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Especial 16k
No me odies la he escrito como tres veces hasta que me ha medio convencido, la familia de Lance es enorme, esto es muy difícil T.T

Oye, que no iba mal, hasta iba formalito y todo, que se había puesto los vaqueros que no estaban rotos, de los pocos de un color azul y no negro, una camiseta gris, algo oscura pero no cantosa, nada emo, al menos según él y su chaqueta de cuero, que esa siempre lo acompañaba.

-No te mires tanto, si tu suegra te ha visto peor, es fácil de mejorar,_Shiro lo miraba desde el umbral,_¿seguro que no quieres que te lleve?,_le preguntó, que estaban solos esa semana, como muchas otras.

-No, cogeré el autobús, es solo un almuerzo, y déjame, Lance tiene una familia enorme.., joder me van a acribillar a preguntas,_el ojivioleta suspiro, que en el fondo era un tímido.

Shiro vio como su hermanito se sentaba y se dejaba caer hacia atrás sobre su cama, era una monada, tan nervioso para algunas cosas y tan lanzado para otras, que ahí dónde lo veis se había hecho un undercut, si, si, pero sin cortar la parte de arriba corta.

La culpa en parte fue de Krolia, por decirle que no era capaz y apostarse la adopción de Cosmo, en resumen se corto la melena, si, pero solo una parte, esa loba merecía la pena.

-No te preocupes tanto, sabes a mi también me aterraba conocer a la familia de Adam,_lo imitó y se tiro a su lado.

-Shiro, tú eres el novio perfecto, jodeeeer, no compares, ¿de qué tenías miedo?,_Keith lo miraba con atención.

Shiro trago duro, eran cosas absurdas por las que ese mocoso le regañaba, pero a veces era su lucha interna.

Keith lo sabía, lo respetaba y lo acompañaba a veces hablando, otras solo con una peli de fondo, otras en silencio pegaditos, quizás medio abrazándose, otras con Keith poniéndole crema en el muñón, cuando tenía revisiones y se quedaba sin el brazo ortopédico.

-Bueno, ya sabes, pensaba en como presentarme y solo se me ocurría "hola soy Shiro, me falta un brazo y soy huérfano de padre, por lo que no van a poder conocerlo, oh y mi madre esta poco en casa, así que quizás a ella tampoco, a mi talentoso hermanito pequeño sí que lo podéis conocer",_el mayor podía escuchar las carcajadas de su renacuajo.

-Supongo que Adam no te dejo soltar esa gilipollez,_Keith alzó la ceja y vio como se sonrojaba, como le gustaba ver a su hermano mayor en ese plan, es que se merecía ser feliz.

-Claro que no, así que Lance te ayudará, solo, peínate, te llevo yo,_le enseñó el reloj, joder que iba a llegar tarde.

La casa del cubanito era un caos, mucha familia, mucho jaleo.

La madre del morenito repasaba que todo estuviera bien, desde la mesa del comedor hasta la mesa del té, todo tenía que estar perfectamente ordenado, que iba a venir ese chico y a cenar, lo habían visto siendo arrastrado al cuarto de Lance para estudiar, poco más.

-¿Todos estáis bien vestidos y arreglados?,_preguntó la mujer repasando uno a uno los miembros de su familia.

-Mamá, no te pongas histérica, ese es el trabajo de Lance, es la quinta vez que sube a cambiarse de ropa,_Vero suspiró, que a veces su hermano era muy dramas con la ropa.

-En realidad es la sexta,_la corrigió Rachel, que contaba otra vez las sillas.

Otra vez se escucharon pasos rápidos bajando las escaleras, más bien saltando los escalones de tres en tres, ese era nuestro cubanito favorito, con una camiseta azul clarita y unos vaqueros algo oscuros, formal pero lo justo.

Klance one-shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora