Narra Vaska:
-Decoraron muy bien la casa- opinó Isabella.
Sonreí orgullosa.
-¡Oh! ¡Mi pequeña nietecita!- Madeline corrió a tomar a Bianca.
Leo me abrazó por la cintura.
-¿Por qué no nos habían invitado antes?- murmuró Perry.
-Porque queríamos terminar de arreglar la casa...- sonreí.
Caminé hasta la cocina para servir algo para beber a quienes vinieron a conocer nuestra casa.
-¿Les contaremos?- murmuró Leo nervioso.
Sonreí.
-¿Les quieres contar?
-Mathew me va a golpear de nuevo.
Estallé en risas.
Llevamos copas con champagne. Leo vigiló que no fuese a tomar una. Incluso, corrió a servirme zumo de naranja.
Vino mi padre, Isabella, Mathew, Nancy, Madeline, Jackson, Perry...
-Jason viene en camino- explicó Madeline.
-Ya me parecía extraño que no haya venido- reí.
[...]
Tocaron el timbre. Fui a abrir.
-¡Jason!- sonreí.
-Hola, hermanita- me abrazó y besó mi frente.
Amo tanto a Jason como si fuese un hermano, además, él me trata como una.
Una chica venía con él, alcé las cejas.
-Vas, ella es mi novia, Olivia.
-Hola- la saludé- pasen, por favor... todos están afuera.
La chica no soltó la mano de Jason, está nerviosa.
Narra Leo:
Jason salió por el ventanal con una chica, fruncí mi ceño. Vaska venía detrás de ellos, saltando de la emoción, intenté no reírme.
-Hola a todos- saludó Jason- ella es mi novia, Olivia.
-Hola- saludó ella tímida.
-Hola- saludó mi hija, todos reímos.
-Hola pequeña- la chica le sonrió.
Jason y ella se sentaron en los asientos disponibles.
-Que linda idea la de adornar con luces- opinó Isabella- apuesto a que fue idea de Vaska.
-En realidad... todo partió porque a Bianca le encantaron- murmuró Vaska- así que adornamos con estas.
En realidad... si se le nota el embarazo a Vaska... está un poco más rellenita.
Acaricié su brazo, se sentó a mi lado.
Ella me sonrió.
-Algo les pasa a ustedes- murmuró mi mamá- están muy cariñosos...
-Así debería ser- me encogí de hombros.
-No es normal... es decir, siempre están bromeando, jodiéndose... pero nunca están tan tranquilos y cariñosos...
Vaska mordió su labio.
-Leo y yo tenemos algo que decirles...- tomó mi mano y la apretó, sonreí.
-Espera un segundo...- murmuré.
Tomé a Bianca para cubrir mi cara.
-Eres un idiota- Vaska rió.