Grumpy.

1.6K 99 32
                                    

Wooyoung amaba al gruñón de San.♡

...

Una corona de flores en sus cabellos, un ramo de rosas en una de sus manos, una bolsita de color rosa en la que se podían observar muchos peluches y muchos dulces, demasiados en ella en su otra mano, el cabello de su novio color café con esa traviesa mechita blanca (que después de tantos ruegos a su madre pudo hacerse) y finalmente su vestuario, una camisa de color blanco con botones un poco más grande que su talla habitual y unos pantalones rectos de color negros acompañados con sus típicos y favoritos botines al estilo militar que su novio tanto amaba.

Dios, es que San era perfecto y se veía demasiado tierno.

Pero había algo que lo estaba por matar, y era esa expresión en su lindo rostro, una sonrisa muy brillante dejando a la vista sus hermosos, rosaditos y pomposos labios que hacían dúo con su hoyuelo que tanto fascinaba a cualquiera que lo viera se asomaba cada vez que alguna compañera (y algún que otro compañero también) se acercaba a darle un obsequio por el día de San Valentín.

¡San detestaba esa fecha! Y por ello no pudo resistir esa carcajada que estaba amenazando por salir desde que su novio apareció en su campo visual cuando finalmente lo tuvo en frente, este con un puchero y ahora con una mueca muy, pero muy obvia de molestia en su rostro por tanto obsequio que le habían dado, ¡Y apenas eran las 12 del mediodía!

-Vamos bebé, no es tan malo- fue lo primero que le dijo cuando este le miró molesto por haberse reído, sintió como este le lanzaba el ramo de rosas que andaba en sus manos a su pecho y lo tomó antes que cayera al suelo soltando una risita- ¿Tan fastidioso a sido?- preguntó al fin, viendo al mayor asentir con un bufido.

-Ese ramo lo he creado yo, ¡De tantas rosas que me han dado!- reclamo sin alzar la voz, pues no quería que los demás estudiantes se dieran cuenta de su molestia pese a todo, no quería herir sentimientos.

Wooyoung miró con asombro el ramo en sus manos y jadeo sorprendido cuando vio que, efectivamente cada rosa llevaba una dedicatoria por un alumno diferente, soltó otra carcajada- ve el lado bueno amor, eres lindo y todos quieren estar contigo- se burlo, sabiendo cuanto odiaba su novio ser el centro de atención.

-Ya no soporto esto, estoy a punto de escaparme de clases- admitió San con un suspiro mientras comenzaba a guardar las cosas en su casillero que estaba al lado del de Wooyoung- un compañero me dio esta tonta corona de flores y me pidió cargarla todo el día, es molesta- admitió mirando su propia cabeza con una mueca que no daba para nada con la apariencia tierna que ese día llevaba.

-Vamos amor, es solo un dia- le trato de animar- aunque sabes que puedes simplemente negar diciendo que no te gustan esas cosas y ya, me gusta más esa opción- admitió encogiendose de hombros, sintiéndose solo un poquito celoso por toda la atención que su novio recibía por parte de todos.

-No puedo hacer eso Woonie- recordó San cerrando al fin su casillero, para tomar su mano y suspirar- ellos saben que estoy saliendo contigo pero aún así se atreven a declararse o darme algún obsequio, no puedo simplemente rechazarlos sin tan siquiera tomar el detalle que me tienen, no soy tan malo- se quejo.

-Entonces te toca soportar esto 8 horas más- se resignó Woo, mirando como el mayor bufaba y asentia.

-¿Te han dado algo a ti?- preguntó cuando comenzaron a caminar hacia la cafetería, pues ya casi era hora de almuerzo, cambiando de tema.

-Lo de siempre- admitió el menor- unas cuantas cartas, unos chocolates y eso- explicó brevemente.

-¿Y eso?- murmuró mirándole de reojo- ¿Qué es "Y eso"?- insistió en saber.

𝕆𝕟𝕖 𝕊𝕙𝕠𝕥𝕤: 𝔄𝔪𝔦𝔠𝔲𝔰 𝔞𝔡 𝔄𝔯𝔞𝔰.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora