Continuación cap 146 por petición popular.
Ahí estaba, Lance sentadito sobre él y dejando que el oxígeno se colase lo justo y necesario para ambos, que sus bocas se habían juntado con fuerza y no iban a separarse.
-Has sido un auténtico cabroncete,_le decía el azabache, que se había puesto en pie y lo había cargado.
-¿Y me vas a castigar?,_le preguntó el ojiazul, con esa carita de niñato prepotente.
-Me vacilas otra vez y te dejo caer,_el cubanito aferró sus largas piernas aún más fuerte sobre las caderas de su chico,_si aprietas tanto te la vas a romper,_se burló al notar como se le clavaba cierta parte dura de la anatomía de su chico.
-Qué te calles, la culpa es tuya,_el cubanito notó como su chico se inclinaba para dejarlo caer en la cama, se supone que debía de soltarse, pero no, no le apetece una mamada, quiere otra cosa.
-Suelta,_le pidió para besarlo, pero no, no iba a funcionar.
-Te suelto si me haces un strip-tease,_le propuso.
-Voy medio desnudo, mejor házmelo tú,_el ojivioleta besaba bien, demasiado bien, no era justo, así convencía a cualquiera.
Y allá que iba, Lance podría habérselo currado, o mover más las caderas, pero que su chico le tararease esa cancioncilla, ese "nanana, na, nana", y lo imitase desde la cama no ayudaba mucho.
-Me creía que ibas a fingir que te quitabas los calzoncillos,_bromeo al tumbarse sobre él, es que adoraba esa parte sumisa del de tez clarita.
-Y yo que me los quitarías con los dientes y no con unas tijeras,_le respondió y los dos empezaron a reír a carcajada limpia, entre el tonteo y lo cachondos que estaban.
-¿Te apetece?,_le pregunto el moreno, frotando su sexo que ya hasta dolía.
-Debería de dejarte así por gilipollas, pero es que me has puesto, y mucho,_y no, no mentía, que el plan era putearlo un poco y ahora iba a poner el culo, cosas que pasan.
-Que gracioso,_Lance lo besó, ahora con más euforia, con el mismo cariño, pero un deje mucho más salvaje.
Keith se dejaba hacer, pero tampoco se quedó quieto, que le hizo unos cuantos chupetones en el cuello antes de ser buen chico y ponerse a cuatro.
Que no quedaban condones, pero no importaba, hacerlo a pelo de vez en cuando era una opción, ya cambiarían las sábanas.
Ese cuerpo pálido, que con un roce esa piel quedaba marcada, que se pasaría la vida besando las cicatrices de su espalda, recorriéndolas con sus labios.
Lo hacía.
Mientras subía hasta el cuello las mimaba.-Que voy, eeh,_le susurro en en cuello, dejando que su aliento caliente le hiciera cosquillas y le erizara el vello.
Lance siempre lo pondría a mil por hora, con esa sonrisa de medio lado, con sus pupilas dilatadas, con el olor a coco y el sudor perlado que se acumulaba en su frente, pero sobre todo con ese cuidado y con la sutilidad con la que hacía las cosas.
-Mmmh, s-se supone que te iba a hacer gritar yo,_le dijo el chico de melena, mirándolo de reojo con las mejillas tintadas en color cereza.
-Y creéme que gritaré,_esa imagen era digna del pecado de la lujuria, con el pelito negro y revuelto contrastando con su piel blanca y esos ojos violeta, se le iba a poner más dura de solo ver como empezaba a respirar de forma entrecortada con cada vaivén.
Lance empezó ese baile cruel, despacio, para que fuera un simple roce piel contra piel, entrando y saliendo poco a poco, pero sin sacarla ni meterla del todo, quizás parecía una tortura, pero es que no lo había dilatado, lo último era hacerle daño.
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Klance one-shots
FanfictionKeith, de piel clarita, ojos violeta, carácter imposible y coladito por el cubanito. Lance, morenito, ojos como el mar, completamente alocado y coladito por el medio galra. Son como el fuego y el agua, como el gato y el perro. Pero todos los polos o...