𝕆𝕟𝕖 𝕊𝕙𝕠𝕥𝕤: 𝔄𝔪𝔦𝔠𝔲𝔰 𝔞𝔡 𝔄𝔯𝔞𝔰.

Villano.

♡Los villanos no son tan malos si la historia es contada desde otro ángulo. ♡

Sus ojos se movían de izquierda a derecha sin detenimiento, observaba a su familia y amigos hablar de aquel tema que era tendencia en Corea esa última semana, su novio a su lado tomaba su mano y la apretaba para que fuera participe también de aquella conversación, pero en cambio él solo negaba y prestaba atención a cada palabra, algo no cuadraba en aquella versión de la historia y eso lo tenía curioso y de alguna manera inquieto.

-Y la mató- finalizó su amada madre aquel relato, miró a su alrededor viendo las expresiones de exclamación, sorpresa, repudio y demás que la gente a su alrededor soltaba, pareciendole cómico de alguna manera, pues todos ya sabían el final de aquella historia.

-Pero... ¿No dicen que ella trató de matarlo también?- decidió preguntar luego de unos segundos de silencio, todos los ojos observando su persona y se removió, su novio a su lado mirándole tenso con una sonrisa más falsa que el cabello rubio de su prima.

-Cariño... Esas son habladurías- trato de hacerle entender su novio, su ceño se frunció.

-Pero todo lo que dicen de él también- recordó confundido- ¿O no?- preguntó un poco temeroso ante las miradas duras cayendo sobre su persona.

-Cariño, la historia ha sido contada así desde hace siglos, lo que nos indica que es real- le dijo su madre con una sonrisa falsa nuevamente, dejando los cubiertos sobre la mesa mientras alzaba la mano y pedía a alguien de la servidumbre que se acercara a recoger su plato- así que deja de querer entender más de lo que nos ha sido enseñado, sea cierto aquello o no, ya sucedió y todos lo creen así, por eso tenemos prohibido ir más allá del reino, cruzar el río esta prohibido por algo- eso sonó como una advertencia así que solo asintió no queriendo enojar más a su progenitora.

-Si mamá, lo siento- murmuró en voz baja, la conversación siguió su rumbo y aunque su novio le hablaba a su lado no podía prestarle atención, su tenedor picoteaba la comida sobre su plato, repentinamente el hambre se le había ido y no tenía antojo de ese postre que se hacía pasar por chocolate.

-Cariño, ¿Me estas escuchando?- fue entonces que miro a su novio a su lado y le sonrió pidiendo disculpas, pues efectivamente no había escuchado nada.

-Lo siento Yun, me quedé pensando en la historia- le explico en voz baja, no queriendo que nuevamente fueran obligados a comentar lo que conversaban frente a todos por órdenes de su padre.

-No pienses tanto en eso amor, sucedió hace siglos- le trató de tranquilizar su pareja así que simplemente asintió dejando la conversación hasta ahí- ¿Quieres que me quede a dormir contigo hoy también?- le pregunto y la sonrisa que tenía en sus labios le afirmaba que Yunho esperaba cualquier cosa menos dormir, no, aún no estaba listo para ese paso.

-Está noche no, Yun- negó aquello.

-Vamos Woonie, llevamos toda una vida juntos, sería bueno que diéramos el siguiente paso de una vez- renego su pareja alzando un poco la voz, cosa que le enojo.

-Dije que No Yun, no quiero, no estoy listo, no quiero hacerlo contigo solo porque es mi obligación como príncipe, espero entiendas eso- dijo con rapidez, su mandíbula tensa mientras escupia aquellas palabras.

-¿Qué tanto conversan ahí?- soltó una maldición cuando su padre hizo aquella pregunta- saben que tienen prohibido murmurar entre ustedes cuando estamos nosotros, es una falta de respeto- casi gruñó aquello el hombre, se tenso sabiendo lo que seguía- ¿Qué hablaban?

-Nada papá- trato de salvarse de aquella conversación, aunque obviamente Yunho no pensaba lo mismo.

-Quería quedarme a dormir con Woonie hoy, pero dijo que no- soltó Yunho claramente molesto por la respuesta que había obtenido.