un puñetazo en toda la cara.

- Vuelve en ti - dijo Scott con voz potente. - Lucha, sé que me oyes Jack.

Jack se alejó un poco de Scott y se limpió la sangre de labio. Acto seguido, creó entre sus manos una pelota de agua envuelta en energía de color amarillo.

- Planeta acuático.

Lanzó la bola contra Scott. A medida que se le acercaba, se fue haciendo más grande hasta adquirir un tamaño tan descomunal que incluso el grupo que estaba combatiendo contra Inés paró la pelea al no saber que estaba pasando. Scott puso las manos al frente e intentó contrarrestar el hechizo congelando el agua, pero tenía tanto volumen que no le iba a dar tiempo, además de que casi la tenía encima. Llevaba un poco más de un cuarto congelado cuando decidió optar por la opción de cubrirse con algún hechizo. Fue a crear un escudo de viento, pero instantes antes observó como un rayo de color azul cruzaba de lado a lado la bola gigante, un segundo después la bola estalló como si se tratase de una pompa de jabón. Todos los que había alrededor quedaron calados hasta los huesos, incluidos Luxus y Zarut, Scott miró a Leo y vio a su amigo con el iris de sus ojos de color rojo y en su hombro brillaba con fuerza la runa.

- ¿Estás seguro de esto? - preguntó Scott.

Leo asintió.

- Acabemos con esto de una vez.

Luxus y Zarut estaban observando la pelea de los chicos con bastante detenimiento mientras vigilaban que el Rey Demonio no se moviera. Simultáneamente, el Rey Demonio no dejaba de gruñir, hablaba brevemente de vez en cuando intentando provocar a Luxus, pero era completamente ignorado.