El Destroyer hace su maravillosa introducción

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Mientras los aventureros compartían ideas para atacar al Destroyer, la primera defensa del pueblo comenzó a realizar las actividades de emergencia.

Al ser un pueblo de novatos el número de soldados era reducido, normalmente la ocupación de los soldados se llevaba dentro del pueblo, más concretamente en el control a los Aventureros y los ciudadanos comunes, pero debido a los constantes avistamientos de monstruos cerca de la ciudad fueron reunidos en su mayoría a la protección de las puertas del pueblo, eso ayudó a que rápidamente se organizarán antes que el gremio de Aventureros.

Un grupo comenzó a evacuar a los ciudadanos. Ordy se apresuró con su labor y llevó sobre su espalda a una señora de edad. Como novato se le otorgó esta misión, aunque era una tarea simple lo cumplió con todo el valor de un soldado. Una vez llegó al punto de evacuación dejó a la señora y salió corriendo para evacuar al siguiente. 

El pueblo de Axel tenía varias entradas. Sólo uno llevaba en dirección al Destroyer el resto de puertas se volvieron puntos de escape. Ordy tenía que terminar su trabajo y recién había empezado, cuando iba a llegar a la próxima persona el oficial que lideraba su pelotón lo detuvo y lo mando a la línea vanguardia. Acatando las órdenes se lanzó a la puerta del norte.

Si necesitaban ayuda de los soldados novatos quería decir que no terminaron la línea de la barricada.

Igual que el, varias personas se acercaron, no se limitaron a solo soldados, habían ciudadanos varones y varios grupos de hombres musculosos, por las ropas puestas eran indiscutiblemente maestros de la construcción y otros maestros de la agricultura. Todo el pueblo que podía hacer algo comenzó a arremolinarse en la puerta del norte.

El pueblo estaba luchando.

Cuando Ordy llego al punto de apoyo ya podía ver la parte superior del Destroyer. El bosque tapaba las patas y la enorme constitución de la araña, pero sin duda la enorme cabeza con los seis ojos sobre ella era la vista más espantosa que veía a lo largo de su vida. En un segundo le temblaron las piernas. El miedo se apodero de sus sentidos y por un momento quiso dar media vuelta para volver a ver a su amada. Sin embargo los hombres que solo fungían como ciudadanos comunes a su lado comenzaron a cavar zanjas y transportar madera en sus brazos. Ellos también veían la misma imagen que el, pero sin duda aunque su esfuerzo quizás fuera en vano para semejante monstruosidad, ellos estaban haciendo algo por el pueblo que amaban.

Ante esa imagen era imposible mirar atrás.


Parte 1

Cuando llegamos al punto indicado encontramos a los pueblerinos y los soldados trabajando como locos para construir una barricada temporal.

A pesar de ver la imagen del Destroyer sobre la superficie todos seguían haciendo sus actividades como si hubiera una esperanza para detener su avance. Sabían el desastre que les venía encima y no dejaron de ver la más mínima esperanza.

Este pueblo es muy grandioso para ser destruido. Así que protejámoslo.

* Así se habla maestro *

— Olvidé que puedes sentir mis pensamientos.

* No te avergüences de eso maestro. Sé que hay algo de héroe en ti. Muy dentro pero hay algo. *

El anillo en mi mano derecha comenzó a parpadear constantemente mientras sus palabras sacudían mi cerebro.

Cuantos recuerdos vinieron a mí, sentí una calidez en mis ojos, en serio que extrañaba esa cosa.

 ¿Cuánto tiempo paso? 

Solo dos semanas, pero parecía una eternidad. 

Es verdad que Eo se volvió alguien especial después de salir de la mazmorra de Deffel y no lo había tomado tanta importancia hasta que no la tuve conmigo. Demonios, es cierto que el sentimiento de algo que aprecias se vuelve más fuerte cuando no lo tienes cerca.

Konosuba: El mundo maldecido por la diosa - Fan AutorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora