Klance one-shots

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Los melocotones significan que está subidita de tono, así que bajo vuestra responsabilidad.

Sabemos que no tienen remedio, no lo han tenido nunca.
Menos ahora.
Crecer y madurar no implica volverse responsables, no del todo al menos.

-Lance, no, tengo una reunión con el cuartel, para,_que si, que a Keith su cubanito lo había puesto cachondo, pero el trabajo era el trabajo.

-Pues diles que no puedes, que estás ocupado,_insistia el ojiazul, con una sonrisa para nada inocente.

-Que no me líes,_el azabache estaba usando la poca cordura que reinaba en él, haciendo de tripas corazón.

Con la fuerza de voluntad que le quedaba ignoró una vez más a su chico, encendió su ordenador, bueno, abrió una de esas pantallas flotantes inteligentes creadas por Pidge y que funcionaban como tal y se conectó.

Una reunión informativa para una misión y con gobernadores como muchas otras, se había tenido que poner el uniforme, solo la parte de arriba, que le daba pereza.

Pero su chico tenía otros planes, y no buenos precisamente, tampoco es que fueran horribles, pero eso de ir por la casa con uniforme por arriba y solo los calzoncillos por abajo.., la culpa no era del cubanito por tener ojos.

Y ahí estaba, hablando de cosas serias, con esa carita de concentración y bien atentó a todo.

Que poco le iba a durar esa.

-Muy bien, Keith, entonces, ¿cuándo puedes pasarte por el cuartel general?,_Kolivan hablaba con el hijo de su compañera, ella estaba fuera y él se tenía que encargar de las reuniones de ese día.

-Si os corre prisa puedo salir para allí en un par de ho-horas,_si, a Keith le temblaba la voz, miro hacia abajo, iba a matar a su chico.

Lance con la cara menos inocente del mundo y armado con unas tijeras se había deshecho de la ropa interior de su chico.

-Keith, ¿tu conexión va bien?,_le preguntó extrañado, jamas había visto al menor tartamudear.

-Si, si, todo bien, se habrá ido por un momento,_mintió y miro disimuladamente hacia abajo.

Kolivan se relajó y le siguió explicando alguna que otra cosa sobre la misión que necesitaban que hiciera, que Keith los ayudaba mucho.

Mientras el mayor le daba detalles, los justos, que hablamos de Kolivan, Lance se dedicaba a poner a su chico a mil por hora.

-Muy bien, ahora nos conectaremos con los gobernantes, por eso te pedí el uniforme,_el mayor sonrió con confianza, Keith por algún motivo les caía bien a la gran mayoría, seria fácil con él que fueran algo más colaboradores.

-Lance, te lo pido por favor,_suplico en apenas un susurro el azabache.

-Yo también te lo había pedido por favor,_le respondió en el mismo tono el ojiazul.

El morenito estuvo jugueteando con el sexo de su chico entre sus manos, poco tardo en ponerse duro, pero el muy cabron aguantaba.

Y no, eso no podía ser, ese no era el plan.

-Ríndete,_le murmuró y el azabache negó, no podía bajar las manos de la mesa para manejar los documentos que le iban mostrando y firmar algunos,_pues tú lo has querido.

El cubanito con algo de enojo, pero sobre todo lujuria recorrió con su lengua la longitud del sexo de su chico, sin ápice de vergüenza, sin condón, no importaba.

Kolivan le seguía hablando a Keith de cosas importantes a cerca de la siguiente misión, antes de iniciar la conexión con el resto de los gobernadores y él estuvo aguantando, como un campeón.