Capítulo 125
No paso mucho tiempo cuando Venus salió de la enfermería, ya que no tenía nada grave simplemente habia agotado sus fuerzas aquella noche. Se habia quedado pensando en todo lo que le habia dicho Severus.
Reflexiono, cuando tuvo su mente más clara, y aunque no lo quería aceptar sabía que él tenía razón, no podía estar arriesgándose de esa manera.
Pero aquella parte de bondad que había heredado de su madre, cuando rescato a Hermione de bebé, había ganado aquella batalla contra la maldad que obviamente reinaba en ella.
De cualquier manera Dumbledore ya se había enterado de lo que paso, por lo que ordeno a la chica a abandonar el colegio lo antes posible, los exámenes los haría luego.
Así que estaba de camino a despedirse de su padrino, estaba enojada con él pero de mínimo tenía que avisar donde iba a estar, aun no se mandaba sola, y aunque Severus no era su papá y mucho menos su mamá, era el responsable de ella.
Llego a las mazmorras, donde sabía que definitivamente estaba su padrino. Entro al aula donde impartía su clase, sin importarle nada, después de todo, todos los alumnos estaban en examen u en otras clases.
—Es hora de que me vaya Sev.
—Ve con cuidado, nadie te puede ver.
—Seguiras así de cortante conmigo.
—Dije que fueras con cuidado.
—Hablas como si me odiaras.
—En estos momentos lo estoy haciendo.
—Bien.
—Bien.
—Me voy de aquí.
—Bien
— ¿Es todo lo que vas a decir?
—Si.
—Me canse, adiós.
La chica salió del aula azotando la puerta, sabiendo que con eso solo haría que su padrino se enojara más de lo que ya estaba, pero en esos momentos no le importaba en realidad. Ya tenía un ultimátum de su parte, no podía ser peor. O eso esperaba.
Hizo una aparición. Esto con ayuda de sus guardianas porque a ella aún no se le estaba autorizado hacerlas.
-*-
Harry clavó fijamente los ojos en la primera pregunta. Pasaron varios segundos antes de que se diera cuenta de que no había entendido ni una palabra de ella; Una avispa zumbaba alegremente en las ventanas más altas. Lentamente, tortuosamente, por fin comenzó a escribir una respuesta.
Encontraba muy difícil recordar nombres y siguió confundiendo fechas. Simplemente se saltó la pregunta cuatro (En su opinión, la legislación de la varita mágica contribuyó, o condujo a un mejor control en los disturbios de Duendes del siglo décimo octavo?)
Penso que volvería a eso si tenía tiempo al final. Sintió una puñalada en la pregunta cinco (¿Cómo el Estatuto del Secreto fue contravenido en 1749 y qué medidas se tomaron para impedir una repetición?) pero tenía la fastidiosa sospecha de que había omitido varios puntos importantes; Sintió que los vampiros habían entrado en la historia en alguna parte.
Miró una pregunta que definitivamente podría responder y sus ojos se posaron sobre la número diez: "Describa las circunstancias que condujeron a la formación de la Confederación Internacional de Magos y explicar por qué los brujos de Liechtenstein rechazaron unirse..
Sé esto, pensó Harry, aunque su cerebro se sentía flojo. Él podría visualizar un título en la escritura de Hermione: la formación de la Confederación Internacional de Magos... Había leído esas notas esta mañana.
-*-
Venus apareció a las afueras de la cabaña que compartía con Dumbledore. Respiro hondo antes de entrar, sabía que le esperaba un buen regaño.
—Aluminé...
—Mira he recibido suficientes regaños. No me arrepiento de lo que hice, sé que estuvo mal pero no me quedaría viendo como lastimaban a todo aquel que se les pusiera enfrente. Posiblemente lo que tenía que hacer era disfrutar de eso justo como lo hace mi padre, pero yo no soy él, yo no soy como él.
—Y me alegro de que lo hicieras. Te hice salir de Hogwarts porque te están buscando, no porque estabas en problemas conmigo, tu padrino me puso al tanto de tu regaño, pero no esperaba menos de ti.
—Sabias que no me iba a quedar solo viendo ¿no?
—Claro que lo sabía, sé cuan testaruda eres. No te gusta que se cometan injusticias. Y sabía que no ibas a permitir que se lo llevaran.
—Viejito tonto, me metiste en problemas con Sev.
—Eso no importa ahora. Tenemos que planear que hacer con tu víctima.
— ¿Victima?
—Hablemos de tu misión, aquella que te di hace tanto tiempo.
— ¿Qué pasa con eso?
—Bueno, la fecha está cerca.
— ¿Cómo lo sabes?
—Eso no es importante, lo importante es que estés preparada para ello, tienes que mostrarle a Harry que estarás ahí para lo que él necesite. Así él pensara que la única que lo apoyara en todas sus locuras eres tú.
— ¿Me estas pidiendo que lo enamore?
—No tienes que hacerlo, él ya hizo bastante.
— ¿De qué rayos estás hablando?
—Lo entenderás algún día.
—Bien... solo dime lo que tengo que hacer.
—Volverás a Hogwarts.
ESTÁS LEYENDO
La Promesa De Una Weasley
FanfictionLa Promesa de Una Weasley Dos chicas: Hermione Granger, Venus Weasley. Un secreto: El de ella Una promesa: La de ella "¿Qué ella es quien? Dumbledore yo no puedo hacer nada por ella, bueno si, pero... ¿protegerla?" Segunda parte de Una Wea...