Los Merodeadores - Desafiando al Destino

Chapter 68

- Te quedará bien.

Lyra sonrió hacia su madre quien le miraba con algo de preocupación mientras tocaba su vientre.

- El bebé...

- He hecho un hechizo de extensión, el vestido no te apretará en lo absoluto mamá, pero debes quedarte quieta o puedo pincharte - suspiró la pelinegra mientras se concentraba en su tarea.

- Ya pinchas mi paciencia - bromeó Annabelle con ella mientras se miraba al espejo - Te ha quedado hermoso, bien podrías tener tu propia tienda de moda Lyra.

- Podría pensarlo, me gusta - sonrió mientras le miraba por el espejo - ¿Que crees que sea el bebé?

- Sirius dice que será un niño, yo pienso igual. ¿Tu que opinas?

- Lo amaré de todas formas, pero sería lindo si es una niña. Me habría gustado tener una hermana con que compartir un poco - se encogió de hombros - Me gusta verte de esta forma mamá, feliz. Supongo que debes amar demasiado a papá, puedo preguntar, ¿cuando supiste que estabas enamorada de él?

- Eso está sencillo - sonrió Annabelle mientras se mordía el labio - Siempre quise que Sirius fuese mi amigo, tu padre era un terrible mujeriego en Hogwarts, en serio lo era, pero en verano nos encontramos en Hogsmeade, habíamos estado escribiendonos, pero estar allí con él me hacía recordar lo bien que me sentía cuando estábamos juntos, conversando y él haciéndome reír con sus idioteces, ese día me dió un anillo de dulce. Estuve como una idiota pensando en eso toda la tarde y lo supe, estaba perdida por ese idiota - dijo con el rostro sonrojado - ¿Que hay contigo y con Harry? ¿Las cosas van bien?

- Más que bien - dijo con ánimo la pelinegra - Harry es...lo más dulce del mundo. En serio le quiero más de lo que él mismo se imagina.

- Lo romántica seguro lo has sacado de mi - bromeó con ella - ¿Algo que debas contarme?

- ¿Algo como que? - preguntó Lyra temerosa mientras con un movimiento se su varita acomodaba la altura del vestido.

- Tu y Harry son un par de adolescentes enamorados y creo que ya te he dado la charla de como vienen los niños al mundo - Annabelle alzó una ceja y le miró con seriedad - No te estoy sermoneando, también tuve tu edad. Solo pido que seas prudente, si necesitas algo yo...

- Sirius también ha intentado darme esa charla, mamá. Pierde cuidado, la recuerdo de memoria, te lo aseguro - le tranquilizó.

- Harry es un chico muy dulce, no me sorprende que terminaras enamorada de él. Tienen el mismo espíritu y sobretodo un gran corazón.

- Mamá, ¿crees que Harry y yo seamos felices en el futuro?

- ¿Por qué no habría de ser así? - la mujer rubia se giró hacia su hija y esta le miró con preocupación.

- No lo se, tengo miedo de que no sea así. Amo a Harry, tanto que a veces me siento una idiota porque...solo soy una adolescente y puede que él no sea el único chico en mi vida pero...quiero que lo sea. Quiero que mi historia feliz sea con Harry y con nadie más que él - suspiró mientras se sonrojaba y bajaba su mirada para seguir con el vestido - Debo sonar como una tonta.

- No lo haces cariño. Escucha, si Harry te quiere tanto como tú a él, estoy segura que tendrán ese final feliz que tanto deseas, te lo aseguro.

Aquella declaración tranquilizó un poco a Lyra quien aún pensaba en aquel joven de Hogsmeade. ¿Sería prudente decirle a Annabelle? Seguro no, era mejor no preocuparle.

- Lyra, mientras estés aquí, tu padre y yo te ayudaremos con el esférico, tienes que aprender a controlar su magia. Parece que de alguna forma, debes conocer ese objeto mejor, Ubunta está de acuerdo en ello aunque yo considero que es peligroso para una niña como tú - le habló Annabelle y Lyra detuvo lo que estaba haciendo para mirarle de frente.