Klance one-shots

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Continuación capítulo 79 dedicado a @miss_fortune05

Habían pasado meses, y el cole empezó, el temido cole para Lance, pero Keith estaba con él, así que no era tan terrible en el fondo.

El verano se había terminado, y cada vez el calor se hacía algo menos presente, y eso sognificaba comprar libros, material escolar, ropa y uniformes.

-A ver mis tres pequeñitos,_que eran ya los más grandes del parbulario, tenían ya cinco añitos.

Los tres se pusieron en fila, con su uniforme, con su gorrito, sus mochilas y zapatos, eran una monada de críos.

-Estáis muy guapos,_Marco los observaba, Keith no estaba acostumbrado a tanta atención, así que llevaba rato sonrojado.

-Son los niños más lindos de su clase,_la abuelita sonreía al verlos desfilar para ella.

El azabache se sonrojó un poquito más, pero se dejó hacer por completo, es que le gustaba ese calor y ese cariño.

-Vale, a ver ahora Vero, Marco y Shiro,_la mamá estaba emocionada por ver los nuevos uniformes de todos sus nietos, es que los adoraba, y ya estaba rodeada de los pequeños.

Los tres mayores desfilaron, dieron un par de vueltas y fueron aplaudidos.

-A ver, Shiro mi niño estás delgadito, hay que ponerle un elástico a ese pantalón,_le dio un pellizco,_y Vero tú igual, no quiero que se te caiga la falda,_su madre les tomo las medidas y dejó a la abuelita observándolo todo.

-Mmm, Keef, ven,_Lance arrastró a su hermanito arriba, Vero y Rachel se fueron a hacerse fotos al cuarto de la mayor, y Shiro a terminar de pasarse un juego con Marco.

-¿Qué quieres?,_ya a esas alturas el ojivioleta ni lo regañaba, no servía de nada y a él se lo permitía.

El cubanito le dio su ropa, para quitarse el uniforme, que a Lance no le hacía mucha ilusión.

-Que te vistas normal, aún queda para ir al cole,_el que se había convertido en su hermano mayor, o algo parecido.

-Lance, ¿por qué no te gusta el cole?,_que el azabache no era tonto, sabía que pasaba algo, bueno, sabía más o menos que pasaba.

-Porque son malos, Keith,_el ojivioleta que se había terminado de cambiar abrazó a su hermanito,_pero estarás conmigo, ¿verdad?,_el morenito se aferró a ese diminuto, un poquito más como si fuese a escaparse de sus brazos.

-Yo estaré contigo siempre,_el azabache se separó un poquito y le dio un beso en la mejilla, que pequeños y que inocentes eran.

Pero es que esos besitos suaves animaban a Lance como nada en el mundo, así que Keith le daba alguno que otro de vez en cuando.

-Keith, mamá dijo esta mañana que nos cortaría el pelo, ¿por qué no te lo quieres cortar?,_el cubanito le apartó el pelito de la cara, que bajo su punto de vista estaba demasiado largo, y eso que adoraba juguetear con él.

-Porque no, porque duele,_le contestó sin más, Lance no entendía eso de que dolía.

-No duele, ¿te da miedo?,_el menor asintió,_pero no duele Keith,_se rio un poquito, solo un poco.

-Si que duele, Shiro lo sabe,_en ese punto el cubanito era consciente de que había cometido un error.

Keith era muy reservado, no solía hablar de los maltratos que había sufrido, solo en terapia y con Shiro, el mayor si contaba alguna que otra cosa a Marco cuando despertaba de alguna pesadilla.

El menor era distinto, solo se dejaba acariciar y mercer hasta quedarse tranquilo, ya está, sobre todo con esa nana que la que ahora era su madre le cantaba bajito, mientras recorría el pasillo con él en sus brazos.