Konosuba: El mundo maldecido por la diosa - Fan Autor

¡Vienen hacia nosotros, Kazuma que hacemos!

Parte 1

Sonidos de batalla llenaron la tenue habitación principal dentro de la fortaleza móvil, Destroyer. Las explosiones y el acero de las espadas fueron iluminados por una tenue luz roja que salpicaba en cada rostro de los luchadores. La lucha fue tan feroz que sacudió los lados del salón. A veces, la repercusiones podían ser sentidas incluso por aquellos magos que se resguardadas en el centro.

Hojas plateadas, lanzas de aire, hojas de viento volaban en todas direcciones, un interminable bombardeo de ataques se superpuso en el enorme salón.

Crack.

Los sonidos de los cuerpos chocando contra los golems y los gritos de guerra se mezclaron en una caótica conmoción.

La que una vez fue una sala donde Wiz y yo transportamos el corazón del Destructor se había transformado en un furioso campo de batalla.

— Que las manos de cien hojas lleguen a mis enemigos. Cuchillas de viento.

La pequeña Sapphee alzó su báculo y mando un aluvión de hojas de viento hacia el grupo de golems que seguía saliendo de las paredes negras. El ataque llegó en picada y comenzó a descender como furiosas lluvias asesinas, cuando los golems vieron lo que venía era demasiado tarde.

Otro grito se hizo escuchar.

— ¡Light of Saber!

En el extremo opuesto de la sala, un hechicero desató una magia intermedia de fuego para cortar a un enorme golem en dos. Rápidamente manipuló el flujo y comenzó a destruir a todos los que le rodeaban.

De inmediato varios aventureros se unieron con sus martillos de guerra y aplastaron a los que sobrevivieron en la batalla y expandieron su marcha con una valentía inquebrantable. Podía decir que por los números, había 15 aventureros contando a mi grupo. A comparación del número que llegó para acabar con el Destroyer éramos muy pequeños.

— ¡Kazuma, cambio!

Keith grito desde adelante.

Dio media vuelta y me lanzó su martillo de guerra, atrape el arma y apreté la empuñadura.

Cuando encontré a Eo me di cuenta que estaba sin mana. Después de pelear contra el Mitsurugi poseído, había acabado sin magia y tuve que quitarle a ella para poder usar teleport, eso provocó, al parecer, que se quedara en un estado de ausencia de mana. Se había vuelto una esfera roja, como la primera vez que la encontré.

— ¡Ahí voy!

Grite y active mi magia de fortalecimiento para aumentar mis fuerzas.

Rápidamente un golem se acercó y extendí el arma impactando en sus piernas. Ya en el piso le di el último golpe.

No podía descansar, varios se alzaron detrás del primero.

— Este grupo es demasiado pequeño. No aguantaremos mucho.

Le dije a Trax que estaba a mi costado. El con su enorme hacha destruía como mantequilla a todos los golems que se acercaban.

Mire a los lados alzando mi martillo de guerra para empujar a un par que querían empujar desde mi lado.

La verdad, pensé que el final de la batalla se había dado antes, pero el Destroyer salió con otra locura.

— La puerta desapareció y las paredes poco a poco se van reduciendo mientras siguen creando golems. Nos encontramos ante un evento problemático. Lo que podemos hacer es aguantar con valentía.

— No soy fanático de tratar con valentía, necesitamos hallar una salida. Dime, ¿Sapphe puede usar magia de perforación?

— Directo como siempre. Ella uso bastante mana así que necesita usar la fuente. Va a demorar, pero si puede. ¿Qué tienes pensado?