¿Puedes creer?

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CLEMEA


— ¡Corre!

— ¡¡Waahhh!!

Una vez llegamos a la cubierta varios golems comenzaron a formarse a alrededor nuestro

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Una vez llegamos a la cubierta varios golems comenzaron a formarse a alrededor nuestro. 

El evento sucedió de manera tan imprevista que nos obligo a correr despavoridas hacia la puerta mas cercana.

Una vez adentro cerré la puerta con todas mis fuerzas.

Inmediatamente el sonido de un puño se oyó desde el otro lado.

— ¡Hi!

Aqua y yo dimos un salto de susto. Gracias a dios que cerré la puerta a tiempo.

Las bisagras temblaron pero el material de acero resistió.

— ¿Qué demonio fue eso? 

Seguimos el camino que nos dejó Mitsurugi pero nunca pensé que estaría repleto de golems de tierra.

El golpe sonó nuevamente.

La puerta lo detuvo, pero no sabía cuándo iba a ceder. 

Mi lanza tiene poco poder contra enemigos con armaduras en todo su cuerpo. 

Para derrotar a los golems era necesario martillos de guerrra o magia intermedia, Aqua y yo no cumplíamos los requisitos.

Así que la única idea era ir por Mitusurugi.

— ¡Deprisa! Con Mitsurugi podremos salir de esta.

Aqua asintió a mis palabras y nos dirigimos al salón.

A comparación del laberinto que se nos impuso la otra vez, encontramos el salón bastante rápido.

Después de ingresar al salón había un par de puertas que conectaban con un cuarto más espacioso.

— Este lugar está hecho un caos.

Era un espacio más grande que la cubierta, el cuarto estaba rodeado por paredes de metal y en el centro había un pilar de hierro.

— ¡Fio!

Aqua me señaló a una integrante de nuestro grupo.

Fio estaba en el suelo junto a unos cuerpos empapados de sangre.

Cuando llegamos a ellos, uno de esos cuerpos se movió. Rápidamente apunte mi lanza. Era una mujer con el rostro palido, llevaba puesto una túnica y tenía un cuchillo en el pecho.

¿Sigue viva?

La mujer con pocas fuerzas en su voz, habló.

— ¡Por favor, sálvale! ¡Salva su vida!

No me miró a mí que tenía una lanza en la mano, se lo dijo a Aqua.

Luego de decir esas palabras la mujer se desmayó.

Konosuba: El mundo maldecido por la diosa - Fan AutorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora