- Grant, mi cielo ¿no quieres otra cosa? Sabes que odio dormir incómoda.
- No mami, sabes que no pude asistir al campamento y me prometiste que acamparíamos juntos y qué mejor que con papi, me lo prometiste – usó la cara que usaba con papá.
- Está bien, Grant – me abrazo – gracias mami, iré por la tienda, vamos papi – se llevo a Steve al almacén.
Fui a mi habitación a cambiarme de ropa, usé un pantalón negro, una camiseta ploma, una leñadora, un chaleco negro y un par de botines marrones, pedí pizza con extra queso, la llevé con mis poderes junto a tres Coca-Cola personales y una bolsa de malvaviscos, observé que Grant estaba armando la tienda de dormir junto a Steve, dejé las cosas encima de la mesa.
- Mami ¿podemos hacer una fogata?
- ¿para qué crees que son los malvaviscos? – le dije alzando la bolsita.
- Iré por leña – dijo sonriendo.
- Tráela para cortarla, con cuidado que se te clavé una astilla.
- Yo lo ayudaré – me dijo Steve, trajeron la leña y Steve empezó a romperlas con sus manos, pensé que este hombre realmente me traía loca, volteé a ver a Grant que solo me sonreía, le hice una seña de silencio, colocando mi dedo índice sobre mis labios para que no me delatara, él hizo una seña de que una llave ficticia cerraba sus labios, reímos, Steve levantó la vista hacia nosotros – ¿ocurre algo? – preguntó curioso.
- Nada papi, buscaré algo para que enciendas la fogata.
- No hace falta, mi cielo – le dije, acomodé la leña cortada por Steve con mis poderes para hacer la fogata, me senté alrededor, ellos imitaron mi acción y lancé una pequeña flama que la encendió.
- ¿yo también podré hacer eso? – preguntó Grant.
- Yo hago esto sin usar la fuerza Fénix, mi cielo, quizás cuando seas más grande podrás hacerlo, pero necesitarás mucha práctica y un traje especial, créeme podrás encender más que una simple fogata.
- Eres asombrosa, mami – dijo feliz.
- No más que tú, mi Capitán – hace tiempo no lo llamaba así, él me sonrió, Steve trajo la pizza y la bebida, empezamos a comer, Grant estaba feliz por estar con nosotros, empezamos a comer mientras Grant nos contaba cosas sobre su escuela, sonó mi teléfono.
- Hola Buck – dije por el teléfono.
- Perdón por interrumpirte, pero olvidé decirte que el entrenador de Grant me dio el nuevo uniforme después de lo que paso ayer, lo necesitara para su próximo juego.
- ¿te parece si me lo llevas mañana a la escuela para la reunión de Grant? Ya sabes cuánto demoran esas reuniones, sobre todo teniendo a la señora S como oradora – reímos.
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ME HACES SENTIR VIVO (Steve Rogers & tú) (Steve Rogers y tu) EDITANDO
أدب الهواةLa calidez y la dulzura de sus besos me hacían sentir maravillosa, mi lugar favorito era entre sus brazos, él era mío y yo suya. En estos momentos, solo importaba él, quería cuidarlo de mi misma, de la devastación que estaba causando, pero no podía...