Narra Justin:
—Mierda—bufé al pisar un juguete de goma de Andrés en el piso. Cerré la puerta detrás de mí activando la alarma y subí sin hacer mucho ruido a la habitación. No quería despertar a ___ ni a Andrés. ¿Ven porque digo que odio este trabajo? No me gusta llegar a casa y encontrarlos dormidos. Abrí lentamente la puerta de la habitación de Andrés y me acerque a la cuna. Sonreí de lado al ver que no estaba en ella. De seguro ___ se lo llevo de nuevo a nuestra cama. A ella le está costando alejar a Andrés de su lado. Antes él dormía con nosotros, su cuna estaba con nosotros, pero ahora que le hicimos su propio cuarto, le es difícil dejarlo solo. Apague la luz de la habitación y entre suavemente a la mía. Abrí la boca sorprendido al ver a ___ meciendo a Andrés en sus brazos mientras este bebía su biberón. Pensé que ya dormían ya que era media noche, pero al parecer ninguno quiere dormir sin mí.
—Hola—susurró ___ viéndome con una sonrisa. –Mira cielo, papi ha llegado—le dijo a Andrés que soltó su biberón al escuchar la palabra papi. Sonreí quitándome los zapatos y la camisa antes de acercarme a ellos. Cargué a Andrés y este río acariciando mis mejillas mientras besaba sus labios.
—Hola campeón—sonreí rozando nuestras narices y este río escondiéndose en mi cuello. — ¿Qué hacen despiertos?—pregunté sentándome en la cama y esta se acerco por detrás besando mi cuello. Justo lo que necesitaba.
—Andrés estaba esperándote—dijo y miré a mi campeón con una sonrisa. El siempre independientemente siempre me esperaba. Es nuestra conexión. — ¿Cómo te fue en tu primer día?—preguntó poniéndose de pie.
—Horrible—bufé acostando a Andrés en la cama y este rió pataleando mientras aguantaba su biberón. Me quite los pantalones junto con los bóxers y entre al baño. –Solo tengo media hora de almuerzo, no puedo hablar con nadie y paso la mayoría del día en un maldito congelador en donde me congelo hasta las bolas—bufé y ___ rió apareciendo en la puerta. No mentía al decir que hasta los huevos se me congelaban. Mi día se resume al estar en un congelador empacando ya que los alimentos deben estar congelados. Es horrible y esperaba conseguir otro trabajo pronto. Solo un día y ya me quería ir.
—Exagerado—dijo y la miré mal.
— ¿Me llamas exagerado a mi?—pregunté molesto. –Ven aquí y tócame—dije y esta alzó una ceja acercándose. Justo cuando pensé que esta iba a tocarme, me empujó debajo de la ducha haciéndome gemir por el agua fría. –Joder—gruñí saliendo debajo del chorro. — ¿Qué mierda te pasa?—pregunté molesto y al ver la mirada seria de esta, me retracte. A veces no mido lo que digo. –Lo siento—suspiré volviendo a la ducha.
—Te espero afuera—dijo y apreté los dientes. De seguro estaba molesta y tenía todo el derecho. Tenía que aprender a controlarme, no quería lastimarla o hacerla enojar. Estamos demasiado bien para joderlo. Esta vez no dañare esto, no dañare mi felicidad. Salí de la ducha y me sequé. Me lave los dientes y apague la luz del baño. — ¿Quiere llevarlo?—preguntó y asentí cargando a Andrés que se acariciaba los ojitos mientras movía agitadamente su peluche. Les juro que ese niño no soltaba ese bendito peluche. Me quejé al sentir el aire acondicionado ya que estoy desnudo puesto a que duermo así y rápidamente acosté a Andrés. Este me miró mal y reí besando su frente.
—Buenas noches campeón—sonreí antes de abrazar a ___ por detrás mientras se despedía de Andrés. Fue mala idea abrazarla. Estar desnudo mientras ella se agachaba para besar la frente de Andrés no era buena idea. Joder, su culo se clavó justamente en mi entrepierna y mierda, si que estaba encendido de deseo.
—Buenas noches mi cielo, mami y papi te aman mucho—le dijo a Andrés que rió soltando su chupete. –Oye, es a dormir mi amor—rió poniéndole el chupete. –Vamos—dijo caminando a la puerta y le di un último vistazo a Andrés que había cerrado los ojitos aunque sabía que no estaba durmiendo. Fui al closet por unos bóxers y me acosté en la cama. Era mejor dormir con ropa interior antes que volver a sentir el trasero de ___ sin nada ahí. Apagué la lámpara y le di la espalda. Esta rió abrazándome por detrás y besé sus manos que estaban en mi pecho. — ¿Sabes? Hoy vi a Chaz en la universidad—dijo y me tensé. Desde que los dejé atrás no hablábamos de ninguno de los chicos. Es más, ni se mencionaban. Nadie lo hacía porque sabía que me dolía recordar a mis amigos.
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My Trouble Maker {#2 Trouble} {Justin}
Fanfiction-¿Confías en mi?-preguntó el ojimiel acariciando las mejillas de su chica. -Si-respondió agitadamente la chica. -Entonces agarra mi mano-sonrió el chico y la chica aun dudosa, le ofreció la mano sin saber que su vida volvería a dar otro giro inesper...