Enamorado del mejor amigo de mi hermano [EMAH] | yoonmin

Hyung, por favor...

—Aparta tu mano de la mía, ¿quieres? 

A Yoongi le seguía desconcertando esa clase de cercanía y más cuando Hoseok no estaba presente.

—N-no sé si es lo correcto. —Jimin estaba igual o más incómodo que él—. Ese chico siempre está pendiente de nosotros.

Yoongi resopló y lo ignoró al quitar su mano de él. Que finjan ser pareja no significaba que tengan que estar así en cada momento.

—Eres muy buen actor, niño. Deberías dedicarte a eso —Namjoon tuvo cuidado de no subir el tono de su voz.

—No lo creo. Seré bailarín de ballet profesional —contestó tímidamente el pelirosa.

No era de hablarlo abiertamente, menos cuando los problemas económicos sacudieron a su familia, pero ese era su sueño desde que aprendió a caminar.

—Con que baile, ¿eh? —Los ojos de Namjoon pararon en su amigo—. Que coincidencias, ¿no?

Esta vez, Yoongi tuvo la fuerza suficiente para botarlo de su asiento después de empujarlo por hacerse el gracioso. Jimin, rápidamente, lo ayudó a levantarse mientras se disculpaba de manera forzada, pero sin poder borrar su sonrisa.

«Es el peor. ¿Dónde se ha visto que un hyung trate así a sus menores? —pensó el pelirosa al sentarse de nuevo—. Lo grave es que en verdad odio el pato y el cordero».

Afortunadamente, la comida resultó ser una de las mejores que ellos habían probado en su vida.

O al menos así fue para los dos estudiantes de música que no se tardaron en concentrarse en sus deliciosos platillos apenas llegaron a la mesa. En cambio, Jimin solo pudo deleitarse de la frescura y sabor de las verduras ya que, sin ser obvio, le terminó dando el cordero a Yoongi, quién gustoso lo recibió, hasta parecía que sus ojos brillaban y que una tenue sonrisa se asomaba en sus labios.

«Así que ese chico en verdad lo conoce», él concluyó al mostrarse tan satisfecho como el pelinegro, pero no por el almuerzo, sino porque verlo así era tan antinatural. Sin embargo, al levantar su mirada, notó que no era el único en contemplar aquella faceta del otro. Su frente se contrajo y trató de parecer lo más amenazador posible cuando sus direcciones fueron las mismas.

Tenía que actuar perfecto por sus hermanos, por agradecimiento y porque no le agradó aquella conducta que ese chico había mantenido en la pequeña discusión que tuvieron.

«No me importa si en tu placa dice Jung Hoseok —afirmó Jimin en sus pensamientos—. Para mí, seguirás siendo ese chico... quién se atrevió a dañar a Yoongi».

💀💀

—Creo que moría y revivía cada vez que terminaba de masticar esto —suspiró Namjoon con una boba sonrisa a cuestas.

—Espero que hayas disfrutado lo suficiente porque no volveremos aquí. —El tono de seriedad que empleó Yoongi, pese a que su expresión era neutra mientras se limpiaba las comisuras con una servilleta, fue demandante.

Namjoon quiso refutar, la comida parecía haber sido creada por algo celestial, pero ya lo había hecho enojar bastante, tampoco es que fuera suicida. Además, era su mejor amigo después de todo, sabía del dolor que le estaba causando la cercanía de Hoseok.

—Ni estaba tan buena —se contradijo con un chasquido de lengua.

Yoongi se levantó de la mesa luego de colocar algunos billetes sobre esta. Miró unos instantes al moreno, cosa que no entendió Jimin, para finalmente retirarse del lugar. El menor quiso detenerlo, pero la voz de Namjoon fue más rápida.