Un joven de ojos verdes

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Estaba sentado suspirando nuevamente y notó que se le había pasado el tiempo pensando. Su padre se había ido en una misión con Apolo DeVilliers y hacía ya muchos días nadie sabía de él. Ni su esposa, ni el Ministro mismo. No es que le preocupase tanto que su padre no fuese capaz de cuidarase por sí mismo, en lo absoluto. Harry Potter era el mismísimo salvador del mundo mágico, uno que parecía recordarle todos los días que se le parecía mucho y que esperaban grandes cosas de él.

Gruñó por lo bajo. ¿Por qué no podía parecerse a su madre un poco mas? Aunque ella decía que en esencia, él era con quien mas se sentía a gusto hablando y sobretodo con quien mas se sentía identificada incluso cuando él solo pensaba que lo decía para calmarle.

- Eh muchacho listo, ¿que haces encerrado aquí? Es buen tiempo para volar en escoba - le dijo un hombre de cabello canoso y sonrisa amena mientras se acomodaba los lentes. James Potter le miraba desde el umbral de la puerta de aquella habitación y decidió sentarse junto a él - ¿Pensando en una chica?

- Puede que sí, puede que no.

- Si me lo preguntas, creo que a ella también le gustas - le guiñó James mientras que el joven se giraba y sonreía levemente - ¿Por qué no le envías unas flores?

- Ella está terriblemente lejos de aquí abuelo, por Merlín y no quiero que...que se entere de...bueno, ella no me ve de esa forma - suspiró mientras clavaba sus ojos en una foto donde estaba aquella jovencita de ojos grises abrazada a una pelirroja de hermosa sonrisa - por mas que lo desee.

- ¡Agh! Deja de compadecerte. Han pasado tiempo juntos, ¿no? Los he pillado, no creo que sea tan indiferente a tus sentimientos - le animó James - Vamos, puedo darte unos cuantos trucos.

- Abuelo, insisto. Lo menos que me preocupa en este preciso instante es ella. Realmente pensaba en papá - confesó mientras que se sentaba para ver mejor a James - ¿Podrías dejarme solo un instante? - sentenció con una mirada algo dura, como si de pronto recordara algo - Vine porque la abuela Lily ha insistido, pero no creo que quiera hablar contigo después de todo.

James por un instante parecía herido pero tragó grueso intentando recuperar la mirada del chico.

- Hijo, yo...

- No insistas, solo haz lo que tengas que hacer. Después de todo, no es que tu y yo tengamos mucho en común - siseó sin verle, casi como si le molestara

- Veo que aún no me has perdonado, ¿no es así? - preguntó James mientras se levantaba.

- Mi hermano es el mejor candidato para tus preocupaciones y afectos, abuelo. Por mi parte, no debes esperar mas. Supongo que ser un Slytherin debe haber dañado completamente la reputación de los Potter - alzó una ceja con arrogancia el muchacho de ojos verdes. James pensó que en ese instante, aquella petulancia y arrogancia eran dignas de un Slytherin y se sentía un poco miserable al recordar las palabras que le había dicho siendo solo un niño - No te preocupes abuelo, no me iré esta vez. Quiero demasiado a la abuela Lily como para hacerle semejante desplante, pero por favor, no pretendas ser mi mejor amigo, solo fallas monumentalmente.

James le dio una última mirada cargada de dolor y cerró la puerta tras él con cuidado. El joven de ojos verdes hundió su rostro entre sus manos y suspiró. Aún recordaba las palabras de James hacia Harry, cuando recién llegaba a pasar navidad con ellos. Lo había escuchado claramente, lo consideraba una serpiente traicionera y sobretodo sabía que su hermano sería el predilecto ya que era el único Gryffindor en casa.

Quizás por esa razón había decidido ser el mejor en todo, incluso en el Quidditch derrotando a su propio hermano un par de veces. Quizás por ello se dedicó a ser premio anual y prefecto, puede que incluso por esa razón se haya decidido sobresalir a pesar de todo y consagrarse como el Slytherin mas prometedor de su generación.

Giró sus ojos hacia la foto y sonrió al ver el rostro de Cassiopeia mientras sacaba la lengua de manera juguetona.

- Cassie, desearía que estuvieras aquí.

Hola a mis queridos y fabulosos lectores. Se que tienen muchas teorías y amo leerlas. Quizás unos acierten y otros no, me encanta mantenerlos en suspenso.

Quiero darles las gracias por leer y por estar. Son los mejores lectores que alguien pueda tener. He estado pensando en llevar esta historia a un formato mas amplio y quizás darle una vida mas larga y capitulos mas extensos a esta pequeña saga basada en los merodeadores de Harry Potter.  De todas las historias que he escrito esta es a la que mas amor le tengo, mi pequeño bebé.

Si tienen algún comentario, sugerencia, mensaje, pueden dejarlo.

❤🌑

Los Merodeadores - Desafiando al DestinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora