La Promesa De Una Weasley

Capítulo 120

Venus salió del examen con la impresión de que, en general, lo había hecho bastante
bien. El encantamiento levitatorio le salió mucho mejor de lo que esperaba, aunque lamentaba haber confundido el encantamiento de cambio de color con el de crecimiento, haciendo que la rata que tenía que poner de color naranja se hinchara de forma asombrosa hasta alcanzar el tamaño de un tejón, antes de que pudiera rectificar su error.

Se alegró de que en ese momento Alec no se encontraba cerca, no quería que su amigo la regañara por aquel insignificante error. Aquella noche no tuvieron tiempo para relajarse; hasta después de cenar. Ya por la noche cuando ya habían hecho sus respectivos exámenes de ese día, se dedicaron a descansar un poco después a Alec le dio la locura y se pusieron a repasar para el examen de Transformaciones que tenían al día siguiente.

Venus fue a acostarse con la cabeza llena de complicados ejemplos y teorías de Hechizos que Alec había insistido en enseñarle. Por la mañana, Venus olvidó la mitad de lo que habían estudiado, pero para cuando presento su examen escrito todo volvió a ella. Sin embargo le pareció que en el examen práctico pudo haberlo hecho mejor. Y a pesar de que habia faltado a muchas clases al menos consiguió hacer desaparecer por completo su iguana mediante un hechizo desvanecedor.

El miércoles hizo el examen de Herbología (si no tenía en cuenta el pequeño mordisco
que recibió de un geranio colmilludo, Venus creía que lo había hecho muy bien), y luego, el jueves, Defensa Contra las Artes Oscuras. Que, por obvias razones, Venus no presentaría, ese era el único examen que Alec presentaría con todos los de su grado.

Para el viernes Venus ya no tenía ningún examen por lo que se permitió un merecido y buen descanso. El día que presentaría su T.I.M.O de Astronomía por la mañana, le llego una carta que venía de parte de Albus.

"Hay algo que debes hacer, una misión que debes cumplir. Debes advertirle a Hagrid de su arresto, tú debes estar ahí cuando eso pase. Esta noche cuando está programado el T.I.M.O, Umbridge aprovechara que todos están ocupados. Pero tú no, tú lo tienes que ver todo, toma prestada la capa de invisibilidad de Harry. Desgraciadamente no podrás interferir en su arresto pero serás el único testigo de ese acontecimiento.
Sin más por el momento.
Brian Percival."

Venus salió del cuarto en el que se estaba quedando, tenía que ir a tomar prestada la capa de invisibilidad de Potter. Antes de salir por completo se asomó para ver si había alguien por ahí. Para su suerte no había nadie cerca y pudo salir al pasillo, sin ningún problema, camino silenciosa y cuidadosamente.

Mientras caminaba ideaba la forma de entrar a la sala común de Gryffindor, ella no sabía cuál sería la contraseña para poder entrar. En Hogwarts, tenías acceso a las salas comunes, diciendo la contraseña. Por lo que tenía que encontrar a alguien lo suficientemente tonto para decirle la contraseña. A como diera lugar ella debía cumplir lo que le había pedido Dumbledore.

Mientras caminaba por todo Hogwarts de lo distraída que iba no se dio cuenta de que había alguien más con ella, hasta que chocó de frente con la otra persona. Alguien que llevaba el uniforme de Gryffindor. Si no estaba equivocada aquel chico era Neville Longbottom.

—Oh no te vi Hermione, lo siento.

—No te preocupes. La verdad es que me caíste en gracia.
—¿Que sucede?

—No podrás creerlo pero he olvidado la contraseña y ahora no podré entrar a la sala común.

—Tranquila es, muy fácil la contraseña. Tanto que ni yo la eh olvidado. Vamos a la torre yo también voy para Allá.

Juntos los dos chicos caminaron hacia donde quedaba la torre de Gryffindor. Para suerte de "Hermione" no se encontraron con nadie en el camino.

—No debes decirle a nadie que me viste.

— ¿Acaso es un secreto?

—Sí, lo es. Es una vergüenza que alguien sepa que olvide la contraseña.

—No hay problema.

—Bueno te dejo, tengo cosas que hacer.

La chica dejo a Neville en la entrada, ahora tenía que averiguar por su cuenta donde estaba el dormitorio de Potter. No sabía con exactitud si los dormitorios eran iguales a los que había en Slytherin.

Si ese era el caso, chicos y chicas estarían divididos. Tomo asiento en uno de los sillones que había en la sala, y pensó un poco. Un chico venia entrando por el retrato así que se dedicó a observar a qué lado de las escaleras se dirigía. No tardó mucho en seguirlo.

—Disculpa, ¿sabes dónde está Potter?

—Debería estar en su habitación viejo, es la última de este pasillo.

Aquel "chico" desconocido siguió el camino que le había indicado el otro chico, entrar había sido más fácil de lo que se esperaba. Ya en la habitación se dispuso a buscar la capa de invisibilidad.

—Si yo fuera Potter... ¿Dónde escondería la capa?