Capítulo 66.

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Ashton se está duchando en mi habitación, le he prestado ropa de mi papá, una vez más, la lluvia nos dejo completamente mojados.

Lo he convencido de quedarse a dormir, aunque realmente no tuve que ofrecérselo dos veces. Me entusiasma la idea de estar con su compañía, en casa, cuando mi papá no está suelo sentirme terriblemente sola, pero desde Ashton las cosas no son así.

Lavo las tazas que ocupamos, no me gusta dejar platos sucios. Cierro la llave del lavabo cuando siento unos brazos fríos que rodean mi cintura y un cuerpo presionando junto al mío.

- No supe cómo poner el agua caliente – dice Ashton con los dientes titiritándole.

- Solo tenías que alzar del lado donde estaba el puntito rojo – le explico, siento a Ashton temblar, hace mucho frío y el torpe se ha bañado con agua fría.

- ¿Dormiremos los dos juntos? – pregunta aún tartamudo por la vibración de sus dientes.

- No, tu dormirás en el sofá – bromeo.

- Pero voy a morir de frío – lamenta.

- Entonces solo me quieres para calentarte – digo con falsa indignación.

- En realidad te quiero para eso y mucho más – bromea él – pero quedamos en ir despacio.

Una risa se me escapa, giro sin liberarme de sus brazos, lo acerco a mí y lo beso.

- Es perturbador besarte y verte con los pantaloncillos de mi papá.

- Pues si la ropa es problema… - dice Ashton con picardía.

- ¡Ashton! ¡Eres un caliente! - lo regaño pero no evito reír. él comienza a temblar más fuerte – e irónicamente vas a morir de frío aquí, vamos a la cama.

- ¿Quién es el caliente ahora? – Bromea él y yo lo fulmino con la mirada – ya, mejor me callo o si terminaré durmiendo en el sofá.

Subimos a mi habitación y prendo el televisor de mi cuarto, y ambos nos enrollamos en mis sabanas, Ashton me acerca a él. Y me envuelve en sus brazos, su cuerpo parece regular poco a poco su temperatura, pero aún está muy frío.

- Sigues muy frío…

- Bueno, quizá mi novia pueda hacer algo al respecto – bromea.

Pero yo no lo tomo a broma, lo sujeto del cuello y comienzo a besarlo, parece que lo he tomado por sorpresa pues tarda en responderme el beso. Más eso no excede a unos segundos.

Acerco mi cuerpo a él y nuestro beso se vuelve más profundo, sus manos acarician mi espalada logrando que una corriente eléctrica recorra mi columna, y un remolino contraiga mi estomago.

Su respiración se vuelve agitada y en un movimiento está sobre de mi, besándome, paso mis brazos por debajo de los suyos y lo acerco más a mí, mis labios dejan los suyos y besan su cuello, él deja escapar un gemido, besa mi frente y cae a un lado mío.

- Gracias – dice riendo.

- Cuando quieras – le digo algo atrevida.

- Cuidado con lo que me ofreces porque puedo tomarte la palabra.

Yo rio y lo abrazo, y él me sostiene con ternura. Y en sus brazos me siento en casa. Así, perfectamente juntos, en el comienzo de algo precioso hasta que el sueño llega por mi y por él.

•••

Al amanecer Ashton hace lo que mejor sabe (o algo de ello) preparar el desayuno, creo que es algo con huevos, jamón y ramas extrañas que huelen muy bien. Ambos estamos aún en pijama, pero Ashton está usando delantal.

No pierde oportunidad para robarme una sonrisa con sus tontas bromas que amo. 

- ¿Bajé mi telefono? - pregunta Ashton tomando asiento junto a mi, su comida está al fuego.

- No - le digo - creo que lo dejaste en la habitación.

- Mejor voy por él, si llega un mensaje de mi madre que no es respondido en cierto marco de tiempo... bien, no es bonito - Ashton ríe - ¿quieres qué baje el tuyo?

- Si, mi papá puede pensar que aún estoy babeando completamente dormida, pero aún así bajalo.

Ashton se incorpora y sube las escaleras a mi habitación.

Yo vigilo la comida que está en el fuego. El timbre suena, sospecho que ha de ser la Sr. Rosa, o como yo le digo: Nana Rosi, ella fue mi especie de "niñera" cuando era algo más joven y mi papá comenzo a hacer más frecuentes y extensos sus viajes. Más ahora solo viene a casa dos veces al mes a hacer ayudarme con la limpieza que me falte, pero tengo todo limpio, ropa, patio, habitaciones, en fin, además, ella no puede descubrir a Ashton aquí. Así que me limitare a atenderla en el portico.

Más al abrir la puerta no es Nana Rosi la que está de pie allí.

- Keyttlin, ¿qué haces aquí... tan temprano? - agrego lo ultimo para ocultar el nerviosismo que ha despertado en mi.

- Necesitamos hablar _____, realmente no me gusta como han ido las cosas ultimamente entre nosotras, así que traje unos panecillos que preparo mi mamá para que los comamos.

Estoy perpleja y por mi mente no pasa nada que pueda evitar que Key entre. Ella sonríe y se abre paso.

- Huele bien, ¿cuándo te volviste tan talentosa en la cocina? - comenta y yo sigo en shock - Espero que hayas preparado también para mi.

- No sabia que vendrias - finalmente puedo pronunciar palabra.

- ¿Cómo no? te envie un mensaje.

- Amor, tu tienes un mensaje de... - Ashton se para en seco y queda tan perplejo como yo - ¡Keyttlin! - exclama con cierta nota de espanto.

- ¿¡Señor Irwin!? - los ojos de Keyttlin se abren como platos y literalmente ha quedado boquiabierta.

Ella me mira confundida, Ashton me mira desorientado, yo miro ambos y solo deseo que la tierra se abra y nos trague a todos.

mi profesor 》irwin.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora