Los Merodeadores - Desafiando al Destino

Descubriendote

*Alerta de ligero contenido no apto para menores*

*Ligero pero sigue siendo NO APTO*

*Ah, ¿pos vas a seguir leyendo después de la advertencia?*

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Como habían prometido, Apolo y Lyra se llevaban a Harry en medio de la noche para entrenarlo, pero también se había unido Jacob, Sebastian y Alan. A veces, James o Sirius se turnaban para observar.

Harry quien solo había visto a Lyra en aquella batalla en el Ministerio, se quedó boquiabierto de su manera de defenderse y notó que ninguno de sus amigos era rival para ella y que incluso Sirius tuvo que dar por zanjado aquel duelo que tuvieron pues su hija casi lo deja exhausto. Los entrenamientos eran duros y el castaño se preguntaba si Lyra había tenido que batallar con eso desde pequeña y así se había hecho tan buena, aunque no tenía nada que envidiarle. Al igual que ella, había derrotado a Jacob quien dio batalla hasta el último segundo, a Alan quien perdió cuando Harry atinó de lleno en su pecho y con Sebastian quien intentó acercarse usando una maniobra de pelea física que Harry supo como desviar.

Mientras, Apolo era el único de todos los chicos quien se mantenía al margen, también Lyra que afirmaba que solo se enfrentaría al ahora llamado elegido cuando este estuviese realmente listo.

Había notado muchas veces la mirada de Lyra en él, ella sonreía y se mordía el labio inferior para luego cabecear y darse media vuelta. Aquel entrenamiento no solo era en base a duelos sino físico y Harry cada vez parecía verse mas tonificado.

Hermione quien asistía y también se unía a las practicas sonreía divertida cada vez que Lyra se distraía mirando a Harry de reojo y Sirius bufaba ante aquello. Gracias a la castaña, Lyra podía escabullirse a la habitación de Harry por medio del balcón sin que nadie lo notara. Jamás le pedía detalles pero de igual forma no era necesario, Lyra se metía con ella en la cama y le contaba todo con lujo de detalles incluso aquellos que dejaban a Hermione sonrojada.

- Entonces - comenzó Hermione una noche - tu y Harry solo se besan, ¿cierto?

- Basicamente - respondió Lyra mientras miraba al techo con Hermione a su lado.

- Pero te comes a Harry con la mirada y eres demasiado obvia - soltó haciendo soltar una carcajada a la pelinegra.

- Bueno, Harry realmente se está poniendo buenísimo y no puedo evitar pescarle el culo, ¿sabes? Además, no te hagas la santa Granger te he visto echarle el ojo a Roncito cuando se quedó - Lyra se acomodó para verle - ¿Por qué no le dices que te gusta?

- Claro que no...

- No soy idiota Herms, ¿crees que no lo se? ¡Vaya que debo tener cara de tonta! Se que te gusta Ron y no es un crimen.

- El no me ve de esa manera - soltó con algo de molestia - para él solo soy su mejor amiga.

- He aprendido que es inevitable enamorarte de tu mejor amigo, mira a mis padres, incluso yo me he enamorado de Harry. Si Ronald no ve lo asombrosa que eres ya es su maldito problema dear, pero tu, eres grandiosa - le dijo con sinceridad.

- Gracias Lyra, en serio. Harry tiene razón - habló con una sonrisa en sus labios - a veces es imposible sentirse triste cuando estás tu. Aunque dice que eres muy parlanchina, pero parece mas un cumplido que otra cosa.

- Herms, me siento culpable por Ginny. En serio no quería herirla pero...no sabía que me enamoraría de Harry y que él también sentiría lo mismo.