Klance one-shots

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Su suerte era una mierda, pero eso era para no variar mucho, porque nunca le había pasado algo bueno, si tenía que pasar algo, una desgracia, sino, nada.

-Keith, deja de hacer el tonto en casa y ve, quedará igual, ya sabes que es un efecto secundario,_ahí estaba su hermanito mayor, animándolo un poco, que perder una pierna no había sido lo mejor del mundo.

-Si tú lo dices,_soltó el aire de sus pulmones a modo de suspiro, de cansancio de todo, que ese año y medio había sido una mierda.

Recordaba despertar después de la misión, a Shiro y a su madre llorando y observándolo, la rehabilitación, el añadir una prótesis a su anatomía, los cambios de imagen, que ya tenia asimilado lo de la pierna, pero el pelo no, que cortarse la melena cuando estuvo en coma casi tres semanas, pues no le importó mucho, pero que su cabello quedase blanco, pues no, que no le pegaba.

-Venga, ¿voy contigo?,_el menor negó, hacía meses necesitaba a Shiro para miles de cosas, pero ya no, quería que su hermano tuviera la libertad de dejarlo solo sin problema, que aún le costaba.

-Es solo un tinte, después de esto le pienso pedir a mamá que me enseña a hacerlo yo,_que lo tenía más claro que el agua, que ir a una peluquería no era lo suyo, pero tampoco sabía cómo iban las cosas de estética, no le quedaba otra.

-Y corta un poquito,_Shiro le revolvió el pelo y lo abrazó,_se que estás completamente recuperado, pero si pasa algo por favor avísame.

-Que si, que si,_suspiro y lo abrazó también y nada camino a ese sitio, recomendación de Allura, veremos a ver cómo le iba.

Para empezar estaba muertisimo, no había dormido nada, que empezaba a correr el fresco, que iba con abrigo y con bufanda, que su prótesis molestaba un poquito en los cambios de tiempo, solo un poquito, pero no iba a decir nada para preocupar a Shiro o a su madre, no era plan.
Camino un ratito más hasta llegar, que hacía un viento que cortaba, así que entro sin vacilar siquiera, necesitaba verse al puto espejo y tener su pelo de un color decente, por decente entendamos negro.

-Lance, de este te encargas tú,_la señora que lo recibió le paso con otro chico, tendría más o menos su edad,_no te preocupes Keith estás en buenas manos,_esa mujer era la estilista de confianza de la peliblanca, debería fiarse de ella si, si o si.

-Voy,_y ahí estaba el cubano mirando a su cliente, que era guapo de cojones vaya, le sobraba pelo, bastante, pero eso podía arreglarlo, siempre que quisiera,_hola, el nombre es Lance, seré tu estilista hoy, puedes dejar el abrigo y eso en la percha.

El aún no azabache obedeció y siguió a Lance, el puto frío le había resentido un pelín la prótesis, aún no había hecho la revisión que le tocaba y andaba algo rarito, pero no se notaba mucho.

-Esto, soy Keith,_el moreno asintió y le indicó sentarse, genial, ahora le iban a dar la chapa, de que tendría y que no que hacerse,_solo quiero tintarlo, negro, ya está.

-Puedo tintarlo y ya, pero lo tienes algo estropeado, si hacemos eso sin cortar se estropeará aún más, habría que cortar al menos un par de dedos, lo mínimo,_el ojiazul movía el cabello del aún peliblanco de un lado a otro, si, el negro le iba a quedar genial, pero no le quedaba mal el blanco.

-Vale, pues corta lo que haga falta para que no esté mal y ya está,_total, le habían cortado el pelo muy corto sin su permiso en el hospital, y no estaba de humor, ya se conformaba solo con volver al negro y salir de ahí, no le gustaba ese ambiente, ni tranquilo, ni acogedor, iba a matar a Allura.

-Está bien, empezaremos por el tinte, para ver que podemos salvar de largo,_Lance no era tonto, ese chico se veía muy incómodo, si quería melena, pues melena, era su decisión.

El de tez pálida se quedó atento a todas las explicaciones del moreno, lo observó preparar el tinte y ponérselo, si se quedaba con todo lo que hacía no tendría que volver, pero es que, ese chico le llamo la atención, su carita de concentración, su sonrisa, es que se lo comía.
Pero quien querría estar con él.
Que Keith era un juguete roto.
Aún no había recuperado su físico por completo, que hasta dentro de un par de años no iría a ninguna misión, solo daria clases de vuelo básico.
Para si, era un fracasado.
Además estaba empezando a colocarse con el olor del tinte, ese sitio era una tortura.

-Te gusta tu trabajo, se te nota mucho,_le soltó sin más, que se estaba mareando, el cubano rió, que esa risa era música.

-Supongo que si, es como hacer magia, le puedes devolver a cualquiera la confianza, tú no tienes pinta de ser muy mayor, ¿es de nacimiento?, ya sabes el color,_Keith negó, se arrepintió al instante, pero es que ese chico creaba un ambiente de confianza raro, además que él estaba colocado con el puñetero tinte,_¿qué pasó?

-Una misión salió mal, un compañero perdió el control de su nave, evite que se estrellase y muriera, pero.., bueno digamos que no salimos ninguno de los dos ilesos,_se veía que lo estaba pasando mal, mucho, ese chico era Matt, el hermano mayor de su amiga de la infancia, es que no concebía la idea de que alguien así muriera y lo evitó, aunque Matt salió mejor parado que él, solo unos huesos rotos.

-No pasa nada, no tienes que hablarme de ello,_Lance le puso la mano en el hombro,_no pasa nada de verdad,_lo había visto disimular una cojera, así que se lo imaginaba,_venga, vamos a enjuagarte y ver qué hacemos,_una sonrisa cálida y contagiosa, era la primera vez que veía al otro sonreír, era precioso, si supera el mareo y colocon que llevaba en el fondo.

Y nada un ratito de discusión, lo que tenia no cuidarse nada, que cuando te da por hacer algo al respecto hay que ser un pelín radical.

-A ver, si desde hace un año y medio no lo cortas, no lo cuidas y a eso le sumamos el tinte, hay que cortar para sanear todo esto,_si señores más de dos palmos, se le quedaría un poquito por debajo del cuello, rozando el hombro, cuando ya le traspasaba,_también hay que hacer algunas capas, no te lo cortaste desde que me dijiste que te lo cortaste muy corto, ¿no?

-Si, lo sé, si me lo cortaron yo no fui, te dije que no estaba consciente,_Keith intentaba defenderse, pero hasta el sabía que había que cortar.

-Si quieres que este bonito, hay que cortar, no se te va a quedar corto, de verdad, notarás el cambio en el largo, ademas te crece muy rápido, así que tranquilo,_eso sirvió para convencerlo, lo suficiente, pero es que él al fin azabache le estaba contando cositas personales y Lance también se estaba abriendo mucho con él.

Corte aqui y allá y en quince minutos estaba más que listo, era melena, no se podía quejar, el cubano si, que por él le habría metido mucho más la tijera, pero es que la carita de pena de Keith le podía, eso y que le gustaba vaya.

-Oye Lance, gracias, ya sabes por todo,_el cubano negó, que se había desahogado con él, que eso no era profesional, pero es que se sentía muy cómodo.

-No las des, tú también, bueno ya sabes, me escuchaste,_un "yo te escucharía siempre" se escapo de los labios de Keith,_en ese caso,_aunque rojo fue rápido y apunto su número en un papel,_dame un toque cuando quieras, yo también te escucharé siempre.

A partir de ese día a Keith no le importaba lo de su pierna, Lance adoraba cada cm de su cuerpo, sin importarle nada, que uno apoyaba al otro.

Si queréis continuación de esta o cualquier otra historieta, os espero en los comentarios.
Mil gracias por leer mis movidas.
Squire White 💕