𝕆𝕟𝕖 𝕊𝕙𝕠𝕥𝕤: 𝔄𝔪𝔦𝔠𝔲𝔰 𝔞𝔡 𝔄𝔯𝔞𝔰.

Psycho I

♡Solo eran dos locos obsesionados.♡
...

"Y ahora en otras noticias, dos adolescentes del barrio bajo de Seúl están siendo buscados por la policía al haber escapado de sus hogares, siendo uno de ellos menor de edad.
Los adolescentes llamados Jeon Yunho de 22 años y su hermano menor, Jeon Taehyung con 18 años están siendo buscados por todos los alrededores del país.

-Ellos decían que se amaban, ellos estaban enfermos, están mal de la cabeza-

Es lo que la madre de los chicos declara, pidiendo ayuda para encontrar a sus hijos quienes huyeron en un acto de "amor", si tienen información sobre ellos por favor no duden en contactarse con la madre al número que ahora ven en sus pantallas."

San apagó la televisión sintiendo náuseas en su interior al escuchar la noticia que era la comidilla de Corea ese mes, no comprendía como personas así de enfermas podían existir, personas que se enamoraba de un familiar y huían, su mente vagaba hacia el pasado donde recuerda haber conocido a Yunho cuando eran pequeños, ambos jugaban mucho y eran muy unidos, hasta que Tae se unió a ellos cuando cumplió finalmente sus 5 años y podía caminar aunque sea un poco, uniéndose a sus juegos de niños pequeños, la imagen de Yunho tomando la mano de un pequeño Tae y besar sus mejillas con cariño ahora lo hacia pensar de más, su estómago se revolvía ante los sentimientos encontrados en su interior.

-Sannie... Me gustan los chicos-

Recuerda claramemte cuando su mejor amigo se lo confesó cuando cumplió 20 años, lo sospechaba desde antes así que no opino nada sobre el tema, él sabía que la homosexualidad era un tema que aún era muy frágil en Corea y si su amigo se lo confesaba era porque confiaba en él y sabía que no lo echaría de cabeza.

-Está bien, solo ten cuidado-

No podía juzgarlo porque a él también le gustaba follar con hombres, no sentía algo más allá que atracción sexual por ellos, ese sentimiento de superioridad al someterlos era algo que lo excitaba, ellos soportaban mucho más que las mujeres, aunque éstas lo prendían de igual manera, los hombres lo satisfacían de maneras superiores, era algo exquisito, simplemente una sensación superior.

-Me iré, me llevaré a Tae conmigo-

Recuerda las palabras de su amigo esa madrugada, hace un mes precisamente, cuando llegó a su casa a despedirse de él, pidiéndole que no dijera nada a nadie sobre hacía donde se iría con su hermano, aceptó sintiendo asco en su interior hacia ellos dos, pero al fin y al cabo eran sus amigos, por ello los despidió y pidió se cuidarán, dejándolos escapar en silencio, quizás desde ese momento supo que algo andaba mal con su cabeza.

No sabía cómo había sucedido eso con sus amigos, enamorarse de su hermano, de su propio hermano, era algo mucho más antinatural que ser simplemente alguien homosexual según la sociedad, y viéndolo de esa manera, la sola idea de verse a él enamorado de su pequeño hermanito lo hacía tener arcadas, preparándose para vomitar, Jongho era eso, su hermano, su hermano pequeño.

Observó la puerta de su hogar abrirse viendo entrar a su madre por esta con una sonrisa, algo bueno había pasado.

-Hola mamá- la saludo viendo como dejaba las bolsas sobre la mesa de la cocina.

-Hola cariño, ¿Y Jongho?- le pregunto por el menor.

-esta dormido ya, son las 10 de la noche por si no te diste cuenta- le recalcó virando sus ojos con obviedad.

-Oh... No pude desearle buenas noches- murmuró ella para luego encogerse de hombros con sencillez absoluta, como si el hecho fuera algo mínimo.

-Como si alguna vez lo hubieras hecho- le reprendió con tono sarcástico, sabiendo que su madre no diría nada al respecto por ser verdad.