Klance one-shots

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Dedicado a tod@s los que habéis estado o estáis en cuarentena.

Llevaban dos semanas, casi tres sin poder salir, solo una vuelta a la manzana con Cosmo e ir al super por turnos para toda la semana.

-¿A qué le das tantas vueltas?,_le preguntó el azabache, que su chico estaba sentado en el sofá, robando su portátil y con la cámara preparada para grabar.

Lance era realmente carismático, empezó hacía un par de meses a subir vídeos, principalmente de rutinas de cuidado y de maquillaje, también algún que otro blog, y creerme, su canal había ganado seguidores, subiendo como la espuma.

-A que tengo todo el maquillaje en casa, tú no tienes nada, ya hice un par de rutinas de tratamiento facial con lo que tengas en casa, versión cuarentena,_Keith se había sentado a su lado, así que aprovechó para acurrucarse con él.

-Tu casa está algo lejos, puedo acercarme con la moto y cogértelo, le pido a tu hermana que lo baje y ya está,_le dijo, acariciándole el pelito.

-No, no, no quiero que salgas si no es imprescindible, y no se te ocurra comprar maquillaje en el súper, que te conozco,_Lance era un mimoso, mucho.

-Bueno, muchos estarán como tú, ¿no?, haz un vídeo sobre eso, animándolos a entretenerse en casa,_un besito tonto y a Lance se le iluminó la carita.

-Tengo que subir vídeo el miércoles y el domingo, había pensado en que me puedes ayudar para el miércoles, pero también te necesito para el domingo, poooorfaaaaaa,_y a esa carita no le podía decir que no.

-Vale, vale, vale, ¿qué quieres que haga?,_le preguntó, y se iba a arrepentir y mucho.

Lance no solía hacer rutinas para pelo, principalmente porque el suyo era muy cortito y para cuidarlo sólo usaba aceite de coco y poco más, pero su chico tenía melena, podían probar mascarillas, enseñárselas a sus subscriptores, Keith iba a morir, la otra idea era la de hacer un blog de su semana, grabando ambos alguna que otra parte.

-Pero coge bien la cámara,_Lance no podía evitar reírse, a fin de cuentas su chico era muy vergonzoso.

-¿No se coge así?,_le preguntaba extrañado, a lo que el cubanito negó.

Con la confianza que lo caracterizaba y una sonrisa divertida el ahora un pelín más bajo se acerco a su chico, le dio la vuelta a la pantalla y se la colocó bien en la mano, para que le fuera más cómodo el manejarla.

-Así, ves, aquí miras y aquí ves que sales,_le dio un piquito, enfrente de la cámara, es que era demasiado adorable.

-Vale, vale, quita,_si, Keith estaba rojo, porque le daba vergüenza, mucha, mucha vergüenza.

Los dos eran adorables, mucho, y pegaban también, que hacían muy buena parejita.

-Nooo, chicos, este chico tan precioso es Keith, mi novio y me va a ayudar esta semana, estamos los dos juntos encerrados, con Cosmo, aunque a ella sí la conocéis, vamos a grabar un poquito sobre nuestro día a día y que hacemos en estos tiempos de aburrimiento,_Lance hablaba con soltura, abrazadito a Keith por detrás y apoyado en su hombro.

-¿Eso quiere decir que vas a entrenar conmigo?,_le preguntó sorprendido el ojivioleta.

-No, pero te grabare un poquito cuando entrenes,_un piquito y el azabache cortó la grabación.

Eran dos tontos y dos ñoños, aunque también se peleaban, aunque fuera un poquito.

Empezaron con la tontería a grabar, Lance le había dicho a Keith que grabase cosas que hacía todos los días, el día que más le apeteciera, pequeñas escenas que el vídeo no podía durar tanto, su rutina diaria variaba un poquito.