Seferus era una profetiza y sobretodo una bruja muy diestra, hacia muchos años rondaba en el mundo e incluso el mismísimo Nicolás Flamel era un íntimo amigo suyo, pero tenía ciertas debilidades y sobretodo un corazón muy blando algo que su hermano mayor antes de morir le recriminó hasta el cansancio. Una de sus debilidades ciertamente era proteger criaturas que consideraba en peligro y aunque intentase alejarse de los problemas algunos valía la pena correr el riesgo.
Ver a Alan Potter era ver la mismísima imagen de Harry, un joven que conoció mientras la guerra contra Desmond Thackery daba lugar, Seferus bien podía recordar sus pensamientos y la manera en que se sentía. Los latidos del corazón de Harry Potter tenían una única dueña y esa era la razón de librar una batalla que no era ni sería nunca la suya. Sin embargo detrás de aquellos ojos verdes de Alan había un espíritu aguerrido, amable, curioso y su mirada era la misma de su madre sobretodo cuando intentaba traspasar e intentar descifrar cada palabra que decía.
- Es idéntico a Harry - le dijo Lyra aquella última vez - pero me enorgullece pensar que es muy parecido a mi en todo lo demás, aunque todos digan que es la viva imagen de su padre. Sirius por otro lado, es idéntico a mi padre, por lo tanto todos dicen que es mi imagen y semejanza pero si hablas con él te darás cuenta que es tan impulsivo como mi adorado esposo y sobretodo le falta tolerancia para aquello que no puede comprender tan fácilmente. Si te hablara de Cassiopeia quizás te sorprendería saber que es una mezcla entre ambos, ha sacado literalmente lo mejor y lo peor de Harry y de mi, pero es...adorable. Es complicado, supongo que mi madre vino una vez aquí para protegerme pero tenía este mismo miedo, ¿no? De perderme. Tengo miedo que algo un día me aleje de ellos, que no pueda protegerles y...este sueño...Harry y yo sacrificamos muchos años en lograr un mundo mucho más seguro para ellos y sería increíble pensar que nada valió la pena.
- Tu esposo piensa que quizás es...
- Le pedí que me dejara contigo a solas porque Harry se mantiene optimista, supongo que un hábito que le he contagiado en mi juventud pero, despues de todo lo que he visto, y he vivido, me rehuso a no tener un plan de respaldo - Lyra se paseaba como un león enjaulado por todo el lugar mientras su respiración se aceleraba - ¿Por qué razón Alan estaría conmigo? ¿Con mi versión más joven? El es el más sensato y dudo que tenga conocimiento de viajar en el tiempo, ni siquiera con un giratiempos.
- ¿Que hay del artefacto? Veo que...
- Si puedes ver bien en mi cabeza, todo eso quedó allí. En ideas, en un cuaderno bien resguardado. Se quiénes son mis hijos y que pasan su día curioseando entre las cosas de su padre y las mías intentado encontrar algo interesante pero eso siempre se ha mantenido en mi escritorio, créeme Seferus, lo reviso todas las noches antes de dormir.
- Bien, entonces quizás sea solo una visión infundada por tus propios miedos. Aunque, ¿recuerdas ese pensamiento que nunca te abandonó?
- Señora Ubunta, usted puede ver el futuro, quizás...
- Querido Alan, no puedo ver a tu madre, lamentablemente pero, puedo y vine a decirte lo que he visto hace unos días - ella rebuscó en su bolso mientras sacaba algo parecido a un cráneo - Tu madre tuvo esto en su poder cuando tenía la edad de tu hermana, aprendió a manejarlo de una manera en la que yo en todos mis años jamás lograré hacer. Si me dejan decirles, que muchos le hayan dado la espalda a tus padres solo indica el nivel de poder que tienen ambos.
- Les quieren fuera de su camino - dijo Sirius mientras miraba a su hermano - Tiene sentido, el ministro Noruego ha dado una alerta de caza tanto por mi padre como por ella. La ha nombrado como una detractora. Para él que mi madre quiera salvar a papá es una amenaza, la considera su secuaz.
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Los Merodeadores - Desafiando al Destino
Fiksi PenggemarHarry Potter y Lyra Black tienen algo en común mas que ser hijos de los Merodeadores mas revoltosos de todo Hogwarts. Esta vez, deberán aprender a enfrentar a sus mas grandes enemigos y combatir sus miedos juntos. Desafiar lo que esta escrito será...