Enfermedad

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Por primera vez y después de tanto tiempo sentía que la vida era justa conmigo. Jinmei no tenía nada, lo único que lo achacaba era la edad, se le subió el colesterol, un poco la tensión y le dio un mareo, su hígado estaba algo desajustado por la ingesta de alcohol pero sin duda lo que mas le preocupo a los médicos fue su escases de sueño, debía dormir como mínimo ocho horas para que sus células pudieran cumplir correctamente todas las funciones, este menciono sus demandantes trabajos y la recomendación que le hacían era abandonar la política, cosa que de hecho si haríamos. 

Acompañamos a mi asesor financiero durante su estadía en este recinto, su familia y amigos estaban algo lejos, así que ese rol lo teníamos que suplir nosotros, aunque no lo quisiera admitir nuestra presencia le parecía en extremo gratificante y era algo lógico, después de todo ¿Quién quiere estar solo en esas condiciones? Obviamente nadie, Natsumi insistió en tocarle flauta, la cual era su instrumento favorito, no lo hacia nada mal, aunque le faltaba pulirse más. 

Aproveche ese momento para coordinar la participación de las grandes potencias mundiales en el proyecto de la universidad, cuyo semestre sin dudas empezaría pronto, por su parte Nakamura iba creciendo a pasos agigantados, esa escuálida niña se estaba desarrollando, sin duda seria una mujer hermosa seria protegida de los abusadores. 

Me daba igual que me techaran de padre exigente o controlador, prefería eso a que alguien tuviera la osadía de maltratarla o profanarla, sobre mi cadáver realizarían un acto tan atroz. Con la medicación correcta y una buena dieta Jinmei pudo recuperar su forma, sin embargo, hasta que bajara suficiente de peso, Alphonse y yo estaríamos para apoyarlo. Se enojaba en sobre manera, decía que no era ningún debilucho, que podía manejarse por si mismo, pero sabia que era pura fanfarronería. 

Estar en esa relativa normalidad fue un trago de agua fría para todos, durante una semana nuestras reuniones fueron por internet, los lazos que conseguimos eran electrónicos y los inversionista llegaron mínimo hasta el hotel, todos fueron en extremo comprensibles, eso me hizo reflexionar sobre una cosa en particular, a veces nos convencemos de las responsabilidades que tenemos, cuando en realidad podemos prescindir de ellas y el mundo no se va a terminar por eso, seguiríamos estando allí y la gente lo tendrían que aceptar, especialmente cuando éramos personas tan poderosas. 

Poco a poco y con los tratamientos pertinentes Jinmei se recuperó completamente, celebramos esto con una comida saludable, deseábamos que durara lo suficiente como para degustar los frutos de nuestro trabajo en aquella universidad, que se fuera antes de tiempo seria una terrible y cruel jugada del destino. Aunque con todo lo que me habia pasado ya nada me sorprendía. El caballero seguía sintiéndose sobresaltado a veces, especialmente cuando las reuniones con los posibles inversionistas se alargaban mas de la cuenta. Supe entonces que unas vacaciones nos vendrían muy bien. 

Ansiaba ver el resort completado y la vista desde el avión privado ya fue una grata maravilla, la torre central se elevaba como si quisiera tocar las nubes y los diez hoteles que la colindaban estaban magníficos, decorados con frescos que representaban sus áreas y por ende naturalezas. Números, pinturas, graficas, cadenas genéticas, utensilios médicos, música, cocina, balones y libros. 

La pista de aterrizaje se creo justamente en el medio en la línea que se formaba entres los puntos creados para conectar las zonas mediante el tren. El momento había llegado, cuando me baje de mi aeronave no estaba preparado para semejante belleza, construcciones que unían el disfrute y la responsabilidad a partes iguales, convertimos el caribe un paraíso aun mas grandioso de lo que ya de por si era. Todo producto de la magnifica Geo ingeniería.

En el área de economía se levanto un casino, en esencia era muy parecido a donde encontré a mi amada por primera vez, con esa fusión entre estilo moderno y clásico, apoyado en madera que estaba recubierta por protecciones para que pudiera aguantar el desgate del tiempo, lo que no era de este material, emulaba serlo. El nombre del propio edificio era "Valeria" 

El área de deporte tenia un coliseo, en el que se ubicaban cuatro canchas y cabían un gran numero de personas, hecho particularmente para los juegos especiales de verano y para que los turistas que estén de paso lo disfruten. Tenia estructuras megalíticas de tiburones con ojos brillantes como rubíes y luces incandescentes para las noches. 

Educación poseía una hermosa biblioteca y un faro de gran tamaño, el cual daría entrada y salida a los distintos barcos que pasaran por el área, tanto con fines turísticos como con cargamentos de provisiones. Era una maravilla, pues su sistema de luces funcionaba con una batería solar que se cargaba durante el día y se encendía por las noches. 

Biología era bordeada por hermosos jardines que se elevaban en una estructura casi piramidal y que protegía un hermosísimo bosque artificial, perfecto para darle libertad a los animales que fueran salvados por los departamentos de zoología y para custodiar plantas en peligro de extinción por los botánicos. Con la finalidad de preservar de la mejor manera posible la naturaleza. 

En este caso ciencias inorgánicas era el menos interesante de los departamentos, aunque su importancia era indiscutible, se trataban de la planta de alimentación central de todas las demás, desde allí se manejaban los sistemas eléctricos y de telecomunicaciones, en esencia era energía verde autosustentable, por lo que estaba protegida contra distintos ataques o sabotajes que ocurrieran, esto no se trataba de ser ilógico, si no mas bien consciente de lo que te rodea, los lideres del mundo mas temprano que tarde intentarían deshacerse de mi, eso si, tratarían por todos los medios mantenerlo en secreto, ya que no sabían quien de sus aliados estaría trabajando también para mi. 

Música poseía un teatro de opera, admito que su estilo era neo moderno, inspirado principalmente en Sídney, sitio que desde que lo vi en mi luna de miel no pudo salir de mi cabeza, solo que en este caso no emulaba las barbas de las ballenas jorobadas, si no mas bien obeliscos de proporciones absurdas, a través de los cuales resonarían las mas hermosas composiciones artísticas. 

Las zonas de cocina eran especialmente importantes para distribuir los alimentos por todo el recinto, se trasladarían eficientemente mediante los tranvías y en ese caso no había un poblado, ya que el entretenimiento estaba mas que asegurado en cualquier zona que se visitases. Contaba además con una centena de restaurantes, todos con distintas temáticas multiculturales. 

Claro que también teníamos un magnifico hospital para nuestros estudiantes de medicina y para cualquier caso clínico que se presentara, su diseño era griego, basado sobre todo en murales de deidades y esculturas de estilo antiguo, lleno de detalles diversos en granito o mármol, con acabados en colores blancos y verdes, representantes naturales de la sanación. 

Arte contaba con museos por un lado y montañas por el otro, a través de ella se podían hacer tour por distintos pasajes de la historia artística y sus diferentes estilos, cubismos, impresionismo, claro oscuro, puntillismo, abstracción, pop e incluso rupestre y minimalista. Cada área se unía para formar un complejo engranaje de maravillas, era enaltecer las grandes maestrías del hombre. 

Otra parte poco interesante era el área de política donde se levantaba un fantástico edificio para manejar los asuntos de autoridades competentes y donde habitarían los guardias, quienes si lo deseaban podrían traer a sus familias para residir permanentemente en el área. Era una manera segura y correcta de mantenerlos fieles al trabajo, no solo brindándoles sustento, si no también un hogar. 

Con todo eso visto era tiempo de celebrar con una buena comida, optamos por hacer una parrilla en la playa, ver a Natsumi jugar con el agua, traerme caracolas y hacer diseños en la arena era algo maravilloso, la hija que nunca tuvimos por tu pronta partida estaba aquí y de alguna forma en su esencia estaba el espíritu hermoso de mi amada. 

Todos se burlaron cuando deje que me enterrara, me dijeron que ella podía hacer cualquier cosa conmigo y quizás tenían razón, lo que desconocían era lo feliz que esto me hacia, su presencia en mi vida era la única ancla física que quedaba, por que el resto era simplemente el sentido del deber. Allí comimos hasta saciarnos y pude ver el ocaso como la ultima noche que viviría el mundo, pues cuando se alzara nuevamente el sol iniciaría una era de luz y yo seria su principal promotor. 

Cuando volvimos a Tokio fui consciente de lo rápido que el tiempo se iba, tuve que revisar decenas y centenas de currículos, miles de solicitudes de admisión y otro tanto de documentos, a razón de cincuenta folios diarios pude terminar con todo el día correspondiente. En el que arregle mi traje, me perfume, afeite y nivele mi cabello para que se viera perfecto, la universidad Sainoo Hakken estaba a punto de abrir sus puertas.   

El Soberano YakuzaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora