La Promesa De Una Weasley

Capítulo 82

Lamento haber tardado tanto pero por fin aquí esta disfrútenlo. 

Albus no la había tomado por sorpresa, sin embargo un recuerdo llego a su mente, ella tenía cinco años, apenas los habia cumplido. Pero su madre no lo había recordado, ella no la culpaba tenía a Ginevra encima todo el tiempo.

Aquella mañana era el cumpleaños de Ron, y ella supuso que su madre tampoco se acordaría, sin embargo cuando bajo a la cocina lista para recordarle a su madre del cumpleaños de su hermano, ella vio el gran pastel que habia en la mesa. Y su madre no estaba ahí, camino hacia el jardín que tenía una enorme carpa by habia globos y banderas, también un enorme letrero que decía FELIZ CUMPLEAÑOS RON. Definitivamente estaba decepcionada y también celosa, celosa a morir. Fue ahí cuando comenzó a ver como la trataban diferente que a los demás.

—Debes permanecer concentrada. Recházame con tu cerebro y no tendrás que recurrir a la varita mágica.

—Lo intento, —Dijo Venus con algo de ira por el recuerdo—pero no me dice cómo.

—Ahora, quiero que cierres tus ojos.

Venus a regañadientes hizo lo que decía. No le gustaba la idea de estar ahí con los ojos cerrados mientras se enfrentaba a un Dumbledore con varita.

—Aclara tu mente—dijo Dumby con voz fría, nunca lo habia escuchado hablar asi. —Expulsa toda emoción'

Pero la cólera de Venus hacia su familia continuaba golpeando sus venas como si fuese veneno. 'Expulsar su furia' ¿Podría ser tan fácil como separar sus piernas?

—No lo estás haciendo, Venus, necesitas más disciplina que esta. Concéntrate, ahora

Venus intentó vaciar su mente, intentó no pensar, o recordar, o sentir...

—Otra vez... a la de tres... uno-dos-tres- ¡Legeremens!'

Un gran dragón verde se alzó enfrente de ella... Cedric Diggory estaba tumbado en el suelo con sus ojos negros fijos en ella... Y luego nada, estaba de rodillas

— ¡Levántate! —dijo Dumbledore. — ¡Levántate! No te estás esforzando Venus. ¡Me estás dejando acceder a recuerdos que temes, dándome armas!

—No te enojes, maldita sea Albus. No es algo que pueda hacer de la noche a la mañana, es mi primera clase.

—Lo sé, pero es importante que aprendas rápido.

—Y lo hare, con la práctica lo lograre.

-*-

Hermione Granger (Potter) salió de la oficina de Albus detrás de Venus, habían pasado ya dos días de que le habían dado la noticia de que era hermana mayor de Harry y ella tenía la necesidad de decírselos a sus amigos, pero Dumbledore se lo habia prohibido.

Así como le habia prohibido hablar de todos los temas que tratara con ella en privado. Sabía que no sería buena idea hablar de eso y sin embargo se sentía como la peor persona del mundo al no decirles nada a los dos chicos con los que habia estado desde su primer año ahí.

De tan distraída que iba choco con la pequeña y frágil Astrid que cayó al suelo, la castaña rápidamente ayudo a Astrid a levantarse.

— ¿Hacia dónde vas Hermione?

—Voy... a. Bueno hay... te diré pero no le digas a nadie.

—Sin problema.

—Bueno. Hay un grupo secreto en el que nos enseñan a defendernos adecuadamente no como lo está haciendo Umbridge. Harry nos enseña.

—Podrías invitar a Venus. Ella es excelente con las artes oscuras, aunque suene un poco mal. Nadie enseña mejor que ella los hechizos.

—Pues podrías traerla con nosotros...

—Sí, bueno. No lo creo.

-*-

—Concéntrate.

Venus saco el pergamino de la siguiente urna ella le habia tenido que dar un dulce de su urna a Albus, solo por el estúpido recuerdo que ella tuvo. Sin embargo estaba dispuesta a quitarle todos los dulces a Albus. Desdoblo el pergamino y leyó lo que decía.

"Hay una chica que no sabe toda la verdad..."

— ¿Qué es esto Albus? Lo que hay aquí no tiene sentido.

—En su momento lo tendrá Venus.

La chica tan solo puso los ojos en blanco y se preparó para lo que venía. Puso su mente totalmente en blanco, para así evitar que Albus supiera lo que ella habia leído en ese pergamino.

Ahora si estaba dispuesta a quitarle todos sus dulces a Albus, antes de comenzar un recuerdo se le vino a la mente, un muy buen recuerdo, Albus y Severus alegraban sus días y con ese recuerdo en mente enfrento a Albus.

—Legeremens

Venus recibió el impacto y Albus se enfrentó al recuerdo que le ofrecía la chica, ese recuerdo habia sido en las vacaciones de su tercer año, cuando los últimos días de sus vacaciones los fue a pasar con su padrino.

Aquel día la chica habia bebido demasiada cerveza del mundo muggle, Severus y Albus estaban divertidos con lo que hacia la chica en estado de ebriedad.

Venus estaba diciendo incoherencias. En un momento se habia quedado callada, y fue cuando ella lo reto a bailar.

— Albuuus—dijo alargando el nombre del director— Yo—se señaló—te reto a ti—lo señalo— a baailaaar. Séeee que noo lo harás.

— ¿Eso crees Venus?

—Sii

El viejo comenzó a moverse en el momento en el que Severus, con un movimiento de varita, puso música. Se tambaleaba de un lado a otro mientras que la chica balanceaba su cadera hacia los lados. Y Severus los miraba riendo.