𝕆𝕟𝕖 𝕊𝕙𝕠𝕥𝕤: 𝔄𝔪𝔦𝔠𝔲𝔰 𝔞𝔡 𝔄𝔯𝔞𝔰.

Silencio.

♡Solo hablame en voz baja, en susurros hasta que te escuche.♡

Todo a su alrededor era silencio, miraba al chico a su lado que movía su boca hablándole a él, posiblemente, pero no sabría afirmar si era así o no, porque no podía preguntar, porque no podía escuchar, porque el silencio era lo único que lo acompañaba.

El chico sentado a su lado le miró curioso, posiblemente esperando una respuesta que no podría darle, levantó sus manos con cuidado, delicadeza y paciencia, haciendo señas con su mano mientras respondía, bajo sus manos acompañadas de un suave suspiro, un suspiro mudo, al darse cuenta de la expresión que el chico había colocado en su rostro al no entenderle, le sonrió levemente, lastimero, dolido y negó con su cabeza, el otro no volvió a intentar hablarle, y agradeció en silencio eso, porque no habría podido responder, porque no podría escuchar, porque no podia agradecer de otra manera que no fuera en silencio.

A la siguiente parada el chico se levantó de su lado y con su mano se despidió de él regalando una suave sonrisa en la que seguramente se disculpaba por no haber podido entenderle, suspiro negando pero de igual manera correspondiendo la acción despidiéndose con su mano igualmente, agradecía el hecho de que el otro tan siquiera se hubiera despedido, cerró sus ojos y se recostó en la ventana cuando él microbus volvió a su andar, su parada era la última y por eso confiaba, faltaban más de 8 paradas para que finalmente pudiera llegar a su hogar, en la tercera parada decidió abrir sus ojos, viendo en silencio a la gente que comenzaba a subir al transporte, muchas mujeres adultas que cargaban a sus bebés tomaban asiento rápidamente, muchos adolescentes que venían con el celular en sus manos y cascos puestos, otros que venían hablando y riendo por lo que el otro decía, entrecerro sus ojos tratando de escuchar algo, entender algo, pero no lo logro, solo había silencio.

Se exaltó cuando una mano tocó su hombro, giro su rostro asustado por el repentino toque y miró a un chico de cabello negro con un extraño mechón de color azul en este, quien señalaba el asiento a su lado, entendió lo que quería decir y asintió, había aprendido a saber cuando le pedían sentarse a su lado.

El otro sonrió y agradeció, lo supo al leer sus labios, pero lo demás no logró entender, el chico que estaba a su lado le miraba con una sonrisa y hablaba, hablaba mucho, su boca se movía mucho y soltaba palabras que él no entendía, porque no lo escuchaba, solo había silencio a su alrededor, el otro mantenía una sonrisa en sus labios mientras su boca no dejaba de moverse, él pequeño hoyuelo plantado en su mejilla se mostraba cada vez que el otro sonreía, suspiro cuando esté volteo a verlo posiblemente, esperando también una respuesta que no podría darle, no de la manera en la que el otro esperaba, por eso le miró con miedo y levantó nuevamente sus manos, está vez con más lentitud mientras miraba al chico a los ojos, que le miraba curioso por su repentina acción, movió su mano de arriba a abajo mientras cerraba su puño y suspiraba, el otro abrió sus ojos sorprendido al terminar su acción y se preparo para la sonrisa que siempre le daban, esa sonrisa de no entiendo nada, pero lo lamento, para que luego de eso el otro hiciera como que no existía.

Pero la sorpresa se plasmó muy bien en su rostro al ver al otro asentir y repetir su acción, moviendo sus manos con lentitud, formando una oración con sus manos.

"¿Eres mudo?" había preguntado el otro con sus manos, asintió con su cabeza, levantando sus manos con cuidado agregó "también sordo", vio al otro asentir mientras repetía la acción, y levantaba sus manos formulando otra oración.

"Entiendo, Soy Choi San, un gusto" abrió sus ojos sorprendido por la repentina presentación del otro, eso jamás había pasado a su alrededor, al momento en que alzaba su mano para explicar que no entendía, los demás asentían y lo ignoraban, pero acá el chico le miraba con una sonrisa en sus labios, vio al que ahora sabía se llamaba San mirarle curioso, esperando una respuesta, suspiro nervioso y le dedico una pequeña sonrisa con sus labios para luego alzar su mano y presentarse también.