- Luces sorprendida - bromeó.
- Si… usualmente las personas, no sé…
- ¿Hacen cosas especiales?
- Si, algo así, ¿no tienes planes?
- Quizá estos son mis planes.
- Entonces tus planes de cumpleaños se basaban en caminar por el parque y verte en la necesidad de salvar a una "damisela en apuros" – le dije y él comenzó a reír.
- Algo así, digamos que no tenía planeado lo de la "damisela en apuros" – dijo imitando mi tono – pero me alegras que hayas sido tu.
Me sentí sonrojar, pero no podía evitarlo cuando Ashton mostraba su lado dulce y sonreía para mí.
- Mis padres me tienen organizada una fiesta sorpresa, se supone que yo no sé nada…
- Eres un tramposo – dije y Ashton comenzó a reír.
- Será en la noche, me hacen ir con el pretexto de que será una comida por su aniversario y mi cumpleaños.
- Quizá solo sea eso Ashton y tu estés imaginando cosas.
- _____, _____, _____, - me dijo negando con la cabeza a forma de sermón – como se nota que eres hija única.
- ¿Ahora de qué hablas?
- Cuando tienes un hermano de 8 años, bien, es fácil convencerlo de que te confiesen ciertas “cosas”.
- Ashton Irwin, me estás diciendo que usaste a tu hermanito para saber si tenían planeada una fiesta sorpresa para ti.
- Si lo dices así suena feo.
- Pero eso hiciste – exclamé divertida.
- Ah… - dijo de una manera tan graciosa que solté una risita – de cualquier forma, actuaré como si estuviera sorprendido. Ya he practicado mis caras. Además, no son muy bueno mintiendo, me dijeron que si quería podía invitar a mis amigos.
- Pero creí que eras nuevo por estos rumbos, ¿ya tienes amigos?
- Pues… - dudó – amigos… - comenzó a reír – no, en realidad, no sé si sea válido, pero te conozco a ti y a ti... y a ti...
- ¿Y a mi?
- Si... - admite.
- Eres taaaan sociable Ashton – bromeé.
- Prefiero decir “selectivo”.
De repente Ashton se paró de un golpe de la banca, como si una revelación hubiese llegado a él, lo cual me tomo desprevenida dando un saltito que Ashton aprovechó para tomarme, jalarme y pararme frente a él, no sabía que estaba planeando pero realmente deseaba averiguarlo. Solo lo miraba confundida. Entonces Ashton se inclino frente a mí, como haciendo una reverencia.
- Damisela en apuros, ¿me haría el honor de ser mi acompañante en la fiesta de cumpleaños que no sé que tendré?
Su pregunta me tomó por sorpresa por lo que no sabía que responder, así que me limite a reír.
- Habrá pastel… - dijo como si quisiera sobornarme con ello.
- Suena tentador – respondí en el mismo tono.
- Doble porción por ser la única conocida del cumpleañero en la ciudad.
- No lo sé… mi papá no está en casa… - dudé pero mi voz interna me decía: "¡_____, joder!, el tipo que no te has podido sacar de la cabeza te está invitando a su fiesta de cumpleaños, acepta idiota".
Mi parte racional no dejaba de gritarme que ese tipo que no podía sacarme de la cabeza era mi profesor.
-_____, por favor – comenzó a suplicar – llevo dos semanas aquí y no conozco a nadie, me considerarán un desadaptado social si llegó solo.
- Así que solo quieres que te acompañe para que no te consideren un raro Ashton – le reclamé.
- Mi familia ya piensa que soy raro… solo pido que tu aceptes, a últimas fechas no he estado muy sociable pero es agradable hablar contigo, no sé, es como si… - su voz fue perdiendo volumen.
- ¿Cómo si…? – insistí a que terminara su frase.
- Como si con tu simple presencia lograras lo que litros de helado no han podido.
- Así que soy como… ¿tu helado?
- Un bonito helado – sonrió tan ampliamente que sus ojitos se cerraron por completo.
- ¿Debes estar bromeando? – pregunté sorprendida.
- Anda, di que si... – me suplicó como un pequeño niño.
¿Cuántas veces no pedí qué algo pasará con mi vida?, si, quizá Ashton no era una muy buena opción para poner mis ojos, pero si el destino llama a la puerta... creo que quizá deba atender... además... solo es su fiesta de cumpleaños.
- De acuerdo – le dije – iré contigo a la fiesta de la cual “no sabes” – guiñé mi ojo.
- Estupendo – dijo Ashton entusiasmado.
- Pero con una condición - ah, claro, ahora soy yo, ______ Crowell poniendo condiciones.
- ¿Cuál?
- Que me acompañes de compras, me han invitado a una fiesta de última hora y no tengo nada que usar - bromeó.
- ¡Seguro!... pero yo no cargaré las bolsas.
- Claro que sí lo harás – di la vuelta comencé a caminar. Él solo rió y siguió mi paso.
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mi profesor 》irwin.
FanfictionUna relación un tanto peligrosa pero excitante a la vez.