CAMINOS CRUZADOS

CAPITULO LXXX - Reconciliación parte 2

Hola! primero les digo que ya que la mayoría estamos en cuarentena, debo avisar que antes de leer asegurarse de que no hay nadie cerca porque hay sexo explicito... ¡conste que les avise!   ahora si ¡a golosear un ratito! 

Misaki no deseaba despegar la vista de aquel hombre que llegó a su vida para llenar cada vacío. El mismo que se encontraba de rodillas ante él con sus ojos dorados brillando con amor y absoluta entrega. Sus enormes y calientes manos acariciaban el costado de sus piernas de arriba abajo con lentitud y ternura. Su fuerte olor a hombre lo hacía sentirse seguro y sus brazos... era como correr directo al cielo cuando se abrían para recibirlo.

¿Cómo era posible para él vivir sin Asami? Cada célula de su cuerpo dolía cuando estaban lejos, era como si aquel hombre se hubiese transformado en droga y lo convirtiera en adicto sin posibilidad de rehabilitación.

Su destrozado corazón comenzó a unirse como si de magia se tratara. El dolor que soportó por horas apenas si era un lejano recuerdo que deseaba olvidar rápidamente. Un poco más tranquilo suspiró profundamente y luego con una sonrisa tímida preguntó con un tono bajo.

―Entonces... ¿ya estamos reconciliados?

―Si perdonas lo estúpido que fui.

―Te perdono, era imposible que fueras perfecto.

Asami sonrió suavemente elevándose para darle un beso... hasta que sintió la pequeña mano de su amante sobre su boca impidiendo cualquier contacto. Asami se alejó de nuevo con un brillo de duda en sus ojos, pero esperó pacientemente a que el castaño dijera cuál era su descontento.

Pudo ver que sus ojos enormes y verdes estaban más tranquilos y seguros, sin embargo, existía un brillo extraño que no lograba comprender. Algo pasaba en ese momento por la mente de su pequeño, provocando que un frio recorriera la espalda del mayor y haciendo que sus vellos se pusieran de punta.

Sin previo aviso, un fuerte calor se sintió en su mejilla derecha, luego en la izquierda... Asami estaba demasiado sorprendido como para registrar lo que estaba sucediendo, pero cuando Misaki iba a darle una tercera cachetada, sus reflejos se hicieron presentes y de inmediato apresó sus muñecas mientras lo reprendía enfadado.

―¿¡QUE DEMONIOS ESTAS HACIENDO!?

Misaki lo miraba furiosamente y cuando habló le estaba prácticamente enseñando los dientes.

―¡TE MERECES ESO Y MUCHO MAS!

Asami lo miró cada vez más furioso, pensando si su amante se volvió bipolar o venía así de fábrica. Hace apenas un segundo, estaban bien, mirándose con amor y acariciándose con ternura, ahora sin embargo, Misaki se retorcía luchando para liberarse y poder seguir abofeteándolo.

―Misaki...

―¡Nada! ¡Dijiste que fingía ser decente! ―lanzó una patada golpeando el abdomen de Asami quien gruñó al instante―. ¡Que me iba a coger con mi ex! ¿QUIEN RAYOS CREES QUE SOY? ¡Voy a patearte el culo por hablarme así!

El castaño siguió luchando dándole algunos golpes, era muy difícil para el mayor controlarlo sin causarle daño. Otra bofetada terminó con la paciencia de Asami quien en ese punto no sabía si sentirse furioso o divertido... al final decidió ponerse cachondo.

Con fuerza tiró al joven sobre la cama y sin perder tiempo lo aplastó con el peso de su propio cuerpo, restringiendo la mayor parte de sus movimientos. Un par de puñetazos se conectaron contra su fuerte pecho, por lo que Asami se rio fríamente mientras hablaba en tono amenazante.