CAMINOS CRUZADOS

CAPITULO X - Nervios

Misaki estaba preparando unos huevos revueltos con salchichas para el desayuno cuando Akihiko bajó las escaleras con una mirada extraña. Parecía como si algo le preocupara y al mismo tiempo se veía feliz. Por primera vez en tantos años de convivencia, no pudo interpretar como se sentía y eso lo perturbó un poco.

—Usagi-san ¿te pasa algo?

—¿Uhmm? —Akihiko ni siquiera lo miró. Estaba moviendo sus manos por sus bolsillos como si hubiese perdido algo.

—Estas... raro.

—¿Quién? ¿Yo?

—¿Quién más puede ser? ¡Te estoy hablando a ti!

—No pasa nada, solo tengo una firma de autógrafos hoy en la tarde.

—¿Hoy? —Misaki lo miró con sus ojos enormes—. Lo siento lo olvide.

—¿Qué olvidaste?

—Olvide tu... —Misaki se quedó mirando las salchichas que ya estaban listas. En su mente, trataba de recordar algo sobre la dichosa firma—. Espera un momento... tú no me dijiste nada sobre esta firma.

—No lo hice, no.

—Normalmente me pides que vaya contigo... —dijo en un tono bajo. Misaki sirvió el desayuno y lo llevo a la mesa mientras miles de pensamientos lo atormentaban. Ambos se sentaron en la mesa para comenzar a comer, sin embargo, el menor sentía que cada bocado se le atoraba en la garganta. Parecía que comer callados era últimamente parte de su rutina.

Por un lado, Misaki quería guardar silencio y mostrarse comprensivo con Usagi, después de todo, ¿Qué podía hacer si no deseaba que lo acompañara? Por otra parte, volvía a sentir que se estaba convirtiendo en una molestia... ¿tal vez había dejado de quererlo? Era lamentable estar pensando siempre lo mismo. Vivir en ese tipo de inseguridad no era para nada saludable.

—¿No me quieres contigo en la firma? —mordió sus palillos cuando al fin preguntó.

—No es eso.

—¿Entonces que es?

—No quise molestarte ya que vives muy ocupado llevándole recados a ese mangaka.

—Solo voy con Ijuuin-sensei cuando me lo pide la editorial.

—¿Y cuándo te invitó a ver todos sus manuscritos? ¿La editorial te obligó?
—No...

—No importa Misaki, no tienes que venir hoy ni ningún otro día.

—¿Eh? —Misaki estaba perplejo por esta nueva actitud—. Será que estas... ¿de nuevo estas celoso?

—Yo siempre estoy celoso de cualquiera que te mire, pero claro, eso a ti no te importa.

—¿Cómo puedes decir eso?

—¿Cómo? Es muy simple Misaki, no hay un solo dia en que no digas que amas a ese magaka y saltas de felicidad cuando tienes que ir a su departamento ¿No crees que llegaría el día en que esta situación me cansaría?

—Estas siendo completamente irracional Usagi, es mi trabajo ¿Qué tiene de malo si lo disfruto? Y no es que yo lo ame con... con ese tipo de amor...

—¿Cuándo le dirás a Takahiro?

—¿Eh? ¿A qué viene eso ahora?

—Solo quiero saber si es que algún día le dirás o simplemente te iras de mi lado con tal de seguir ocultando lo nuestro.

—Yo... Usagi ya te dije que me des tiempo...

—¿Tiempo? llevo años siendo rechazado cada que me acerco, con incertidumbre de que te marcharás y que me negarás ante todo el mundo, finalmente, tampoco puedo soportar que le digas te amo a otro y a mí no ¿no se supone que somos pareja? ¿Hasta cuándo crees que un corazón puede soportar una situación así?