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Especial San Valentín

Toda la vida, llevaba toda su maldita vida planeando una cita de san Valentín perfecta, pero no, su chico no estaba por la labor, su Salud tampoco.

Toda la santa noche con fiebre, sin apenas poder dormir, ni al volver de urgencias para que lo tratasen, que todo le olía a hospital.

-¿Cómo estás?,_en la otra línea Keith, que tampoco había dormido mucho, pero si no iba al instituto Lance lo mataba.

-Algo mejor, ya no tengo tanta fiebre, ¿y tú?,_le preguntó bajito, escondido bajo las mantas, que era un lugar seguro.

-Yo bien, aguantando las clases, son insoportables sin ti, ¿sabes?,_Keith sonreía y hablaba bajito, estaba en las taquillas, él solito, hablando a escondidas.

-Si, si, pero tienes que ir, y nada de fumar, ¿vale?,_esa regañina continua había terminado sirviendo.

-Vale, nada de fumar, aunque tampoco es como si pudiera, Shiro está muy pendiente y no tengo tabaco, ni ganas de conseguirlo, enserio,_que el azabache sólo quería abrazar al tontorron de su novio, y quizás darle algún piquito y decirle alguna gilipollez cursi.

Lance le había cambiado la vida.
En muchos sentidos.
Por eso lo amaba, porque no lo cambio pero si lo mejoro.

-¿Vendrás luego?,_le preguntó, con el corazón latiendo a mil por hora, que quería verlo, era el día de los enamorados y él quería verlo.

-Claro, te tengo que dar los apuntes y las tareas de hoy,_le contestó, y una parte de Lance, la romántica se quejó por dentro, pero no dijo nada, absolutamente nada.

-Vale, muchas gracias, Keith,_de fondo escuchó la campana,_ve a clase, y no olvides que te quiero, eeh, que nadie intente nada ahora que no estoy,_Lance hizo un puchero pequeñito.

-No te preocupes por eso, te quiero, nos vemos luego,_le susurró medio muerto de vergüenza, sonrojado.

Las clases fueron lentas, se las iba a saltar, pero necesitaba que Shiro lo llevase en coche, y no se podía quedar con el coche, que su hermanito tenía una cita con su chico.

Lance por su parte, como iba su chico, se entretuvo en más o menos arreglarse, que estaba hecho un asco, pero puso sábanas limpias, se ducho y se puso ropa bonita pero cómoda, que estaba malito.

-¿Entonces en el fondo eres un romántico, Keith?,_Shiro se lo estaba pasando bomba, su hermanito pequeño con novio y celebrando San Valentín.

-Que me dejes, que te calles,_el azabache iba de morros, desde que salieron de casa, que no paraba de meterse con él.

-Venga, que no pasa nada, me hace ilusión dejar a mi hermanito en su cita de San Valentín,_le decía a la par que conducía.

-No es una cita, está mal, ya saldré con él otro día, que no me hace falta que sea el puñetero San Valentín,_le dijo con cierto fastidio.

-Vale, vale, ¿pero te quedas a dormir con él?,_que Shiro no era tonto, tenía que saber si tenía la casa para él solo.

-Si, sus padres se van, sus hermanos están fuera, llevamos el tiempo suficiente y me conocen bastante, prefieren que me quede con él a que se quede solo,_Keith lo miró divertido y alzó una ceja,_igual vamos a casa.

Klance one-shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora