Presencia

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En la palma de la mano había una pequeña concha de colores pálidos pero brillantes, que cobraban mayor vivacidad con los reflejos lumínicos que recibía del sol.
El joven entrenador la agarró por entre sus dedos y la observó cuidadosamente desde distintos ángulos, profundamente interesado en ella. Gladio trazó una cálida y sutil sonrisa por la reacción que había generado, feliz de que hubiera surgido tal curiosidad. Siguió ondeando el agua, recolocándose el cabello rubio y de tanto en tanto se percataba de los pocos Pokémon que se acercaban paulatinamente con precaución y sigilo.

Habiéndose pasado un rato, empezaron a intuir un agudo y energético ladrido por la lejanía. Trataron de encontrar su origen, pero el islote les impedía observar el horizonte.
El movimiento del agua era cada vez más próximo, y la criatura que se acercaba nadando por la superficie de camino a acompañar a la pareja de amigos no era otra que el Rockruff del Profesor Kukui. Subió por entre las rocas, se sacudió el agua, y ladró animoso para reafirmar su presencia.

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