Klance one-shots

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Especial 16k 1/? porque no sé si os va a gustar XD

Casi tres meses llevaban saliendo, que a Keith le salía la sonrisa tonta de enamorado cuando el cubano pululaba a su alrededor, o cuando pensaba en él.

-¿De verdad vas a venir a recogerme?,_le preguntó el más alto, andando detrás, bien pegadito.

-Te he dicho que si, que te abrigues, que voy con la moto,_Lance lo abrazo por detrás, que estaba gruñón,_que no es coña.

-Ya, ya, luego vienes y vamos andando a la parada de bus,_le contestó el morenito, dándole un beso en la mejilla,_¿a qué hora?,_le preguntó, que le había prometido llevarlo a un sitio que había descubierto y que le iba a gustar.

-A las cinco, en punto, no te espero que me miran por la ventana,_le dijo, que le daba una vergüenza que se moría.

La verdad con sus pintas de macarra, que la familia de Lance se creía que salía con una especie de delincuente, que menudo desastre todo.

-Si los conoces dejarán de asomarse, además solo son mis hermanas y mi madre las primeras veces, eres mi novio, es normal que te quieran conocer,_ya estaba el tema de conocer a la familia del novio.

-Que no, está tarde voy a por ti, y no quiero quejas, que te pasa por chulo,_el cubanito se rio al escucharlo,

Y Keith se preparó, y tanto, una mochila, el maletero de la moto lleno y el otro casco colgando del brazo, y con unas pintas.

Lo que toda madre quiere para su hijo, vaya.

Su melena al viento, que con el casco no molestaba, solo sobresalía un poco, su fiel chaqueta de cuero negro, las botas negras, los pantalones negros, esos que eran especiales para la moto, que parecía un macarra y una camiseta de manga corta negra con un dibujo de la muerte, que se veía con la chaqueta sin abrochar, el look perfecto para que a Lance le diera un infarto, y a su madre más de uno.

-Por Dios, dime que no vas a conocer a los padres de Lance así,_Shiro lo miraba desde el umbral de su cuarto, que Keith tenía ese estilo de chulo, con cosas emo, góticas, pero sin encasillarse.

-Que va, voy a recogerlo solo,_le respondió.

Estaba sentado, amarrándose los cordones de las botas, con carita de concentrado.

-A la puerta de su casa, que te van a ver, ya lo metiste en una pelea, tu suegra te va a querer,_Shiro le revolvió el pelo, que menuda imagen.

-Pues que me vean, cuando me conozcan que opinen,_pero a Keith le aterraba la idea de tener suegra, suegro y el largo etc que conllevaba la enorme familia de su chico. 

Os pongo en situación quedaban diez minutos para las cinco, con los nervios cierto ojiazul estaba listo, Keith le había mandado un mensaje, estaba listo, pues lo recogía antes.

El morenito con esa carita de tonto enamorado miraba la esquina, la de su calle, que en ese sitio se ponía el azabache, desde ahí y con prismáticos lo veían las mujeres de su casa..., nivel de cotillas muy alto si.

-¿Cuándo viene tu Romeo?,_le preguntaba Rachel.

-En poco, y no lo llames así,_le dijo con el ceño fruncido, que odiaba que lo molestasen con eso.