- Mantente alejado de ella.
La mirada asesina de Lyra dejo muy claro todo. James solo se quedó en su lugar mientras que la pelinegra pasaba por un lado ciertamente molesta. Lily quien ya conocía el trasfondo de todo esta vez se mantuvo al margen aunque la necesidad de hechizar a James por su estupidez aún se mantenía.
- Cariño, ¿puedes venir? - preguntó Annabelle a su hija antes que logrará subir las escaleras - Por favor, ven.
- Mamá, ha sido una noche realmente horrorosa, yo no quiero...
- No quieres, pero necesitas hacerlo - la mujer rubia tomó su mano y le llevo hasta una pequeña habitación con una biblioteca. Lyra parecía contenerse y su madre la conocía muy bien - Esto debe ser muy abrumador para ti y entiendo que...
- No mamá, no entiendes. Ni siquiera yo puedo comprenderlo - soltó con fuerza - ¿Una hija? Es más...¡Hijos! Tengo dos dementes hijos que han logrado crear un objeto que solo vive ahora en mi mente, mis ideas.
- No son dementes, Lyra - sonrió Annabelle pero la chica solo le dió la espalda - son brillantes aunque entiendo tu punto, yo estaría cabreada como tú.
- Ni siquiera...yo...no puedo imaginarmelos, yo...
- Creo que estás preocupada, todos los estamos. Pero se que lo que más te molesta es que Cassiopeia no ha dicho quien es su padre y que parecer ser todo un misterio, ¿en serio dudas de...?
- Tu sabes lo que ha visto Seferus, yo he visto parte de mi futuro y...un poco de él no se ve para nada prometedor y mira, bien que no me he equivocado. ¿Has visto el estado en el que llegó? ¿Cómo podría permitir que le pasara algo si lleva mi propia sangre? - Lyra se giró con lágrimas en sus ojos.
- Le has escuchado, no has podido estar allí.
- Es lo que me preocupa, ¿que tan mal puede estar todo para que no pueda cuidar de mis hijos? Esto es...
- Una locura - Annabelle le hizo sentarse mientras ella caminaba de un lado al otro - Si algo he aprendido es que nuestro camino no está totalmente escrito, podemos cambiarlo, y sinceramente cariño dudo que no sea Harry quien...
- Tu no has visto la manera en la que Cassiopeia se ha abrazado a Apolo - soltó rápidamente la pelinegra - es como si le conociera de toda la vida, como si tuviese un vínculo especial con él.
- Pero se han peleado hace unos minutos, supongo que no podemos hacer conjeturas.
- ¿Que pasa si es cierto? Si realmente por más que lo intente, Harry y yo no estamos destinados a estar juntos. Que de alguna forma, tendremos que enfrentarnos. Mamá, yo no podría...y...Cassiopeia no ha querido dar detalles de lo que pasa lo que me hace pensar en que tengo más razón de la que debería.
- Podría intentar hablar con ella - Lyra suspiró y negó a las palabras de Annabelle.
- Hay algo en ella que me hace pensar que es muy buena ocultando cosas y que hace magia mucho mejor de lo que cualquiera de nosotros pensaría.
- Me recuerda entonces a alguien que conozco - la rubia le tomó de la mano y sonrió con dulzura - Hay algo en Cassiopeia que por más que se parezca a ti, no lo hace totalmente. Creo que podríamos enfocarnos en eso para determinar quién es realmente su padre. ¿Te sorprenderías si no es Harry?
Aquello había estado rondando en su mente desde que había llegado Cassiopeia. ¿Podría soportarlo?
- Sinceramente no lo sé - Lyra hundió su rostro momentáneamente en sus manos y suspiró para luego mirar a su madre - Si es Apolo yo...estaría algo aturdida. Por el solo siento está profunda amistad que...es decir, se que el está enamorado de mí pero yo no de él, no por ahora eso es claro. Apolo no es un mal tipo es solo que no siento nada por él.
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Los Merodeadores - Desafiando al Destino
FanfictionHarry Potter y Lyra Black tienen algo en común mas que ser hijos de los Merodeadores mas revoltosos de todo Hogwarts. Esta vez, deberán aprender a enfrentar a sus mas grandes enemigos y combatir sus miedos juntos. Desafiar lo que esta escrito será...