𝕆𝕟𝕖 𝕊𝕙𝕠𝕥𝕤: 𝔄𝔪𝔦𝔠𝔲𝔰 𝔞𝔡 𝔄𝔯𝔞𝔰.

Marque III.

♡Había una marca sobre su marca.♡

-Cumpleaños feliz, cumpleaños feliz, feliz cumpleaños querido Woonie, que los cumplas feliz- una sonrisa se posó en sus labios cuando su familia y amigos terminaron de cantar la canción para él, cerró sus ojitos y unió sus manos listo para pedir el deseo y soplar las velas, escuchando los aplausos de sus amigos cuando eso sucedió finalmente.

-Mi bebé está creciendo demasiado rápido- se quejo su madre yendo hasta él y arropandolo en un abrazo cálido que lo hizo sonreír- feliz cumpleaños cariño, espero disfrutes tu día y seas feliz toda la vida, lo deseo como tu madre, te amo- le dijo ella besando su frente y sonrió, sintiendo un calorcito de calidez esparcirse dentro de su pecho, conmovido por las palabras de su madre.

-Pero aún estas castigo Woo- le recordó su padre con una sonrisa de lado mientras se acercaba y lo abrazaba, haciéndolo reír, su padre siempre tenía que hacer una entrada diferente- felices 17 años hijo mío, eres mi orgullo, te quiero- le dijo este acariciando su cabello con cariño y sonrió, se sentía tan bien ese día.

-¡Ahora es mi turno!- se quejo Yeosang empujando suavemente a su padre quitándolo del camino, soltó una risita por el bufido de su padre y como éste iba hacia su madre mientras soltaba un ese mocoso es demasiado malcriado que Yeosang claramente ignoro- Feliz cumpleaños cariño, eres el mejor amigo del mundo y te amo, solo quiero la felicidad para ti- le comento separándose del abrazo- por eso te dare mi regalo más noche- le guiño un ojo mientras decía en voz baja haciéndolo sonrojarse mientras asentia.

Habían invitado a familiares que casi no hablaban con él, pero su madre le convenció diciendo que lo importante eran los regalos que obtendría y estuvo de acuerdo con ello, viendo discretamente dentro de una caja unos audífonos inhalambricos que algún tío le había regalado.

-Amor, comenzaré a partir el pastel- le aviso su madre y llegó hasta ella dispuesto a ayudarle- ¿Podrías ir por el cargador de mi celular a mi habitación? Mi celular está muriendo y tu tía Choa no me ha confirmado si viene en camino o no- le explico y asintió yendo rumbo a la habitación de sus padres sin renegar.

-Cargador, cargador- murmuraba buscando el objeto, tomándolo en sus manos cuando encontró el de su madre conectado en la mesita que estaba al lado de la cama, salió de la habitación de ella y cerró la puerta, sintiendo un viento recorrer su espalda se quedo quieto por el asombro, quiso correr hasta la sala y estar rodeado de personas, pero unos dedos rodear su estómago y una mano cubrir su boca se lo impidieron, se vio encerrado en su habitación y San estaba ahí frente a él de nuevo, viéndole con seriedad- Es mi cumpleaños- le dijo tratando de salvarse, San enarco su ceja como respuesta- ¿Puedo celebrarlo con mi familia antes de que me mates?- pidió no pudiendo evitar pensar en todo lo que sus amigos y sus padres habían hecho para que disfrutará su día, sería demasiado cruel de su parte irse así sin más.

-¿Quién dice que te mataré?- preguntó San con voz tranquila, analizando la vestimenta del menor y sonriendo de lado.

-¿Me dejaras vivir con mi pecado entonces?- interrogó Wooyoung- hubiera preferido morir- admitió sin pensarlo mucho en voz baja, pero de igual manera audible para el contrario.

-¿En serio lo escogiste a él?- brinco en su lugar y se coloco sin dudarlo al lado de San buscando refugio inconscientemente en él cuando aquella voz le sorprendió a su lado, lo vio y no pudo evitar comenzar a temblar de nuevo.

-Debo irme- murmuró tratando de abrir la puerta, dándose cuenta que tenía seguro desde afuera- Necesito irme... Dejame ir por favor- le pidió a San con pánico, no queriendo ver al contrario tras él quien solo soltó una suave risita por su reacción.