Capítulo 34

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Pero Joel ¿Cómo me pides eso? ¿Qué quieres que le diga a Andrew?

–No sé, ármale un pleito y dile que dormirás en la otra recámara, por favor–suplicó no sólo con palabras sino también con su mirada.

–No sé Joel. Me pones en un predicamento–

–No es mayor al que tú me pones, Si, no vamos a vernos como en mes y medio, regálame esta noche, por favor– insistió tomando la punta de mis dedos.

–Mira, hagamos esto, subiré y cuando esté dormido me escapo. Andrew tiene el sueño muy pesado y seguro no se dará cuenta–

–Está bien– aceptó con una gran sonrisa mientras acariciaba mis dedos.

–Chicos me voy a dormir– anunció Ariana entrando a la cocina y separamos abruptamente las manos mientras la mirábamos asustados.

–Hasta mañana niña, que tengas dulces sueños– dijo Joel y yo lo miré serio y salí de la cocina después de despedirme de ella.

Andrew estaba sentado en el sillón cambiando de canal en canal. Ariana pasó, se despidió de él y subió. Joel salió de la cocina y se sentó en el otro sillón sin decir nada. Minutos después Andrew se levantó y le dio el control remoto.

–Ya es tarde. Vámonos a dormir, cariño–exclamó volteando a verme.

Joel me dio una mirada suplicante que Andrew no percibió porque estaba dándole la espalda y entonces recordé las misteriosas llamadas telefónicas.

–No tengo sueño. Además, hay que lavar los platos, no sé pueden quedar sucios y no quiero andar con prisas mañana–

–Está bien, pero no tardes– se inclinó para darme un beso, pero agaché la cabeza y terminó por dármelo en la frente.

–Joel ¿Tú no vas a dormirte ya?–

–Sí, pero primero tengo que sacar unas cosas del auto para entregarlo mañana–

–Bueno, hasta mañana– se despidió y subió las escaleras.

Joel se quedó parado ahí y cuando se escuchó que Andrew cerró la puerta de la habitación, me sonrió y se acercó a mí.

–Gracias muchachito de la limpieza–exclamó en tono de burla.

–Muy gracioso. Acompáñame a la cocina, vamos–

Me tomó del rostro y me plantó un beso en los labios, yo le recriminé con la mirada, él me tomó de la mano y entramos a la cocina, comencé a lavar los platos mientras él se recargaba en el mueble, a mi lado.

–Cuéntame de ti– dijo metiendo sus manos a los bolsillos de su pantalón.

– ¿Qué quieres saber?–

–Lo que quieras platicarme–

–Está bien, pero...– tomé un fuerte suspiro, era una duda que tenía desde el primer día que lo conocí y que después de este fin de semana se había incrementado. – ¿Tú podrías primero contestarme una pregunta?–

Claro, pregúntame lo que quieras, las reglas ya no existen– me guiñó el ojo.

– ¿Por qué un chico como tú tiene un... pasatiempo tan... peculiar?–

– ¿A qué te refieres?– exclamó extrañado.

–A la forma en que nos conocimos– dije mirando el plato que lavaba para evitar mirarlo. – ¿Por qué lo haces? Si no es por dinero, que obvio no te falta, entiendo lo del placer, pero ¿No sería más fácil conseguirse un novio, novia o ligarse a alguien en un bar? ¿Por qué así? ¿Por qué esas reglas?–

–Es complicado Er– suspiró –Así como a ti, un amigo mío de la universidad me dio el teléfono de una chica y me explicó de que se trataba el asunto– miró al suelo un tanto avergonzado, creo que era la primera vez que hablaba de eso con alguien. –Me dijo que era un tipo de sociedad secreta, de cierto nivel económico, quizá para salir de la rutina o cumplir fantasías que no harían con su pareja, así que un día por curiosidad le llamé a la chica y... bueno, fue emocionante eso de no saber nada de la otra persona y seguí con el juego, a veces yo llamaba y a veces me llamaban–me miró fijamente mientras yo procesaba la información y me dio rabia pensar que él llamara a alguien. –Ahora tú dime, ¿quién realmente te dio mi teléfono? No te ofendas, pero tú no encajas en el prototipo de los chicos que están involucrados–

–Me lo dio un chico en el baño de un bar, no sé cómo se llama y vagamente lo recuerdo– ahora fue mi turno de avergonzarme, él soltó una risita y movió la cabeza.

– ¿Y por qué me llamaste? estarás de acuerdo que fue sumamente arriesgado–

MI ARDIENTE TENTACIÓN - JoerickDonde viven las historias. Descúbrelo ahora