El Libro Encantado

89. Sureste II

El temblor de la tierra provocado por el descontrol de la magia de Kryox cada vez era más intenso, hasta que llegó al punto de convertirse en un fuerte terremoto. Todos se mantenían en pie como podían. La Reina Hada batió sus alas con fuerza y elevándose unos pocos metros sobre el suelo, voló rápidamente hasta donde estaban las chicas con Theron, cogió a Theron y se alejó del suelo. Rory, en cuanto vio a la Reina Hada, hizo un gesto amplió con los brazos y de su espalda salieron dos grandes alas de mariposa. Acto seguido, cogió a Rita por la cintura y moviendo sus alas con fuerza, volaron hasta alcanzar a la reina. Desde el cielo, todos miraron al suelo, se estaban formando grietas por todo el terreno, contemplaron desde el aire todos los destrozos que estaba causando Kryox mientras en sus cabezas buscaban a toda velocidad una forma de pararlo, hasta que sus miradas se encontraron con la mirada del hombre. Kryox se los quedo mirando durante unos segundos, después bajó los brazos, cerró los puños y los empezó a subir como si estuviese levantando unas pesas. Mientras subía los brazos, trozos de tierra empezaron a desprenderse del suelo y a subir al mismo tiempo que iba subiendo sus extremidades. Cuando tuvo los brazos hacia el cielo, hizo varios gestos rápidos, como si les estuviese lanzando cosas invisibles, provocando que los trozos de tierra saliesen disparados hacia ellos. La Reina Hada y Rory realizaban maniobras en el aire para esquivar todos los escombros. Theron ayudaba a la Reina Hada con pequeños hechizos simples de largo alcance cuando veía que no iba a ser capaz de evitar el ataque, sin embargo, Rita no conocía ningún hechizo de ese estilo, por lo que Rory tenía que evadir como podía el ataque ella sola. Trozos de tierra bastante grandes salieron disparados hacia la joven, pudo esquivar uno de ellos pero el segundo le golpeó de lleno haciendo que cayesen en picado. Theron al ver que las chicas estaban a punto de estrellarse contra el suelo, hizo un movimiento rápido con la mano y creó un colchón de energía justo debajo de ellas, parando su caída. Simultáneamente, un escombro se dirigía directo a la Reina Hada, Theron al no poder ayudarla en ese momento, la reina tuvo que realizar una maniobra muy brusca, pero, aun así, no pudo esquivar el ataque del todo y le golpeó en la mano que sujetaba el orbe. Debido al impacto, abrió la mano dolorida, soltando el orbe. La esfera cayó al suelo a unos pocos metros de Rory y Rita. Rory, al ver que Kryox se había dado cuenta de que había soltado el orbe, corrió directa a cogerlo y el hombre, viendo las intenciones de la joven, dirigió todos sus ataques hacia ella. Rory se lanzó a por la esfera, estaba tan pendiente de que no acabara en manos del hombre que no se dio cuenta que al mismo tiempo todos los escombros estaban a punto de golpearla. En el momento que tocó el orbe, este se transformó en energía de color rosa que se introdujo dentro de ella, acto seguido, todos los trozos de tierra impactaron en el mismo lugar, aplastando a Rory sobre una montaña de escombros.

- ¡RORYY! - gritó Rita desesperada al ver aquella escena.

Rápidamente, la joven realizó el mismo hechizo que había hecho previamente para ver a través de los escombros y para su sorpresa, Rory no se encontraba debajo de aquella montaña de rocas y tierra, la joves estaba de pié, detrás de la montañita. Una fuerte explosión destruyó todos los escombros que había delante de Rory, Rita se tapó la cara protegiéndose de los trozos voladores. Cuando volvió a mirar al lugar donde estaba Rory, vio a la joven con sus ropas un poco rotas, sus ojos eran de color morado intenso, en el vientre tenía grabada la runa que había en el interior del orbe y esta brillaba con fuerza. Tenía la mano abierta con la palma mirando al cielo y de su palma salía una pequeña cabeza de dragón de color blanca que de su boca salía humo.

- ¡NO! - gritó Kryox - ¡Tú! ¡Zorra!
- Oye ya basta de insultos ¿no? - respondió Rory con un leve tono juguetón.
- ¡Devuélvemelo!
- Va a ser que no.

Kryox gritó de rabia nuevamente mientras daba una fuerte palmada, generando varias ondas de energía que cortaban todo a su paso. La cabeza de dragón se giró para mirar a Rory y la joven la acarició suavemente mientas observaba como se acercaba el ataque.

- Te toca pequeño - dijo mientras miraba la cabecita. - Dragón Sagrado de las hadas.

Acto seguido alzó la mano sobre la que estaba el dragón y este empezó a salir de la palma de su mano. A medida que el dragón iba saliendo, se iba haciendo más y más grande. Cuando estuvo completamente fuera, su tamaño era veinte veces mayor que cuando estaba sobre la mano de la joven. Rory señaló con el dedo el ataque de Kryox y el dragón lo anuló de un zarpazo, después, la joven abrió sus brazos, apareciendo en su espalda unas preciosas alas de mariposa. Voló hasta posarse en la cabeza de la criatura. Aleteó levemente sus alas y a cada lado se formó un pequeño tornado que parecía de purpurina plateada. Al mismo tiempo, el dragón abrió la boca y dentro de ella empezó a acumular energía.

- Rugido del Brillo Sagrado de las hadas.

En cuanto Rory nombró su ataque, la energía acumulada en la boca del dragón salió disparada en forma de láser hacía Kryox, simultáneamente, Rory hizo un gesto con las manos, lanzando los pequeños tornados que había a sus lados. Los movimientos se combinaron resultando en un rayo plateado envuelto en pequeños brillos. Kryox levantó muros e hizo hechizos rápidos para intentan parar aquel ataque tan descomunal pero inevitablemente, el rayo impactó de lleno contra él. El hombre gritó de dolor y, cuando el ataque cesó, cayó al suelo como el tronco de un árbol viejo.

- Ahora sí que no se levanta - comentó Rory mientras bajaba volando con delicadeza al suelo.

Cuando Rory tocó la superficie del suelo, automáticamente el dragón y sus alas desaparecieron. La joven se tambaleó un poco, estaba exhausta, pero antes de que se cayera por el cansancio fue sujetada por Rita que había salido corriendo a ayudarla. La Reina Hada voló hasta el suelo, cerca de las chicas, al aterrizar soltó a Theron y se acercó a Rory.

- Déjame que te ayude.

Rory asintió ante las palabras de la reina. El hada se acercó a la joven y le posó la mano en el hombro, seguidamente su mano empezó a emitir energía curativa. Rory sintió un aire cálido dentro de su cuerpo y cómo sus fuerzas se recuperaban poco a poco.

- Gracias - dijo Rory.
- No hay de qué - respondió la Reina Hada. - Os necesitamos en el mejor estado posible. Hemos ganado la pelea en la zona sur de la ciudad, pero esto no acaba.

Rory asintió, preparándose mentalmente para luchar de nuevo y miró a Rita que también asintió como si le estuviese leyendo la mente. Mientras tanto Theron miraba la runa marcada en el vientre de Rory.

- Qué curioso, has absorbido el poder de Kryox, ¿cómo te sientes? - preguntó Theron.

Rory se quedo pensando unos segundos.

- Me siento agotada, esos hechizos nuevos consumen demasiado poder - respondió. - Pero yo no diría que es el poder de Kryox, diría que es más el poder de la Reina Hada.

Justo en ese momento la reina dejó de emitir energía y miró a Rory un poco confundida.

- Bueno no tenemos tiempo para una charla tranquila, ya hablaremos de esto con más calma - interrumpió Theron la conversación.

En cuanto Theron terminó de hablar buscó el libro con la mirada, cuando lo localizó lo recogió del suelo y todos se pusieron en marcha hacia el centro de la ciudad.