Capítulo XXXIII

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"Sirius no lo hizo", pensaba Amy, sentada en el marco de la ventana de la suite de Draco en la mansión Malfoy, recordando el artículo que Draco y ella habían leído en El Profeta sobre la fuga masiva de Azkaban.

Fudge acusaba a Sirius de haberlo planeado todo, pues una de las fugitivas era su prima Bellatrix Lestrange y él había sido el primero que había logrado escapar de Azkaban.

—¿Amy? —Dijo Draco acercándose a la ventana. Se veía muy guapo en pijamas y con el cabello revuelto—. Aún piensas en ese artículo, ¿cierto? —Preguntó y Amy asintió.

—Tú y yo sabemos quién realmente está detrás de la fuga de Azkaban. No puedo creer que Fudge siga negándolo. ¿Acaso prefiere que los maten a contar la verdad?

—No pensemos en cosas malas, Amy. No hoy. Es Navidad —respondió Draco sentándose a su lado y Amy sonrió—. Feliz Navidad, Amy.

—Feliz Navidad, Draco.

—Y feliz aniversario, hermosa.

—¡Oh, por Merlín! ¡Es el aniversario de nuestro primer año! Feliz aniversario, amor —dijo Amy con voz de caramelo.

Ambos miraron hacia arriba y notaron que una pequeña rama de muérdago había florecido sobre sus cabezas.

—Aunque mi madre no lo admita, le gusta la Navidad. Por eso hechiza la mansión cada año para que ramas de muérdago florezcan esporádicamente en puntos al azar, aunque yo opino que el muérdago florece donde hay amor.

—Eso fue hermoso —dijo Amy con ojitos soñadores.

—No desperdiciemos este muérdago.

Amy sonrió y unió sus labios con los de su amado en un eléctrico beso. Draco cerró los ojos y se estremeció al sentir los besos de Amy una y otra y otra vez, y aunque ella no podía sentir nada, era feliz sabiendo que él sí podía sentir algo, aunque sea sólo electricidad.

—¿Qué dices si vamos a dar un paseo en escoba, hermosa?

—Está helando afuera, cariño. Nevó toda la noche.

—Me abrigaré.

En ese momento, a Amy le llegó a la mente un recuerdo de Navidad de cuando Draco era niño:

El ya no tan pequeño Draco de 10 años abrió sus regalos junto al imponente árbol de Navidad que se erigía en el salón de la mansión Malfoy. Aún estaba en pijamas, y había recibido una Snitch Dorada y ropa nueva.

Amy lo miraba aferrada a la barandilla del piso de arriba sin que se diera cuenta, pero rápidamente regresó a su suite cuando lo vio corriendo escaleras arriba. Draco quería enseñarle sus regalos a su mejor amiga.

—¡Qué bonitos regalos, Draco! —Dijo Amy.

—Mamá nunca había tejido nada, pero hechizó los palillos para que me tejieran este gorro. ¿Puedes creerlo? —Respondió Draco enseñándole un bonito gorro de lana color gris—. ¿Qué dices si damos un paseo en escoba y vemos qué tan escurridiza es esta Snitch?

—Está helando afuera, Draco. Nevó toda la noche.

—Me abrigaré.

Draco se puso su gorro nuevo y Amy sonrió. Se veía adorable con ese gorro que combinaba con el color de sus ojos...

—¿Amy? —Preguntó Draco, sacándola de aquel recuerdo y devolviéndola a la realidad—. ¿En qué piensas, Amy?

—En ese gorro tejido que tu madre te regaló en Navidad hace unos años —respondió Amy y Draco sonrió.

Ghost of You || Draco Malfoy Fanfic [TERMINADA✔️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora