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Durante un rato estuvieron tranquilos y en paz en aquel siniestro lugar, pero de un momento a otro los chicos y la bestia estaban en una montaña, tan alta que las nubes no les permitían ver hacia abajo.
Lo que parecía un espejo, apareció frente a ellos mostrándoles unas imágenes, pero no cualquier imagen, les mostraba todo el proceso por el cual había tenido que pasar Venus, de cómo paso de Rubia a Pelinegra.
"La chica de cabellos oros libro una batalla entre lo que parece el bien y el mal, y, como siempre, el mal gano. La Pesadilla está cerca, pero también una sombra de malas intenciones lo está. La Pesadilla apareció y a aquella sombra venció, salvando así a su nueva dueña, dándole su tercera marca. Siendo mala, la chica es más arrogante ahora, es insensible también, sin embargo una última misión tendrá que cumplir, para poder recibir la marca que anhela. Sus poderes completos tendrán y a su amigo va a poder ayudar, pero como lo dije antes la misión a cumplir es un tanto difícil, aunque con la arrogancia de la chica no creo que lo sea tanto. La gran ave del trueno aparecerá frente a ella solo cuando la chica consiga su cuarta y última marca, para ello a una bestia feroz tendrá que domar, le llaman Quimera."
Venus se vio en el espejo, seguía sin reconocerse, efectivamente daba miedo, pero estaba feliz, feliz de ser una nueva Venus, si antes le gustaba ser despiadada ahora sería su pasatiempo preferido. Ya deseaba regresar a Hogwarts y darle unos buenos y merecidos golpes a Astrid que la había traicionado de la peor manera, a ella y a su pequeño Alec.
Aparte la chica tenía que admitir que la principal razón por la que quería volver a Hogwarts era por cierto chico malcriado, de cabello rubio y ojos grises, que, había que mencionar, la traía loca... bueno más de lo que ya estaba.
-*-
— ¿Planeabas decirme...— dijo la Señora Weasley, su voz gruñendo más fuerte con cada palabra y aparentemente sin darse cuenta que sus compañeros visitantes estaban corriendo para salvarse—...que tú has estado jugando con remedios Muggle?
— No jugando con ellos, Molly, querida— dijó el Señor Weasley implorando— sólo era algo que pensamos en sólo probar, más desafortunadamente, bueno, con este tipo particular de heridas, no parece funcionar tan bien como esperábamos.
— ¿Significado?
— Bueno...bueno no sé si tú sabes que son... ¿Que son las puntadas?
— Suena como si hubieras tratado de coser tu piel de nuevo— dijó la Señora. Weasley con un bufido de risa sin alegría— pero ni tú, Arthur, pudiste ser así de estúpido.
— También me gustaría una taza de té— dijó Harry, saltando sobre sus pies.
Hermione, Ron y Ginny casi avientan la puerta con él. Casi al momento de cerrarla tras de ellos, escucharon a Molly gritando.
— ¿QUÉ ES LO QUE QUIERES DECIR, ESA ES LA IDEA GENERAL?
— Típico de papá— dijó Ginny, sacudiendo su cabeza cuando se iban al corredor.
— Puntadas... te pregunté...
— Bueno, tú sabes, hacen un buen trabajo en heridas no mágicas — dijó Hermione justamente. — supongo que algo en el veneno de esa serpiente las disuelve o algo así. Me preguntó dónde este el cuarto de té.
— Quinto piso— dijó Harry, recordando el signo encima del escritorio de la bruja de bienvenida.
-*-
—Alec puedes decirme que es una Quimera.
— Bien... La quimera es un ser monstruoso de origen oscuro, híbrido entre un león, un macho cabrío y un dragón. En cuanto a su apariencia la parte delantera es la de un león de color tostado y de gran tamaño. La parte posterior es la de un enorme macho cabrío de color negro. Tiene también unas gigantescas alas de dragón, que suelen ser negras o rojas. Tiene 3 cabezas; una de dragón, otra de león y la tercera de macho cabrío.
La quimera puede comunicarse en el lenguaje mágico de los dragones, aunque no se para a hablar con criaturas a las que considera inferiores.
Tiene características de los seres de los que está compuesta. Su hábitat dependerá de la parte dominante de la quimera ya que la parte de dragón tiene preferencia por vivir individualmente, pero su parte de león prefiere las manadas.
Normalmente se alimenta de la carne de los animales que caza pero, en época de escasez, sobrevive gracias a su cabeza de cabra, que puede alimentarse de hierbas en los prados.
Este ser es extremadamente peligroso durante un combate puesto que sus garras de león pueden desgarrar a cualquier hombre de un solo barrido. Puede utilizar también la cabeza y los cuernos de cabra para morder y golpear. Pero es su cabeza de dragón la más temida de las tres, sobre todo cuando lanza un cono de fuego.
Le gusta acumular tesoros, posiblemente por su parte de dragón, sin ningún otro fin que hacer montañas con ellos. Aprovecha las monedas de los hombres, elfos y demás humanoides a los que ataca y mata para formar sus montañas doradas y plateadas.— ¿Cómo lo domestico?
—Aquí dice que nadie aun lo ha podido domar.
—Eso es según la historia porque se supone que todos los animales a los que he domesticado han tenido un dueño antes de mí, así que si se puede domesticar, la pregunta es ¿Cómo?
—Claro solo que primero hay que buscarla.
—Cierto.
—Dices que viven individualmente, supongamos que es en una montaña como esta.
—Así es.
—Podemos usar un hechizo de ¿rastreo? ¿Existen esos hechizos?
—No estoy seguro nunca he escuchado hablar de ellos.
—Entonces definitivamente necesitamos a las guardianas.
— ¿A quién invocaras?
—No lo sé, con mi cambio no sé quién sería buena para ayudarme.
—Tal vez Darcy sea una buena opción.
—Si tal vez lo sea.
Después de recitar el hechizo que tanto la habia ayudado en el año anterior, un poco de humo salió de su varita, ella recordaba que dependiendo de la guardiana que convocara era el color del humo que salía de su varita.
Sin embargo no recordaba que de ninguna de sus guardianas el humo saliera rojo, y menos de Darcy que era un ser de oscuridad. El humo fue tomando forma y poco a poco se revelo ante ella una chica que en esencia seguía siendo Darcy pero su apariencia no decía lo mismo.
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La Promesa De Una Weasley
FanfictionLa Promesa de Una Weasley Dos chicas: Hermione Granger, Venus Weasley. Un secreto: El de ella Una promesa: La de ella "¿Qué ella es quien? Dumbledore yo no puedo hacer nada por ella, bueno si, pero... ¿protegerla?" Segunda parte de Una Wea...