mi profesor 》irwin.

Capítulo 38.

Al entrar al aula Keyttlin ya está dentro.

- ¿Dónde te metiste? – me cuestiona – te estuve buscando.

- Caminando por ahí, no quise pasar el resto del almuerzo con los muchachos.

- Me dijeron que te llego un mensaje y saliste corriendo de allí – esos chismosos.

- Era mi papá – le digo y me sorprende lo convincente que sueno, suelo ser más torpe para decir mentiras – hable con él un rato, no quise hacerlo delante de ellos.

- Ah, ya veo – dice Keyttlin y la noto convencida con mi excusa – ¡tengo que contarte algo!

- ¿Tiene que ver con lo que te contó Laura?

- Algo así… Ella es prima de una de las amigas de Pamela – me dice Keyttlin.

- ¿De Rosemarie? ¿no?

- Si – asiente con su entusiasmo habitual – ella me contó que cuando comenzó el almuerzo fue al baño y en los lavamanos escucho hablar a Pamela acerca de… ¿recuerdas lo que dijo el señor Irwin sobre su fin de semana?

Cómo podría olvidarlo....

– Sobre lo de un "encuentro inesperado" – contesto.

- Exacto, pues ella escucho como Pamela le contaba a su sequito que él profe lo dijo por ella.

- ¿Qué? – grito atónita.

- Shu… - me calla Key, pues estamos hablando casi en susurro – si, ya sé, yo tampoco podría creerlo, pero dice Pamela que ella lo encontró el sábado en el centro comercial y estuvieron platicando y que por eso el señor Irwin dijo esas cosas acerca de su fin de semana, por ella.

¡Esa cara de Ardilla!

- ¿Platicando? Pero si apenas cruzaron unas cuantas palabr… - me muerdo la lengua, yo sé a que se refería Ashton con el encuentro inesperado, sé que no platico con Pamela, más bien ella estuvo fastidiándolo a él, pero como lo explico sin decir que la que paso todo el fin de semana con él fui yo. Rayos, esa bruja ardilla.

- ¿Cómo sabes? – me cuestiona Keyttlin.

- Bueno… yo supongo eso, el señor Irwin parece que no se banca a Pamela, como podría platicar con ella – me excuso

- ¿Por qué no te creo Crowell? – me acusa.

- ¿Qué más te dijo Laura? – insisto.

- Ah si, me dijo que ella sintió curiosidad y antes de que Rosemarie saliera del baño la jaló y le preguntó acerca de lo que estaba hablando Pamela.

- ¿Y que le dijo?

- Pues resulta que Rosemarie estaba con Pamela en el centro comercial, y que es verdad que el señor Irwin se encontró a Pamela…

Si, eso ya lo sabía, aún así intento fingir sorpresa.

- Pero según Rosemarie – prosigue Keyttlin – fue Pamela quien se le acercó y además ella no cree que el señor Irwin haya dicho esas cosas por Pamela.

-  Vaya amiga – digo.

- Son todas una traidoras entre si, lo sabes, ah, si, Rosemarie le contó a Laura que el señor Irwin estaba dentro de una tienda para chicas, la bonita del segundo piso, donde nos gusta comprar vestidos…

- Si, sé cual es… - dios, solo espero ella no sospeche nada…

- En esa, pues todo parece indicar que el señor Irwin estaba con una chica....

Siento como mi corazón comienza a palpitar más rápido, es como si descubrieran que tu fuiste la que rompió el jarrón de la abuela… es como si te estuvieran apuntando con una arma cargada.

- ¿Con una chica?

- Si, si, si – dice Keyttlin entusiasmada por la información que ha obtenido – así que Rosemarie cree que es ella de quien hablaba el señor Irwin, no de la bruja de su amiga.

- ¿Y saben quien es esa chica? – pregunto temerosa.

- No, Laura me contó que Rosemarie le dijo que Pamela quiso esperar a que Ashton saliera de esa tienda, pues obviamente tendría que salir con su acompañante – siento un nudo formarse en mi garganta.

- ¿La vieron?

Keyttlin niega con la cabeza algo desanimada y yo veo el alma regresar a mi cuerpo.

- Lograron ver salir a Ashton de la tienda hablando por teléfono pero no pudieron esperar a que saliera su acompañante porque el papá de Pamela llegó por ellas y tuvieron que irse.

Nota mental: comprar un lindo regalo de Navidad para el señor Valderrama en agradecimiento por llevarse a su hija ardilla del centro comercial

- ¿Cómo es que te enteras de tantas cosas Keyttlin?

Ella se encoje de hombros.

- Ah, una cosa más, Pamela está decidida a investigar quién es esa chica.

De acuerdo, eso no suena bien….

- Señoritas de allí atrás – nos dice la profesora de geografía – ¿pueden guardar silencio?

No nos percatamos ni de cuando entró.

Las clases transcurrieron sin novedades, pero mi mente no estaba tranquila, ¿qué hubiera pasado si el papá de Pamela se retrasaba? Ella me hubiera visto con Ashton, eso no parecía buena idea… el hecho es que si quiero seguir viendo a Ashton, debo de ser más cuidadosa, pues ahora hay brujas ardillas vigilando.

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***

- ¿Algún otro candidato? – la pregunta de Ashton suena más como una suplica.

Como lo había predicho, Pamela era ya la única candidata para presidenta de clase un año más. La nominó la prima de Laura, si, Rosemarie, su plebeya mayor y también la encargada de divulgar todos los secretos de Pamela. A veces, en esas raras ocasiones, siento compasión por Pamela, no imagino lo feo que a de ser no poder confiar ni en la que llamas mejor amiga. Tania secundó la nominación y así la bruja ardilla no movió ni uno de sus manicureados dedos para ser ahora la única candidata a presidenta de clase

- Que basura… - murmura Wesley cuando ve que Pamela se pone de pie, sin que nadie se lo solicite… obviamente.

- Creo que otro año más no tendré competencia – dice la cara de ardilla con falsa tristeza
Es entonces cuando Keyttlin se pone de pie y todas las miradas llenas de esperanza se centran en ella.

- Yo nomino a _____ Crowell para presidenta de clase.

¡¿Qué clase de cruel broma es esta?!

Miro a Keyttlin, no sé si expreso desconcierto o terror pero para el caso es lo mismo, ¿acaso no hablamos de esto ayer? Claramente recuerdo reír cuando Wes mencionó esto por lo absurdo y suicida que parecía. No queríamos a Pamela como presidenta, jamás lo hemos hecho, pero preferimos mantener las cosas así porque ponerse en su contra es la peor idea en una larga y triste historia de malas ideas. Ella es una maldita con todos por naturaleza, pero si le estorbabas o se ensañaba contigo… no, no es algo que uno quisiera, y ahora era yo la que estaba, obviamente, estorbándole, todo gracias a Keyttlin, qué rayos habrá pasado por su mente al nominarme, me odia en secreto, o simplemente decidió tirarme como alimento para ardillas rabiosas.

- ¿Qué? – le susurro a Keyttlin exigiéndole una explicación ella solo me voltea a ver y me guiña un ojo.

- No, no me guiñes el ojo – le reclamo aún susurrando pero claramente reconozco una nota de tensión en mi voz – que rayos…

- Muy bien – dice Ashton – ya no debe preocuparse señorita Valderrama, parece que hay otra candidata…

Finalmente me atrevo a ver a Pamela, aprieta la mandíbula y si sus ojos fueran balas yo ya estaría muerta. Si, no lo voy a negar, disfruto hacer enojar a Pamela como cualquier persona en este salón. Pero esto ya es demasiado, una certera locura que no me deja disfrutar de la cólera que he provocado en Pamela, más no puedo decir lo mismo de los demás de mi clase, ellos parecen disfrutar del momento, o de mi cara de angustia.

- Necesita que alguien secunde la nominación – argumenta la ardilla y está en lo cierto, la acción de Keyttlin en nominarme ha sido muy temerario, pero me habré ganado la mala fe de Pamela por nada si alguien no secunda la nominación.

- No creo que ese sea problema – le responde Ashton, es mi idea o me está defendiendo, no parece sensato en nuestra establecida norma de “distancia en el colegio” pero imagino que el hecho de que Keyttlin me nominara le resulta grato, me lo sugirió ayer, me negué y miren donde estoy – ¿alguien secunda la nominación hecha por la señorita?

Silencio. Era obvio, nadie está tan loco como para tirarse de gratis a Pamela de enemiga como ya lo éramos, sin dudarlo, Keyttlin y yo.

- Yo secundo la nominación – rompe el silencio Wesley. Olvídenlo, si hay alguien tan loco.

Es ahora cuando quiero salir corriendo, no me malentiendan, pero no estoy acostumbrada a la atención en mi. ¿Nominada a presidenta de clase? no me siento capaz de dirigir a un perro y además, jamás he ido contra la voluntad de la bruja ardilla en esta magnitud, tomo los asientos de última fila y trato de llevar una vida normalmente tranquila cumpliendo con mis trabajos y mi muy estrecho circulo de amigos.

- _____ - la voz de Ashton me vuelve a la realidad – venga acá, por favor.

No puedo ponerme de pie al primer intento, no estoy acostumbrada a este tipo de cosas, no estoy acostumbrada a que la gente espere algo de mí, me aterra la idea de defraudarlos y que me odien por ello. Se manejar la indiferencia, tal como suelo mostrarme con ellos, pero el odio, esa son palabras mayores.

- Ve _____ - me ordena Keyttlin.

Me incorporo y camino hacia el frente, mientras lo hago intento descifrar las miradas de mis compañeros, ¿me miran con admiración por algo que yo no he pedido? ¿me consideran una loca por hacer esto? ¿contaré con su apoyo? ¿se estarán riendo de mi?

Al llegar con Ashton me coloco a uno de sus lados, tal como lo ha hecho Pamela, él coloca una de sus manos en el hombro de Pamela y la otra en mi espalda y me acaricia suavemente de arriba abajo como mostrándome apoyo, me gusta, pero no ayuda en mucho, el contacto con él provoca una torrente eléctrico en mi que debo controlar a la par que manejo la situación con Pamela, que ganas de abrazarlo y respirar de cerca su perfume, su aroma varonil que tanto me encanta.

- _____ - me dice Ashton, puedo sentir la calidez de su aliento y mi piel se eriza - ¿acepta la nominación?

Miro a Ashton a los ojos, sé que quiere que diga que si, pero no me siento capaz de lidiar con esto, yo con mucho gusto hubiese apoyado a Keyttlin en la confrontación con Pamela, hubiese apoyado a cualquiera de mis compañeros, pero ¿estar yo al frente? no, yo suelo ser miembro de algo, no una líder, no me siento capaz y como dije, me aterra la idea de defraudarlos… es por esto que no permito que me noten, es por eso que no me gustan las personas en mi vida, me había cubierto con escudos suficientes como para pasar desapercibida pero parecen no haber sido suficientes.

- ¿Vas a responder hoy? – suelta Pamela en su habitual pose odiosa, pero se lo agradezco pues ahora me enfoco en ella, ¿enserio seré tan cobarde como para dejar que Pamela se salga con la suya una vez más? por su mirada noto que esta confiada en que huiré, que es realmente lo que quiero, pero creo entender porque Keyttlin lo hizo, esto no es por mi, es por Pamela… y, de decir no, le estaría dejando vía libre con Ashton, el presidente de clase es casi uno con el profesor asesor, por lo que el tiempo que pasaría con Ashton… no, esta batalla no la ganara fácilmente.

- Si querida, responderé hoy – me sorprende lo determinada y segura que se escucha mi voz cuando mi interior es un caos, supongo se lo debo a los años que he pasado controlando mis emociones – y la respuesta es si, acepto mi nominación.

Keyttlin se tira hacia atrás y sonríe victoriosa al igual que Wes. Veo al resto de mis compañeros disfrutar de lo que estoy segura, es la cara de cólera de Pamela.

- Perfecto – dice Ashton – jóvenes, les presento oficialmente a sus candidatas a presidenta de clase, Pamela Valderrama y _____ Crowell.

Y que la suerte este siempre de su lado, es lo que a Ashton le falto decir.

•••

- ¿Por qué hiciste eso Keyttlin? – le reclamo en el pasillo – yo no quiero ser presidenta de clase.

- Pero aceptaste la nominación ¿no? – Argumenta ella – pudiste haber dicho no.

- Eso iba a hacer – le digo y ella levanta las cejas.

- Entonces, ¿Qué pasó?

- No pensaba dejar que Pamela se saliera con la suya, no sin dar batalla.

- Lo ves, es por eso que te nominé ______, ese la indicada para esto, eres muy determinada y creativa cuando te lo propones, además eres fuerte en situaciones en las que los demás perderíamos la cabeza, puedes pensar con mente fría si la situación lo amerita y tienes buenas notas, quizá tu no lo veas, porque estás muy metida en eso de intentar pasar desapercibida por todos, pero esa no es tu naturaleza, solo debes confiar un poquito más en ti… y en las personas.

No sabía que enserio la gente pudiese pensar esa clase de cosas de mi, ayer Ashton fue quien dijo cosas mías que realmente no siento ser y ahora Keyttlin… Parece que ellos me conocen más que yo.

- Al menos pudiste haberme comentado tu plan – me quejo.

- ¿Para qué huyeras? no, ni pensarlo… te conozco ______.

- Me da miedo que me conozcas tan bien.

- Por eso soy tu mejor amiga – me dice – y te quiero _____, veras que todo saldrá a nuestro favor.

-Eres consiente de que Pamela no pasará por alto esto

- Si, lo sé, pero creo que a ti te tiene más sin cuidado que a mi lo que pueda pensar o hacer Pamela, además, es nuestro último año… algunas cosas ______ son de ahora o nunca.

- ¿Y tenías que escoger ahora?

- Además... - Keyttlin rie - deberías agradecerme, si ganas podrás pasar más tiempo que el común de nosotros con el Señor Irwin, eso no puede ser malo...